Visita

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Salgo de mi habitación y como de costumbre mi madre prepara el desayuno y mi padre está acostado viendo la televisión, me siento a esperar que ella termine.

Mientras tanto ella me da una noticia, me dice que mi abuela está mucho mejor y que hoy iremos a visitarla al hospital.
Siento una alegría inmensa, después de tanto tiempo hoy poder ver a mi abuela.

Mi padre sale de la habitación para comer su desayuno, no me habla, el me hace sentir como sí fuera un estorbo, trato de no ponerle atención y continuo con mi desayuno.

De pronto mi padre con una voz muy gruesa nos dice: -es estúpido que vallan, no es la gran cosa. Yo no le doy importancia entonces me levanto de la mesa y muy ansiosa me voy a preparar para ir a verla.

Todo va muy bien, mi día es mucho mejor que los demás días, mi madre y yo esperamos el autobús para ir a el hospital que queda a poco más de una hora de nuestro hogar.

Mientras esperamos me doy cuenta de que Heidy está en el mismo lugar que nosotras, me pongo muy nerviosa, siento que nuevamente me va a humillar.

De pronto escucho risas y un.grito que me decía: -Vanessa gorda asquerosa aún esta viva? Está mucho más cerda que antes. Mi madre reaccionó de inmediato y le dijo a la madre de heidy que la calmara sí no las que iván a tener problemas serían ellas, yo sólo abrazo a mi madre mientras nuevamente me siento pisoteada, la única diferencia es que tengo el apoyo de mi madre.

Ya vamos de camino, lo único que me alegra el día es saber que podré ver a mi abuela después de tanto tiempo.

Llegamos a el hospital, sus paredes son de un color pálido, hace mucho frío aquí dentro, hay olor a medicina por todo lugar, escucho personas con dificultad de respirar, hay doctores y doctoras por todo lado, este lugar no me gusta, lo veo triste, ¿como hace ella para estar en un lugar tan triste?

Subimos unos cuántos pisos para llegar, mi madre me dice que entre a una habitación, muy tímida hago lo que ella me dice, al cruzar la puerta veo una cama blanca, con sábanas verdes, al lado una bolsa con un líquido transparente que se conduce por un tubo hacia una persona que está hay acostada, me acerco lenta mente y hay está, mi abuela, por fin puedo verla y abrazarla, pero noto algo distinto en ella, esta muy palida, sus manos están frías y su mirada es triste, la abrazo para tratar de que este más feliz.

Nos sentamos a su lado mi madre y yo, mi abuela nos pide que le pongamos atención y nos dice: - hace más de dos horas un joven alto, vestido de blanco, me dijo que es un doctor que salva vidas, después de eso me entregó una bebida de color opaco y me dijo que la bebiera, lo hice, después de eso vómite varias veces, lo mire y me dijo "salvo vidas y también almas, déjame entrar a tú casa".

¡No es posible! Todo encaja perfectamente, mis sueños y lo que mi abuela me acaba de contar, todo es una señal.
Les cuento a mi madre y mi abuela mís sueños, me miran sorprendidas y mi abuela dice que Dios nos tiene algo preparado.

Termina la visita, es hora de irnos, veo a mi abuela más alegre, sólo espero que pueda volver a casa pronto.

Todo el camino llevó en mi mente la historia de mi abuela, sigo sin entender porque lo que el le dijo coincide tanto con mis sueños, pasan los minutos y le dejó de prestar atención a lo sucedido.

Llegamos a casa, mi padre está sentado mirando la televisión, nos mira con cara de desprecio, se levanta y dándole una fuerte cachetada a mi madre le grita que es hora de la comida. Mi madre solamente baja la cara y se dirije a la cocina.

El me mira con cara de odio así que me dirijo a hacerle compañía a mi madre. Mientras ella prepara la comida estamos.hablando de lo que le sucedió a mi abuela, pero Depronto mi padre entra ala camina guiándonos y diciéndonos que hagamos silencio, el mira la comida que hace mi madre y la tira al suelo girando que eso es una porquería, de nuevo mas peleas.
-su comida da asco, de verdad que yo sólo estoy aquí porque no tengo donde irme.
-Alberto usted es un mantenido y quiere que lo tratemos como un rey.
-usted callese porque yo traigo la comida a está casa.

Mi madre demasiado enfadaba le da muchos goles en la cara a mi padre, pero el es más fuerte, frente mís ojos la toma del cuello y le coloca en el piso, yo muy asustada grito para que alguien ayude a mi madre, yo.trato de hacer que mi padre la suerte pero no sirve de nada, el me mira con cara de burla, en un momento llega mi abuelo a casa y con una mano logra levantar a mi padre para darle una tunda.

Mi padre tiene su labio roto y un ojo casi morado por los golpes de mi abuelo, mi madre tiene su cuello marcado por las manos de ese hombre, su labio roto y su nariz sangrado, esto es una locura.

Cada día esto parece más a una guerra.

La victoria esta en Cristo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora