Pececillo (Yoonseok/Sope)

Capitulo 6

- P...para! -

- De verdad me estas pidiendo que pare? Solo mira lo húmedo que estás - Decía el peli negro embistiendo con más fuerza a Hobi haciéndolo gemir, Agust estaba siendo realmente brusco, más de lo que los clientes habituales solían ser, Hobi abría su boca soltando hilos de saliva que salían sin querer mientras sentía como el hombre lo tomaba de las muñecas jalando de sus brazos detrás de su espalda para provocar que su polla se adentrara más profundo en esa posición.

- solo un poco!... -

- Ruégame que tenga piedad - Decía saliendo del interior de Hoseok para voltearlo boca arriba aun sin quitar el fuerte agarre en las muñecas del menor apretando aun con mas fuerza provocando que Hobi gimiera de dolor y soltara lagrimas.

- Oh sino cada una de las partes... - Comenzó a pasar su lengua por los pezones erectos del menor.

- Aaahh!! -

- ...de tu cuerpo... -

- a..agust! - Gimió sintiendo sus piernas comenzar a temblar, el capitán se levantó solo lo suficiente para terminar de quitar su camisa y dejar al descubierto su marcado cuerpo sin dejar de mirarlo desde la altura mostrándose demasiado divertido con lo que estaba a punto de hacer.

- ...estarán bajo mis ordenes - La tela calló de la cama finalmente y sin aviso comenzó a lamer entre las nalgas de Hoseok, éste no pudo hacer nada mas que gemir con fuerza por la repentina intromisión de la lengua, incapaz de poder negarle el paso al hombre ya que sus manos ahora se encontraban sujetadas por la corbata negra que antes usaba D.

- Solo mírate, estas por correrte de nuevo con tan solo lamer un poco - Acarició el miembro erecto frente a sus ojos ensuciándose de pre semen observando desde esa distancia aquel sonrojo en el rostro ajeno.

- Te excita ser mi juguete, Jay? - De un solo movimiento jaló las dos piernas del joven colocándolas en su hombro derecho y aprovechando la distancia para poder meter su gran miembro sin aviso alguno.

- AAAHHHHGG!!! -

- Sera mejor que te relajes - Con una embestida terminó por entrar completamente al ano de Hoseok, para evitar que el invitado escuchara sus gritos tapó de inmediato su boca sintiéndose un poco asustado cuando vio a D fruncir el ceño.

- Vamos, muéstrame tu verdadera debilidad! Déjame escuchar tus gritos! - Chocó su piel con la del menor con fuerza, Hoseok de verdad quería gritar, pero a su mente solo venia una persona, una persona con la que si estaba dispuesto a mostrarse débil y gritar como un maldito loco, y ese no era Agust.

- jamás! - Estaba condenado, había roto la mas importante regla que Jackson le había dado para poder mantener complacido a ese tipo, pero no quería doblegarse, no estaba en su naturaleza seguir la corriente de nadie a pesar de que se encontraba bajo las ordenes de Jackson, pero si debía de hacerlo lo iba a hacer solo con Yoongi.

- Veo que eres la terquedad en persona - Volvió a moverse clavando con insistencia los dedos en la tersa piel de Hoseok mientras escuchaba el sucio chapoteo de los fluidos de ambos.

- Es demasiado tarde para escapar... pececillo - Los ojos de hoseok se abrieron por completo, lo había llamado pececillo, solo Yoongi le decía de tal manera, ahora estaba mas confundido que nunca ¿Quién carajos era ese hombre? ¿Por qué lo había llamado así? ¿Acaso tenia alguna relación con Yoongi? pero sobre todo su mas grande duda era el por qué ambos eran tan parecidos a diferencia de la cicatriz y sus peinados.

- No... no me llame así! -

- Te molesta? Es una pena, porque ahora ese será tu nombre - Empujó mas su palpitante miembro disfrutando del gemido ahogado de Hobi, D no sabía absolutamente nada del tema, pero de cierta manera desde su primer encuentro con ese chico en aquella pista de baile en su mente se instaló la imagen de un bello pez Koi dentro de una pecera nadando con tanta facilidad y tranquilidad, y D no iba a desperdiciar la oportunidad de poseer ese pequeño pez, lo quería para él solo y se encargaría de cumplir su capricho, después de todo él siempre obtenía lo que quería. Es así que sosteniendo con firmeza al menor comenzó con su vaivén de cadera deleitándose con la sensación de las paredes encerrando su pene y succionando cada vez mas, el sitio era tan caliente, tal vez como si quisiera quemarlo, adoraba escuchar ese sonido húmedo salir de Hoseok, su voz entrecortada pidiéndole que parara pues no creía poder aguantar más, no había sangre, D se aseguraba de eso, pero había fuerza y brutalidad en cada uno de sus movimientos, restregó su rostro en una de las pantorrillas del menor y se aseguró de lamer ese lugar, su piel era tan suave y claro que le propino unas cuantas mordidas asegurándose de dejarle sus marcas.