El LSD (dietilamida del ácido lisérgico) es un compuesto psicodélico que se produce naturalmente en un hongo conocido como ergot. Es una droga potente que puede producir efectos alucinógenos intensos y duraderos.
Los efectos secundarios negativos del LSD pueden incluir:
1. Ansiedad y paranoia extrema
2. Alucinaciones intensas y distorsiones sensoriales
3. Pensamiento y comportamiento desorganizados
4. Dificultad para hablar y comunicarse
5. Náuseas y vómitos
6. Aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial
7. Pánico y miedo extremo
8. Flashbacks o recurrencia de los efectos de la droga después de que los efectos agudos hayan pasado.
Además, el LSD puede ser peligroso para personas con ciertas afecciones médicas o psiquiátricas, como trastornos cardiacos, epilepsia o esquizofrenia.
A largo plazo, el LSD puede afectar la salud mental de una persona, especialmente si se usa con frecuencia. Puede producir cambios en el estado de ánimo, la percepción y la personalidad, y puede aumentar el riesgo de desarrollar trastornos psicológicos como la depresión y la ansiedad.
En resumen, aunque el LSD no es adictivo, su uso puede ser peligroso y debe ser tratado con precaución. Cualquier persona que experimente efectos secundarios negativos después de tomar LSD debe buscar atención médica de inmediato
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Drogas y el cuerpo humano: una mirada profunda para ver el viaje sin regreso
Acakesta historia abordará el extenso mundo de las drogas y sus efectos en el cuerpo, la idea es concientizar para saber que está consumiendo y el daño que le está generando al cuerpo
