Confía en mí

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- ¡Maldita sea! - el dinero que tenía guardado no alcanzaba a cubrir la deuda que se acumuló en el hospital y tenía que pagarla antes de que Kotoha fuera dada de alta, se había quedado sin fondos y solo le alcanzaba para uno de los tres meses que debía además de que no tendría peleas hasta ese fin de semana. Suspiró pesadamente antes de recostarse e intentar dormir, después de todo esa era la razón por la que se supone había regresado antes a casa, lo había hecho por qué quería hacerlo y no porque se lo haya pedido Gompanchiro, necesitaba un descanso y de todas formas iba a tomar uno. Le preocupaba no poder pagarlo pero no era lo único en su cabeza, Kotoha le había estado preguntando sobre su trabajo y la razón por la que vivía de nuevo con el anciano Jigoro, no sabía cómo responder a eso y siempre terminaba evitando la conversación, sabía que estaba preocupada por él, podía sentirlo a través de su sensible piel.

El fin de semana llegó nuevamente y con él una pelea que parecía prometer una buena cantidad de dinero, tal vez no lo suficiente para liquidar el adeudo pero le conseguiría algo de tiempo, aunque la cuenta seguía subiendo con cada día que la mujer permanecía ahí, revisó su celular y vió que había algo ya planeado para ese fin, lo había olvidado, Monjiro quería llevarlo a "un lugar especial", prometió ir pero necesitaba el dinero, no quería decepcionarlo pero no había mucho que pudiera hacer, debía pelear ese fin de semana.

- No te preocupes, esto más importante así enfócate en esto ¿Si? - el azabache no entendía por qué no se molestaba con él o le reclamaba y Tanjiro se dió cuenta de eso - la verdad es que mentiría si dijera que no estoy decepcionado, pero creo que esto necesita resolverse antes, solo prométeme que iremos pronto ¿Está bien? - ahí estaba de nuevo esa sonrisa que tanto le gustaba, no pudo más y le dió un beso en la mejilla que el moreno no esperaba - creo que merezco un beso más ¿No crees? - dijo señalando la otra mejilla.

- ¡No pongas a prueba tu suerte Kentaro! - gritó molesto llendo a su lugar, pronto sería su turno y debía regresar al área de peleadores, y agradecía eso pues su respuesta lo había puesto nervioso, realmente esperaba que no lo hubiera notado - ¡y no te le acerques a los idiotas, no me gusta que te toquen! - pudo escuchar unas pequeñas risas a su espalda, adoraba escuchar a su novio hacerlo y le llenaba de orgullo, como si hacerlo sonreír de esa manera fuera uno de sus más grandes logros. El pelirrojo sacó un par de boletos de su bolsillo, los miró unos segundos antes de volverlos a guardar y con un profundo suspiro pensó. "Parece que tendré que posponerlo".

Al día siguiente, después de clases ya en el hospital, Inosuke no podía ocultar lo nervioso y molesto que estaba, teniendo Tanjiro que buscar una excusa para llevarlo fuera de la habitación...Kotoha sería dada de alta en dos días y la deuda debía ser liquidada pero no contaba con los medios para hacerlo, aún juntando el dinero que tenía ahorrado lograba cubrir el total por lo que el moreno tuvo una idea, quería ayudar a pagar para que no se preocupara tanto pero fué interrumpido.

- No - no siquiera había podido terminar de hablar, sabía que no les agradaba el hecho de recibir dinero simplemente así como así pero en cuanto trató de replicar el azabache lo tomó por la camisa para hacerle entender - ¡Ya hiciste suficiente pagando algunas cosas a escondidas, no necesitas hacer más! - oh no, lo sabía, alguna otra enfermera debió haberle dicho pues la señorita Kocho había prometido guardar el secreto.

- ¿Y si lo tomas cómo un préstamo? - la mirada esmeralda se posó en el, había llamado su atención - si lo piensas así entonces no tiene nada de malo ¿Verdad? -

- Pero aún así, el adeudo es bastante grande - dijo rascándose la cabeza mientras hacía una mueca.

- No te preocupes, tengo una buena cantidad ahorrada - contestó con una enorme sonrisa, había logrado convencerlo de aceptar y eso significaba un gran logro ya. Al día siguiente fueron juntos para verificar la cantidad y a pesar de ser bastante grande el pelirrojo no tuvo ningún problema en liquidarlo lo que dejó desconcertado a Inosuke, si bien ayudaba trabajando en la panadería de vez en cuando no creía que fuera suficiente para guardar tal cantidad además de no ser una familia muy bien acomodada y con la cantidad de hermanos menores ya debía ser difícil, eso solo hizo que la curiosidad del azabache aumentara.

"¡Bienvenida!".

Se oyeron muchas voces al tiempo que Inosuke, su madre y Tanjiro entraban en la casa sorprendiendo un poco a la mujer que no esperaba una bienvenida. El anciano Jigoro, Zenitsu, Nezuko y sus hermanos menores habían preparado algo para su llegada logrando que una enorme sonrisa se colocara en su pálido rostro, de alguna manera eso la hacía sentir mejor pues ahora sabía que muchas personas habían estado cuidando de su pequeño Ino, había hecho buenos amigos y eso ayudaba a que su corazón no pesara tanto.

A pesar de que todo comenzaba a acomodarse poco a poco la pequeña familia Hashibira aún tenía algunas dificultades, Kotoha intentaba conseguir empleo sin éxito por lo que él azabache no dejó de asistir a la montaña, a pesar de prometer abandonarlo cuando su madre despertara no podía hacerlo y quedarse sin ingresos, además ahora tenía una deuda con su novio pelirrojo.

- ¿Cómo conseguiste esa cantidad hermano? Sé que ahorras pero...-

- Eso es gracias a mí - dijo Akane en tono triunfal siendo interrumpido por su más alto amigo.

- A nosotros en realidad - le guiñó el ojo a la menor antes de que Zenitsu se interpusiera en medio haciendo que se acercara ahora a su rostro y levantara sus labios enviándole un beso imaginario a través del aire, provocando un escalofrío en el rubio - le dimos algunos tips - todos miraron al pelirrojo que apenas y ponía atención a la conversación, estaba algo impaciente esperando que Inosuke saliera para poder irse, su última pelea había terminado y si bien sabía que entre el y Genya no había nada, aún sentía algo de celos pensando que tal vez estuvieran a solas y el más alto aprovechara para coquetearle o algo así. Volvió a poner atención cuando Nezuko levantó la voz haciendo que volteara completamente para que disipara sus dudas, pues parecía algo preocupada por la afirmación de aquel dúo.

- Estuve apostando - dijo sin pensarlo mucho pero reaccionó apenas notó la preocupación en el rostro de su hermanita - pero fué solo porque estaba preocupado por Inosuke, quería estar preparado si algo pasaba -

- Si, además de que solo lo hace cuando pelea su novio - respondió Akane abrazando a Tanjiro y acariciando su cabello - voy a extrañar esto cuando dejes de venir, dame tu número guapo ¿Si? - dijo en voz notablemente más alta, sabía que el azabache se acercaba y quería molestarlo un poco más, pues ya no podría hacerlo tan seguido como quisiera. Se giró lentamente sin soltar al pelirrojo que no hacía nada por soltarse mientras veía como su rostro comenzaba a tornarse rojo, parecía molesto pero pero el aroma que desprendía era algo más dulce, estaba avergonzado.

- Ustedes dos... - dijo tomando de la ropa a los dos amigos al mismo tiempo mientras su vergüenza solo crecía y en un intento de disiparla se enfureció con ellos - ¡Están corrompiendo a Gompanchiro! ¡Y tú deja de hacerle caso a estos idiotas! - comenzaba a gritarle también pero no sé sentía mal, sabía que intentaba disimular el rojo intenso que se esparcía hasta sus orejas, después de todo, nadie lo conocía tanto como él mientras que el azabache por dentro no entendía como ese chico tan lindo había confiado en el lo suficientemente para arriesgar sus ahorros en tontas apuestas solo para ayudarlo, de verdad podía confiar en él ¿Verdad?

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Creo que no quedó muy bien este capítulo 😔 pero hago lo mejor que puedo en mis ratitos libres pero como ya casi llegamos al final de esta historia prometo arreglarlo

Porfa no se olviden de votar y compartir, mientras más votos y lecturas más rápido actualizo jaja ok no pero haré lo posible y si no es mucho pedir recen para que se me quite lo bruto y dejé de arruinar celulares, eso me retrasa más 🙃

¿Me recuerdas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora