𝐏𝐫𝐨𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐋𝐚𝐛𝐨𝐫𝐚𝐥 [ 𝐅𝐫𝐞𝐞𝐧𝐁𝐞𝐜𝐤𝐲 | 𝐄𝐧𝐠𝐥𝐨𝐭]

𝐃𝐈𝐄𝐂𝐈𝐒𝐈𝐄𝐓𝐄

POV ENGFA.

Sacar la basura siempre ha sido un agobio para mi. Aunque reconozco que puede servir como distracción, puedo salir hasta el enorme basurero y observar la tranquilidad de mi alrededor.

Por supuesto que a partir de hoy el edificio no seguirá siendo así.

"¡AYUDA!"

Simplemente di dos pasos lejos de la puerta de mi departamento hasta que la puerta vecina se abrió de golpe y de ella salió una mujer soltando gritos llenos de horror. Brincó hacia mí, enredó sus brazos alrededor de mi cuello al igual que sus piernas se sujetaron de mis caderas.

Cuando vi su rostro, ella tenía los ojos cerrados fuertemente y su respiración era acelerada. Su rostro completamente lleno de temor ni siquiera me hizo preocuparme por el hecho de que la misma Charlotte Austin se había trepado en mí como un koala, solo pude pensar en su bienestar.

"¿Estás bien? ¿Qué sucede?"

"Lo siento, hay una cucaracha en mi casa."

Al abrir los ojos se quedó congelada cuando mi mirada chocó en la suya. Su ceño se relajó y su rostro atemorizado dió paso a uno lleno de vergüenza. Rápidamente me soltó por el cuello y dejó su cuerpo firme sobre el suelo.

"Estás.." Su murmulló murió allí, lucía totalmente descolocada.

"Sra. Austin, ¿qué está haciendo aquí?" Yo fui la primera en preguntar, deduje que ella también quiso hacerlo.

"Ohhh." Exclamó. "Bueno, es una larga historia." Pausó un momento y pareció pensar en algo. Sus cejas se elevaron en súplica y me echó una mirada de cachorro. "Lo siento, pero, ¿puedo pedirte un favor?"

POV CHARLOTTE.

"Está dentro de ese vaso." Hice saber.

Engfa observó el vaso blanco de plástico sobre el suelo. Dentro de él, estaba encerrado aquel horroroso insecto.

"Está bien." Dijo ella después de un silencio vacilador.

Corrí hasta la cocina cuando aquel maldito vaso se movió ligeramente y busqué en una de las puertas aquel insecticida que había comprado antes que todo. Sin salir de aquí, estiré una de mis piernas y brazos y extendí aquel insecticida hacia la linda secretaria.

Engfa lo tomó después de echarme una mirada confusa.

"Lo siento. Le tengo mucho miedo a los insectos." Hice saber con vergüenza.

"Está bien." Repitió de nuevo y con pasos tranquilos se acercó hasta aquel vaso. Se colocó en cuclillas y comenzó a rociar insecticida alrededor de él.