Idylla

|| Intriga ||

La joven se encontraba en su habitación, este podría ser un día común, pero no, hoy era un día especial ya que su madre estuvo semanas planeando este día para que todo fuera perfecto

- ¿Vendrá alguien a visitarnos? – pregunto Idylla a la sirvienta que la estaba peinando

- Si señorita – le confirmó

Idylla no cuestionó más, se dejó arreglar para la ocasión, la sirvienta le hizo un semi recogido haciendo una hermosa cascada con sus risos y la adorno con pequeñas flores, le puso un simple maquillaje solo para resaltar más sus facciones, consistía en mascarilla de pestañas, rubor y un poco de tinta rosada en los labios, de vestimenta fue un hermoso vestido color verde pastel, el cual hacía destacar sus ojos color ámbar, su vestido tenía un corte v en la parte de arriba y varios holanes en la parte de la falda, era sencillo pero Idylla lo hacía ver elegante y costoso, para finalizar coloco ciertos accesorios, entre ellos fue un ligero collar que siempre portaba, era una pequeña mariposa, aretes pequeños y una pulsera delgada color dorada, del calzado fueron unas zapatillas color blancas eran bajas pero cómodas; y sobre todo no podía faltar una fragancia que hacía destacar a la joven, era esencia de vainilla, pero muy suave, incluso a veces era difícil de detectar el aroma.

Cuando estuvo lista la sirvienta se retiró y su madre apareció en su habitación, Idylla estaba parada enfrente de su cama, esperando alguna indicación

- Perfecta – alago su madre - hoy vendrá una familia importante, no olvides tus enseñanzas Idylla – le advirtió – todo debe salir perfecto

- Será como órdenes madre – hizo una ligera reverencia

- Salgamos al jardín, es donde llegarán

Idylla siguió a su madre hasta llegar al hermoso jardín, ambas tomaron asiento en una mesa para tomar el té, mientras llegaba la visita esperada. Pasaron unos minutos y el anuncio de la llegada de la familia los puso en alerta, consistía en la pareja con dos hijos varones

- Buenas tardes, señor y señora Relish – saludo el padre de Idylla

- Buenas tardes, señor y señora Villin – correspondió el señor Relish

- Pasen a sentarse y tomar el té – invito la señora Villin – siéntase cómodos

- Muchas gracias, son muy amables – admitió la señora Relish

Idylla solo se limitaba a observar y escuchar la conversación que tenían ambos padres de familia, todos se sentaron a la mesa e iniciaron su conversación sobre negocios que ambos pudieran asociarse, después de una hora el señor Relish al fin dijo algo que involucraba a Idylla y ella presentó atención aquello

- Señor Villin ya hemos hablado de negocios, ahora hablemos de algo más importante, ¿Cómo te llamas jovencita?

Idylla se había sorprendido por la pregunta directa, así que rápidamente miro a su padre esperando su aprobación y ella hablo

- Mi nombre es Idylla señor Relish – mostró una tímida sonrisa

- Bonito nombre ¿Le parece bien llevar a mi hijo mayor a conocer la sala de estudio? Me comentó su padre que sabe tocar el piano, a mi hijo también le gusta, tal vez les gustaría deleitarnos con su música cuando terminemos de conversar unos términos con su padre

Nuevamente Idylla espero la aprobación de su padre para contestar

- Sería un placer hacerlo señor Relish

Ambos jóvenes se levantaron de sus asientos y fueron caminado a la par al lugar de estudio

- ¿De verdad te gusta el piano? – pregunto aquel joven

- Así es

- Porque la verdad a mí no me gusta, lo hago por mi madre

- Oh, entiendo

- No hablas mucho ¿Por qué?

- No puedo contradecir sus gustos, usted sabe el porqué de aquello y no es mi deber saberlo

Aquel joven se quedó pensativo en lo que dijo Idylla, jamás espero aquello y era realmente interesante para él, normalmente cualquier joven estaría de acuerdo con él o estaría alagando sus dones, harían cualquier cosa para que él se interesará en ellas; pero vaya sorpresa que se encontró el día de hoy

- Vale, si tuvieras que elegir algún instrumento musical, ¿cuál elegirás? ¿Cuál te daría la sensación de estar en otro mundo?

Idylla parpadeo varias veces, pensando en que contestar, pero su mente había quedado en blanco ya que nunca había pensado en aquello

- ¿Ni una en especial? – continúo diciendo

- Mmm quizás... la flauta – se quedó recordando el sonido de este y la sensación que le trasmitía – hace el sonido del canto de los pajarillos y eso me recuerda al hermoso jardín del bos... - Idylla tuvo que silenciarse antes de revelar uno de sus secretos

- Sin duda es hermoso – le sonrió el joven – me aseguraré de que en nuestra próxima visita sea cerca de ese jardín – continúo caminando el joven como si de su casa se tratara

La joven no sabía cómo sentirse al respecto, salir de su hogar a ese hermoso lugar del bosque sin duda era un sueño hecho realidad, pero llegó el temor a ella que aquel joven le contara a sus padres sobre el bosque, y más si decía que ella tuvo aquella idea

- Joven... yo... no es... - sin duda sus nervios habían aumentado – no... - él la interrumpió

- Tranquila, su secreto quedará seguro conmigo, además también prefiero el bosque que estar en casa – aseguro con una sonrisa y honestidad que hizo que Idylla se tranquilizara

- Gracias – le devolvió una tímida sonrisa

- Por cierto, mi nombre es Ezra – hizo una pequeña reverencia y beso ligeramente la palma de la mano de Idylla

Ysin más a la par siguieron caminando al estudio para tocar el piano y deleitara sus familiares con el sonido de la música.