Empieza la guerra.

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Es el primer dia de clases en mi escuela y me siento lista para empezar una nueva etapa, no estoy nerviosa, pienso que todo sera "lindo". Me despido de mis padres, se encuentran muy orgullosos de mi, mi padre se llama Alberto, es de piel morena, sonrisa contagiosa, cabello castaño obscuro, ojos color verde y con cicatrices en su cara; tiene sus ojos llenos de lagrimas de felicidad. Mi madre me mira con una radiante sonrisa en su rostro, ella se llama Kattia, ella es de piel blanca, su cabello es muy ondulado como el mio, ojos color marron, sonrisa radiante como perlas, para mi ella es hermosa.
Mi mamá me arregla mis dos colitas, mi papá me besa la frente y me voy a empezar mi guerra.
Al principio todo fue "lindo" pero empezaron las bromas pesadas y el bullying empezo; era muy baja de estatura y mi peso no era el adecuado, tenia sobre peso infantil. Un dia conocí una niña llamada Heidy, ella era alta, delgada, de piel más morena que la mia, sonrisa brillante, sociable y muy "chistosa". Y yo? Si se lo preguntan yo era pequeña, muy gorda, cabello risado y negro, ojos marones como los de mi madre, de piel morena y muy acomplejada. Todo empezo un Martes por la tarde, la maestra salio y me pido que completara unas palabras en la pizarra, me sentia nerviosa, me levante al frente y comencé a escribir y solo escuche risas burlonas, sentia como me tiraban bolitas de papel pero lo que mas me dolia fueron sus palabras, "cerda, gorda, obesa, ballena, pelota de grasa..." fueron algunas de las muchas cosas que me decian, eso puso mi autoestima por el suelo. Ese dia llegue a casa y mis padres estaban peliando de una manera muy fea, mi papá tiro a mi madre al suelo y la golpio dos veces en su rostro, apezar de que no tenia fuerzas y mi miedo era mas fuerte que yo misma, corri a defender a mi madre, mi padre no soporto que yo me metiera y me pego tan fuerte que me tiro al suelo, mi madre llorando atormentada se levanto y saco a mi padre de la casa, ella se sento en el sillon de la sala y me sento en sus piernas, ella lloraba desconsolada mente y yo tambien al ver que no podia detener esas lagrimas.
Media hora despues se quedo tranquila, pero de sus labios salia mucha sangre, ella la limpia con un pañuelo rosa su color favorito, me miro a los ojos y me dijo; "amor, no tengas miedo, porque esto con tu padre me a pasado mas de una ves". Desde ese momento supe que la tenia que proteger

La victoria esta en Cristo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora