Historias De Un Amor...

Milagros...

Las personas a veces no se dan cuenta de porque pierden las cosas. O no hasta que la pierden para siempre. Yo tuve mi oportunidad con la chica más hermosa y espectacular que e conocido. Pero la perdí, la perdí por estúpido. Y ahora me lamento mucho.

Sabrina es una chica maravillosa y única. Con sus ojos saltones color miel claros, su cuerpo pequeño y delicado, con su piel pálida, su cabello negro azabache, sus labios carnosos y finos a la vez. Una chica que no tiene nada que envidiarle a nadie más. Es inteligente y audaz, tierna y cariñosa. Una chica sencilla, que no vive mucho de sus apariencias.

En cambio yo soy alto, mis ojos combinados entre verde y azul. Mi cuerpo bien formado beneficios de no querer salir de un gimnasio. Piel bronceada. Mi cabello rubio. Labios finos. Y me importa mi apariencia mas que cualquier otra cosa.

-Estoy perdido. Sin Ti estoy perdido Sabrina.- ya llevaba como más de media hora hablando con Sobrina por teléfono.

- Lo siento Jake, pero no puedo. No puedo hacer magia o hacer un milagro para llegar hasta allá y lo sabes.

- ¿Por que no? Solo explica me, porque yo me muero sin ti.

- Jake sabes porque, no lo hagas más difícil. Me voy a casar en una semana. No le puedo hacer eso a Javier, él me ama y no podría hacerle algo así a él.

- Y prefieres verme sufrir a mí que a él. Yo te amo Sabrina.

- Y me lo dices ahora- creo que la oí sollozar al otro lado de la línea- tu nunca valoraste mi amor cuando estuve a tu lado, solo lo haces ahora porque me estas perdiendo- podría jurar que esta llorando- ¡No quieres perder! No porque me ames, sino porque estarías perdiendo algo tuyo.

- Eso no es cierto y lo sabes. Si lo hubiera hecho antes, pero no ahora.- sentía mis ojos vidriosos. Estaba apunto de llorar, pero no lo haría porque “Los hombres nunca lloran”. O eso era lo que me repetía.

- Dejame en paz, por favor dejame ser feliz al lado de un hombre que me ama. Ya no puedo mas con esto.

- Voy a ir a buscarte, iré por ti. No me dare por vencido y lo sabes.

- Jake ya esto se acabó. Adiós.- y colgó. Me colgó.

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-Te pido que vuelvas junto a mí. Se que e sido muy egoísta, pero te amo. Es que ya no recuerdas todo lo que vivimos. Es cierto que mi amor al principio fue muy pequeño, pero hoy no hay amor más grande que el que siento por ti. Fui muy cruel contigo pero quiero cambiar.- ahora estoy aquí en Londres, en la boda de Sabrina, impidiendo su matrimonio- cada lágrima que dejas caer significa lo mucho que aún me amas.

- Jake, por favor, vete no me hagas más daño, por favor.

- No mi amor, porque tu me hiciste prometer que nunca te dejaría y que siempre te amaría. Y por eso estoy aquí hoy, y no me hire sin ti.

- No ves que no estas consiguiendo nada con esto, solo herirme. Tu ya perdiste, tuviste tu oportunidad y no le diste valor.

- Pero quiero cambiar eso, quiero cambiar eso por ti. Yo quiero cambiar, por ti. Sabes las ganas de venir a buscarte que tenia, pero me reuse. Y cuando supe que te casarías trate de buscarte porque sentía que te perdía y que ya no te podría tener.

-¿Por que ahora? ¿Por que no antes? ¿Por que tenias que venir a hacer esto ahora?

- Sabrina, será mejor que hables con el en otro momento o lugar.- en este momento quien habló fue Javier.

- Tú no te metas. Esto es entre Sabrina y yo.

- Jake, por favor, no le hables así a Javier. Porque la culpa aquí no la tiene él, si no tú. Sabes que si pudiera me iría contigo en este preciso momento.

- Entonces vete, vete con él Sabrina. Tu no me amas.

- ¿¿¿Que???- dijimos Sabrina y yo al mismo tiempo.

- Eso, que te vallas. Te dije que lo único que quería para ti, era que fueras feliz y eso no será a mi lado. Él te ama.- tomó las delicadas manos de Sabrina con las suyas- vete y sé feliz princesa.

-Pero entonces nuestra boda. No pued...- no pudo seguir hablando porque fue interrumpida por Javier.

- No te preocupes, yo me encargo de todo.

- Gracias.- y lo abrazó.

- Pero tú, si me entero que ella sufre, o le causas el más mínimo dolor, te mato.- me decía Javier, mientras me señalaba con su dedo acusador.

- No te preocupes, porque primero me mataría yo antes de volverla a hacer sufrir.- rodé la cintura de Sabrina con mis brazos y ella mi cuello con sus delicadas manos y con sus dedos acariciaba mi cabello.

- Sabrina, cuidate. Cuando quieras puedes llamarme tienes mi número. Tal vez algún día nos volvamos a ver. Por que me encantaría volver a verte aunque sea en plan de amigos.

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Ya han pasado como 5 años desde lo sucedido. Casi dos años después le pedí a Sabrina que fuera mi esposa.

Hoy nos encontramos compartiendo una hermosa tarde con mi esposa y nuestro hijo Daniels y mi gran amigo Javier.
Porque sucede que después de todo Javier se casó con alguien a quien Sabrina le había presentado y quien resulta que es mi hermana Vanessa. Tienen una hija juntos, bueno gemelas, Maily y Emily. Sabrina está esperando mi segunda hija, a la cual llamaremos Miracle como símbolo de nuestro amor, porque fue todo un milagro que Sabrina y yo estemos juntos

No sé si este es el final feliz que todos deseaban. Pero es el final feliz que me hace feliz a mí, porque bueno, lo estoy viviendo con la mujer que más amo en este mundo.

ESTE ES EL FIN, O EL FIN DE UN CAPITULO DE NUESTRA VIDA...