Capítulo 8: Entrenamiento (Prólogo del mini arco)

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Capítulo 4. Entrenamiento (Prólogo del mini arco).

El anciano, junto con el joven Kamado y Uchiha salieron de la cabaña.

Una vez fuera de ahí.

—Sasuke. —el anciano le dirigió al palabra al azabache mientras caminaban hacia la parte más alta de la montaña. —Dijiste no ser usuario de ninguna respiración, y era de esperarse, eres capaz de pelear mano a mano con tres demonios y sin ningún rasguño. Debo decir que es un caso único.

—No es para tanto. —respondió restándole importancia. —Aunque de cierta manera siento curiosidad por saber cómo funciona el método que usan los cazadores. —finalizo el Uchiha.

—Disculpe Sasuke. —hablo Tanjiro finalmente. —Aquello que le hizo al último demonio. —el joven pelirrojo recuerda aquel último grito desgarrador por parte de aquel devora-humanos.

—Tanjiro. Hay cosas cuya respuesta se sabrá en el momento adecuado. —respondió con simpleza el azabache.

—Está bien, lo siento.

—No hay porque hacerlo. Recuerda que, es mejor preguntar a quedarse callado y con la duda.

El anciano Urokodaki observo la interacción de aquel par.

Quizás Tomioka tenga razón. Aquel par puede que haga la diferencia y haga que esta guerra milenaria termine al fin. —pensó el anciano en sus adentros.

En el transcurso del resto del camino hubo silencio. Horas después ya habían llegado a la cima más alta de la montaña.

—Bien Tanjiro, esta prueba consiste en descender la montaña antes del amanecer, si lo logras te enseñaré todo lo que sé. —el anciano ahora miro al Uchiha. —En cuanto a ti, sé de lo que eres capaz así que pedirte lo mismo no tiene sentido.

—Tengo interés en saber acerca del tema de las respiraciones. Solo eso necesito y saber que respiración domina usted para poder usarla por el momento. —directo como siempre Sasuke le planteo lo que quería a Sakonji.

—Bien. Si eso es lo que quieres, descendiendo la montaña te contaré todo y al amanecer te mostraré las posturas de la respiración que uso. —aceptando la petición del Uchiha el anciano siguió su camino descendiendo la montaña.

Sasuke volteo a ver a Tanjiro.

—No te confíes. Hazlo a tu ritmo y no te apresures. —le dijo mientras alcanzaba a Urokodaki, ambos se perdieron por la densa niebla de la montaña.

—¡Haré mi mejor esfuerzo! —con determinación Tanjiro comenzó a descender la montaña.

Descender la montaña parecía sencillo, pero en realidad era algo complejo para alguien amateur como el joven Kamado, el lugar estaba repleto de todo tipo de trampas que se accionaban al hacer contacto con ciertos sectores designados. Al principio se le complico al chico el hacerlo, sin embargo, gracias a su agudo sentido del olfato él logro tomar ritmo y así poder predecir donde estaban las trampas.

En lo que el joven Kamado descendía la montaña, Sasuke y Sakonji ya habían llegado a la cabaña, aprovechando la situación Sasuke siguió obteniendo información útil sobre los demonios, desde como asesinarlos, hasta los posibles rangos de ellos, que serían dos, Lunas Menguantes y Crecientes, en total son 12 demonios, enumerados del 1 al 6, ya sean Menguantes o Crecientes.

La conversación se prolongó por el resto de tiempo que faltaba antes del amanecer. Unos minutos antes de que los primeros rayos de sol iluminaran la montaña alguien tocó la puerta de aquella cabaña. Era ni más ni menos que Tanjiro, jadeante, con raspones y tierra en su rostro.

El Camino Hacia La Redención {Sasuke Uchiha En Kimetsu No Yaiba} [Crossover]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora