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Salí corriendo de casa, esta vez si que no podía llegar tarde. Tenía una entrevista de trabajo. Bueno, más bien es una especie de prácticas de la uni en la caja mágica. Sí, donde se juega el Mutua Madrid Open. Desde pequeña he jugado al tenis, claramente no de manera profesional, pero si que gané algún que otro torneo. Actualmente estoy estudiando en la carrera de marketing y publicidad. Para la entrevista me puse una camiseta Nike, con el típico dibujo de la cancha de tenis, para que se note que me gusta, y de pantalones unos vaqueros bastante corrientes.

Agarro las llaves de mi coche, un Tesla modelo X. Un coche bastante bueno para alguien de mi edad, pero no lo había comprado yo, si no que fue un regalo de mis padres por mis 18 años. Si, son asquerosamente ricos, que les voy a hacer, yo prefiero mantenerme humilde.

Mi móvil empieza a vibrar, una llamada entrante de mi mejor amiga Marta. Fue justo en un semáforo, así que descuelgo el la llamada.

-Sandra, ¿Estas ocupada ahora?- Dijo con una voz muy de ella, sabía que me pediría algo.

-La verdad es que estoy conduciendo, ya estoy yendo a la entrevista de becarios.- Marta estudia lo mismo que yo, esto de las practicas fue totalmente a sorteo, nuestro profesor de Brand management, fue quien nos puso esta tarea. No puedo estar más contenta por el lugar que me ha tocado, recuerdo que de pequeña solía ir con mi club de tenis, y me lo pasaba como los indios. Puede que el sitio que me haya tocado sea muy guay, porque además dentro de poco se disputara el open, pues resulta que a Marta le ha tocado una marca un poco rara que no deben ni conocer en su casa y estoy segura que me llama para que nos cambiemos los sitios, no sería la primera vez que lo intenta.

-¿Fijo que no quieres cambiar los sitios?- Me preguntó con una voz muy tristona.

-No, sabes perfectamente que no se puede. A demás sabes que me encanta el tenis, y poder llevarles la parte de redes sociales me encantaría. Así que lo siento pero no.- Pobrecita, no creo que pueda aguantar nuestro mes de practicas ahí, pero bueno, yo a eso no le puedo hacer nada.

-Joder, yo no tengo nada de suerte. En cambio tu estarás rodeada de tenistas buenorros, adinerados y solteros.- No pude evitar soltar una carcajada por su comentario. Vi que el semáforo se puso en verde así que seguí conduciendo. -Tía te dejo que yo también tengo que ir a las pruebas de las putas practicas estas.

- Chau, luego me avisas que tal te fue. - Acto seguido ella me colgó el móvil.

Pocos minutos después llegué a la caja mágica. Aparco el coche y vi que unos guardias de seguridad se acercaron, yo creo que debieron de pensar que era alguien importante por el coche en el que iba, pero al ver que no llevaba ninguna acreditación de jugador o familiar, entrenador etc. volvieron a sus lugares. Caminé por los largos pasillos hasta llegar a un ascensor, y como me habían indicado, voy al tercer piso. Paso un par de puertas hasta una sala de espera y me siento en unos sofás. No había mucha gente y tampoco parecía que nadie mas fuera a hacer las pruebas excepto un chico de pelo rizado que tendría unos 20 o 21 años.

-¿Sandra López?- preguntó una chica de unos treinta años. Me levanto y me indica que entre a su despacho. Me siento en una de las dos sillas enfrente de su enorme mesa de trabajo. Ella se sienta justo enfrente de mi y empieza a hablar.

-Bueno Sandra yo soy Macarena López-Roberts, soy la directora de publicidad y marketing del torneo del tenis Mutua Open. Si no me equivoco estas en tu segundo año de universidad, ¿Verdad?- Me pregunta.

-Así es, estoy estudiando en la universidad de Madrid.-Respondo con un sonrisa que es correspondida. Macarena parece una persona seria, pero a la vez muy cordial y sonriente.

-Estoy contenta de darte la bienvenida al grupo. Te encargaras de las R.R.S.S junto a tu compañero Pablo, que se encuentra en la salita, supongo que ya lo habrás visto. El torneo empieza la semana que viene, pero algunos jugadores se están acomodando ya por aquí. Me gustaría que os fuerais familiarizando con ellos y que les hagáis algunas preguntas para que se den cuenta que sois los encargados de la publicidad aquí. ¿Qué te parece?- Dijo con una sonrisa.

-Me encanta el trabajo, además me encanta el tenis así que estate segura que le voy a poner todas las ganas.- No podía estar más contenta, yo pensaba que me mandaría a ver como la gente hacía las entrevistas después de los partidos o como se editaban los vídeos para llamar la atención del espectador, no que yo sería quien hiciese las entrevistas.

-Eso lo puedo ver por tu camiseta Sandra, me gusta tenerte en el grupo. Ir a dar una vuelta tu y Pablo y conocer tanto el sitio como a los pocos jugadores que ya hay por aquí. Ah, y toma, tu acreditación de publicidad, así tienes acceso a absolutamente todos los rincones del establecimiento.- Me da una tarjeta de estas que te cuelgas en el cuello y salgo de la sala. Me encuentro con Pablo, que es un poco más alto que yo y también parece estar muy emocionado con el trabajo.

-Hola, soy Pablo, tu debes de ser Sandra, ¿No?- Se presento de manera cordial.

-Si, soy Sandra ¿Qué tal?- Le doy un abrazo y vamos caminando hacia las pistas de entrenamiento donde suponemos que podría haber algún jugador.

Fuimos caminando y nos encontramos a varias personas colocando los puestos de comida y de merchandising del torneo. Por lo que he estado hablando con Pablo, a el también le encanta el tenis y es super majo. Llegamos y nos encontramos a algunos entrenadores, todavía no han llegado los mejores jugadores, pero estuvimos hablando con algunos otros y se ve muchísima competitividad en el ambiente.

Pasado un rato, llego la hora de irme a casa. Pablo y yo tenemos muchas cosas en común así que me contó que tendría que coger el bus para llegar a su casa, por lo que le propuse llevarle en coche cosa a la que nos se negó. Estábamos dirigiéndonos hacia el parking cuando Pablo me preguntó:

-¿Cuál es tu coche?- Yo creo que me lo peguntó porque solo había coches caros de los jugadores y entrenadores por lo que reí- ¿Por qué te ríes? Solo hay coches tochísimos.- Me acerqué a mi Tesla y lo abrí. Pude ver en la cara de Pablo muchísima ilusión en subirse en un coche "tochísimo"- ¿No me jodas que este coche es tuyo?

-Haces muchas preguntas Pablo, ¿Por qué no te subes y te llevo a casa?- El estaba flipando mientras que yo estaba un poco tensa por el comentario. No me gusta mi coche, no me gusta ver tanto dinero en un sitio y que en otras partes haya tan poco. Cuando me lo regalaron mis padres se lo dije y créeme que se enfadaron, no entiendo porque.

En todo el trayecto Pablo me estaba elogiando lo mucho que le gustaba mi coche y me hacía muchísimas preguntas sobre como lo había conseguido. Nada más le dejé en su casa, me dirigí a la mía.

Primer día completado con éxito.

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Ya esta el primer cap. No creo que lo vea mucha gente pero se intenta.

Actualizaré pronto.

MADRID (Carlos Alcaraz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora