PʟᴀʏBᴏʏ 🐰Jᴇᴏɴ Jᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ🐰

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Miley

Llevaba rato buscando los dormitorios pero no había dado con ellos "La universidad de Seúl", era inmensa y yo estaba más perdida que perro en autopista, habían muchos estudiantes, yo soy Miley, soy extranjera y me mude aquí a Corea del Sur a estudiar. Caminaba de aquí para allá viendo un papel que tenía un supuesto mapa que me llevaría supuestamente derechito a mi dormitorio, si... claro, seguí así adivinando cuando de repente un chico se acercaba a mí y me habla.

- Ey... Hola - Dijo caminando hacía a mí con una sonrisa que podría poner a cualquiera de rodillas, me miraba de arriba abajo - Nunca antes había visto una cara tan linda como la tuya ¿Eres de primer año? - Levantó una ceja - Pareces perdida.

Debo reconocer que era sumamente apuesto, no pude evitar sentir una atracción hacia él de inmediato. No era solo su apariencia, sino también la forma en que me hablaba y los ojos cafés profundos que tenía. Sentía que estaba en las garras de un seductor, pero no podía resistirlo.

Sentía como si estuviera en un sueño y no podía creer que estuviera a solo unos metros de distancia de un hombre tan atractivo. Un chico así sólo podía significar una cosa, un jugador, un playboy definitivamente yo no quería ser una más en la lista de sus relaciones.

- Hola... Sí, soy de primer año... Y tranquilo yo puedo sola - Sonreí cortez y me di media vuelta dispuesta a seguir.

Él sonrió y mientras ella giró para irse él la agarró de la cintura para evitar que se fuera y se inclinó hacía su oído.

Tenía esa sonrisa coqueta en su rostro y con la forma de mirarla con tanta audacia dejaba muy claro que no tenía vergüenza. Hizo un susurro juguetón que sólo ella podía escuchar.

- Te divertiras más conmigo... - La soltó y retrocedió apoyándose contra la pared, con una sonrisa en su perfecto rostro.

Miley.

Eleve mi ceja y te miré con algo de enojo, por tú increíble atrevimiento - ¿Por qué me tocas?.

Se encogió de hombros y sonrió de nuevo - Yo quería, así que lo hice - Dijo de forma descarada - No veo que tiene de malo eso - Se cruzó de brazos e inclinó la cabeza a un lado al parecer esperaba una respuesta.

Me enojé y no pude evitar pensar que este chico todo lo que tenía de lindo lo tenía de idiota egocéntrico y me hizo irritar.

Frunci el ceño - Si hay un problema que es mí cuerpo y yo elijo quien me toca y quien no. Y no voy a tolerar que venga cualquier idiota con aires de Christian Gray a querer faltarme el respeto ¿Me escuchaste? - Él me veía burlón en todo momento - Ahora adiós - Solté con algo de enojo y me fui.

Luego de que se fue Jungkook puso sus ojos en blanco y murmuró.

- Amargada... Obvio yo soy mejor que ese.

No dijo nada más por un momento y la miró alejarse y sonrió una vez más al ver como contoneava al caminar su lindo y voluminoso trasero, volvió a apoyarse contra la pared como si nada. Era algo normal para él hacer esta clase de cosas y esperaba que regresarás como todas las otras chicas lo habían hecho antes. Pensó que serías el mismo caso, así qué esperó a que volvieras, como siempre solía ser.

Miley.

Por fin pude encontrar mi dormitorio, abrí la puerta y lo primero que noté fue que el cuarto era un poco grande, cómodo y una chica que seguro sería mí compañera de cuarto por un largo tiempo.

Se levanta y quita sus lentes pues estaba leyendo un libro, me sonrió e hizo una corta reverencia.

- ¡Hola! Soy Joy - Me estira la mano - ¿Tú eres?.