Desde el incidente de los príncipes con el dragón, el rey prohibió a Lione salir del palacio, y mandó a construir una muralla al rededor de la ciudad para evitar que el príncipe intentara salir, aunque el pueblo siempre pensará que fue por su seguridad.
Para Lione en realidad esto no resultaría ningún problema, gracias a sus problemas podía ir de un lugar a otro sin que nadies se enterase, aunque desde aquel accidente, era reacio a volver a utilizarlo por temor a que alguien salga herido como su hermano, así que decidió prestarle toda la atención a su hermano.
Por su parte, David, tuvo que pasar varios meses en cama sin poder moverse para poder recuperarse, los días eran eternos, no podía salir, tampoco jugar con su hermano o ver mundo, los días eran horrible, pero cuando llegaba la noche eso cambiaba, su mundo se llenaba de luz y de emoción gracias a las aventuras que su hermano Lione le contaba todas las noches antes de dormir.
No pasó mucho tiempo para que el Consejo decidiera que Lione, como futuro heredero, debía estudiar para aprender a gobernar el reino, sin embargo los miembros del Consejo quedaron impactados por los poderes de Lione, nada más abrir los libros los cerraba, este con tan solo 11 años ya tenía conocimiento sobre toda la historia del mundo, así como la diosa, y la guerra, todo lo que venía en los libros era algo innecesario de leer.
-¡Majestad, venga rápido! -se apresuró a decir un miembro del Consejo-. ¡Es el príncipe Lione!
-¿Ha pasado algo con sus poderes? -dijo el rey tranquilo de camino al archivo real-. Si es eso, no hay por qué alarmarse, la reina me comunicó que esto pasaría tarde o temprano.
-No estamos preocupados, majestad, sino impactados, hoy íbamos a empezar con sus lecciones de historia, pero en cuanto empezamos... Bueno, no se puede decir que empezáramos en realidad, Lione ya conoce todo lo que viene en los libros de historia, con todo detalle, y hay algo más...
El rey abrió las enormes puertas de la sala de golpe y se quedó impactado, se congeló ante lo que tenía ante sus ojos, no comprendía lo que estaba pasando, Lione se elevaba en el aire con unas extrañas alas que parecían de cristal.
-¡Lione!
El rey se acercó a su hijo y se dio cuenta de que estaba recitando la historia de Kaleira, pero como si estuviera inconsciente, no parecía ser consciente de lo que estaba diciendo.
-Es lo que intentábamos decirle, está recitando la historia como si la hubiera vivido, es impresionante.
-¿Hermano? -dijo el príncipe David quién se asomaba tímido apoyado en la puerta ante aquella escena.
David ya sabía desde hacía tiempo que su hermano había despertado sus poderes completamente, pero para David aquella era la primera vez que sus poderes de activaban solos.
Las alas de Lione empezaron a desaparecer de repente y el joven príncipe cayó de espaldas al suelo.
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El regalo de los ángeles
FantasyFamosa se hizo la eterna guerra entre Migh y Wilders, una guerra que involucró a todas las razas de lo que era conocido como las tierras inferiores, pero más famoso se hizo su final: una extraña luz caída del cielo, la aparición de una diosa entre...