Una lámpara sobre una mesa en una habitación que se encontraba en oscuras se encendió, Cegando un momento a la sospechosa, Entrecerrando sus ojos mientras veía a un hombre totalmente encapuchado, De un gorro sobre su cabeza y el cuello de su abrigo fácil le llegaba a su nariz, Éste se sentó frente a ella, Mirandola fijamente y luego bajar la mirada donde habían unos papeles y unos archivos de tres personas
"Muy bien..Estuviste en la escena del crimen..Escondida...Mientras tres personas eran asesinadas en el mismo lugar...Cual es tu explicación?" Preguntó el que tal parecía ser el detective por la placa que llevaba
"Uh..Yo..No lo recuerdo..?" Murmuro en voz baja, Aún aturdida por los sucesos "Sólo..Recuerdo haberme escondido ya que escuche a alguien entrar a casa..La escuche gritar..lo escuche gritar..e incluso a mi creador..." Decía mientras su voz se tornaba triste
"Tú creador..Quién es?" Preguntó curioso, cruzando sus brazos mientras ella bajaba la mirada
"Era el hijo de los dos adultos..También murió, Su nombre era Alexander Eibar...Él me creó" Decía con una suave sonrisa, Levantando la mirada y mirar al detective
"Bien..Él era tú creador.. Podrías repetirme tú nombre y apellidos, Por favor?"
"A Inferno Eibar.." Decía un poco insegura, Mirando como lo anotaba el detective
"Volviendo al tema principal, Mencionaste que te escondiste al escuchar a alguien entrar, Quién era? Viste su aspecto?" Preguntaba el detective, Queriendo sacarle toda la información posible
"No..No lo ví, Perdón" Se disculpó en voz baja
"Mmhm..Cómo era su familia? Los Eibar te tomaron como una hija más o una amiga? Vivias con ellos?"
"Uuh...Me tomaron como una hija más, Vivía con ellos..Pero..La madre era alcohólica y el padre drogadicto y maltratador"
"Y eso le afectaba a usted?" Preguntó sin mirarla, Anotando todo en una pequeña libreta
"No, Porque no me hacían nada, Era un espectador, Todos los golpes e insultos se los llevó mi creador..." Decía con voz baja, Mirando las fotos de los archivos sobre la mesa
"Bien, Supongo que eso es todo lo que tenemos, estarás siendo vigilada, Pero podrás estar en tú casa" Él se puso de pie y tomó las cosas, Mirandola y llevarla afuera Mientras que dos personas se acercaban al detective
"Habló más esta vez? Soltó más información??" Preguntó un policía
"No, Ella hablaba muy bajo, Se notaba insegura, Era mejor hacer pocas preguntas sino se quedaría callada sin responder"
"Es inocente?" Preguntó el otro
"No, Sigue siendo sospechosa, Eventualmente sabremos lo sucedido y Ella hará lo debido"
"Me pregunto por qué quiere leyes en el infierno..Son demonios...Pero por lo menos algunos son agradecidos"
...
La inculpada caminaba por las calles del infierno, Maldiciendo en voz baja, Apretando el puño mientras movía su cola lado a lado, Pequeños diablillos la miraban fijamente por su aspecto en particular
"Jodanse..Jodanse..JODANSE! yo no los mate..no yo..." Murmuraba mientras maldecia a la gente que la inculpó, Ella estaba enojada, No tenía dónde ir, No podía ir a casa..De una manera...Se sentía culpable...
Pero no podía divagar por el infierno una y otra vez, Mirando un lugar donde quedarse, Mirando a los lados, Algunos demonios a escondidas la vigilaban, Mirando cada paso que ella llegaba a dar, Pero no ayudaban a que ella se sintiera mejor al respecto, La hacían sentir culpable
Sin tener donde ir, Sólo entró a un bar, Gente la miraba y es que llevaba un rastro negro detrás de ella, Lo que parecía ser tinta, Tinta que dejaba atrás con cada paso que daba, Se estaba estresando y era como si alguien le hubiera tirado tinta encima, Se paso la mano por la cara y miró al bartender
"Miren quien se apareció! Estas viniendo más recurrente, Sucede algo, Querida?" Preguntó el bartender, Apoyándose sobre el mostrador y mirarla con curiosidad
"Nada..solo me están tomando como sospechosa por estar en el lugar donde ocurrió un asesinato y aparentemente sólo yo salí viva.." Decía molesta en voz baja, Sentándose en un banquito y mirar a su amigo
"Mira..Escuchame bien, Sea verdad o mentira..Tendras mi apoyo, Lo sabes, Cierto? Sé que no pudiste ser tú, Pero recuerdas algo de lo sucedido?" Preguntaba con intriga
"No..? Sólo recuerdo correr y esconderme al escuchar alguien o algo..." decía en voz baja, Mirando a otro lado
"Lo entiendo..Vienes a hablar o a pedir algo?" Deseaba cambiar el tema, Mirandola con una pequeña sonrisa
"Hablar..Quiero decir..No es como si no tuviera dinero..Sólo que lo utilizo para comprar tinta..."
El bartender la miró fijamente y suspiro "Tinta, Huh? Para qué la usas?" Preguntó curioso mientras se ponía a preparar una bebida para otro cliente
"Para vivir..No ves que vengo arrastrando un montón de tinta, Es como comida para mi..Y eso me deja vivir más, Aún que..A estas alturas..De qué me sirve vivir...." Decía desanimada y triste
El bartender sólo se rio suavemente y siguió preparando la bebida "Hay cosas buenas en la vida, Arely, Sólo hay que encontrarlas!" Exclamó tratando de subirle el ánimo, Entregándole la bebida al cliente y volver donde A
"..¿'Arely'?" Preguntó confundida
"Es un bonito apodo para ti! Una simple 'A' no es un nombre verdadero, Te gusta? Hubo un tiempo en el que quería una hija, La quería llamar así, Pero ya sabes como fueron conmigo los de arriba" Decía apuntado hacia arriba, Refiriéndose al cielo, 'Arely' sólo miró al techo y luego entendió
"Oh..Eras uno de ellos..? Es por eso que eres tan amigable como para ser demonio?? Vaya..." Decía un poco aburrida en el tema, Golpeando su cabeza contra la mesa
"Sí.. Supongo que hablar con gente de aquí tampoco era permitido, Jeje" Sólo se rio nervioso y siguió con su trabajo, Dejando de hablarle a Arely un momento
Ella se quedó pensando..Pensó que quizás necesitaba compañia, No sólo de amigos, Sino de familiares
"Bien, Debo de irme, Zuri, Debo hacer algo.."
"Que te vaya bien, Querida!" Exclamó Zuri con una sonrisa y se despidió de Arely
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✧༺En Blanco Y Negro༻✧
FantasiaUn ser de tinta, Inspirado en una caricatura de los años 30, Su cola y cuernos característicos, Trata de seguir su vida apesar de ser inculpada del asesinato de su familia y creador, Viviendo por las calles más desoladas y crueles del infierno, En b...