❍ Todo cambió ❍

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Jaehyun no esperaba llegar hasta donde llegó, no esperaba que por pedir una guitarra en navidad acabaría debutando en 127F, mucho menos alcanzar un éxito tal que estaría lanzando su sexto álbum.

Como vocalista principal solía atrapar las miradas con mayor facilidad, sin embargo no era muy expresivo fuera de su arte, era una persona privada respecto a su vida personal y además de la interacción con sus fans no era una persona efusiva con personas fuera de su círculo.

Estaba en la fiesta de lanzamiento de su álbum, aburrido como siempre lo consideraba, gente importante felicitandolos, risas y música estruendosa, lo mismo de los álbumes anteriores, el de cabellos chocolate estaba rezando para que la fiesta pasara lo más rápido posible.

A pesar de estar rodeado de la gente que quiere no se siente a gusto en ese tipo de ambiente, incluso con su pareja rozando sus dedos y susurrando palabras tranquilizadoras al oído de manera discreta.

Era complicado pues la relación que tiene es privada, por lo que no puede expresar afecto de manera pública, además que ambos tenían que ver por sus carreras antes que nada, Jaehyun como parte de una de las bandas del momento y Jungwoo como un modelo emergente que empezaba a llamar la atención de diferentes marcas y empresas de publicidad.

- Quita esa cara, ya casi acaba la fiesta. - era la quinta vez que su manager le decía lo mismo, Jaehyun le devolvió la mirada con hastío pero se tranquilizó al sentir la mano de Jungwoo demostrando que no lo iba a dejar esa noche.

Sus demás compañeros de banda disfrutaban de la atención recibida, sobre todo Johnny quien se encontraba coqueteando con una rubia despampanante, Yuta en cambio estaba perdido retocando su maquillaje por quinta vez en toda la noche. Ten por su cuenta estaba hablando con algunos productores que le interesaban para involucrarse en su música.

Jaehyun sabía que tenía toda una noche por delante, sacó su teléfono para ver la hora viendo las horas pasar lentamente.

Doyoung estaba acostado en su cama, disfrutando de uno de sus pocos momentos de descanso en esa semana pesada a la que no podía verle fin

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Doyoung estaba acostado en su cama, disfrutando de uno de sus pocos momentos de descanso en esa semana pesada a la que no podía verle fin. Su brazo cubría sus ojos tratando de bloquear la luz que provenía de la sala donde se encontraba jugando su hermano.

Pensaba que podría aprovechar ese día para recargar energía después de sus extenuantes horas laborales, pero recibió una llamada que cambiaría el rumbo de su noche y tal vez su vida.

- Doyoung-ssi ¿Estás ocupado?

- Buenas noches jefe Kim.

- Buenas noches ¿qué tal la noche?

-Tranquila ¿qué sucede?

- Me apena mucho llamarte en tu noche de descanso pero varios de mis meseros se ausentaron el día de hoy y estoy intentando completar mi servicio para un evento esta noche ¿te interesaría venir? la paga sería la misma pero en esta ocasión se permiten las propinas a parte. - el azabache consideró profundamente ya que sentía que su cuerpo no podía más, sin embargo recordó que todavía tenía cuentas por pagar, materiales de su hermano para la escuela y todavía sus propios gastos, así que no se pudo negar.

Perdón ▪️ JaedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora