*piiip*
¡Hola, sigo viva! ¡Cuánto tiempo eh! Ha pasado... ¿una semana? Supongo que varios días más... lo siento...
No tenía ganas de hablar... ni de hacer absolutamente nada que no fuera hacer nada, valga la redundancia *jaja*.
He pasado estos últimos días deambulando cabizbaja por los pasillos del instituto y por casa.
No sé, no me sentía bien.Lo más importante es que ahora ya estoy mejor, y tengo ganas de moverme. En el sentido metafórico. No sé si me explico. Bueno, da igual *jajaj*.
¡Ah! Quería contarte una cosa.
Estos días en los que he estado reflexionando, he llegado a una conclusión. Eso que se dice de que el pasado y el futuro no es hoy... es mentira. Verás.
Hoy conservas una parte de ayer dentro de ti, pero también albergas una pequeña parte de mañana; igual que mañana, una pequeña parte de hoy habitará en un rinconcito de tu persona, y otra de pasado mañana también. Es inevitable.Y, si te pones a pensar, la mayor parte de todo es o ayer o mañana. Yo estoy diciendo esto ahora mismo, ¿no? Pues la palabra "esto" ya forma parte del ayer. Ves, ahora ha sido el turno de "ayer". Y mientras tanto, lo que voy a escribir forma parte del futuro. Pero cuando lo escriba, ya será parte del pasado. O sea, ¿y el presente? Se supone que en este caso el presente es, por ejemplo en este momento, que te estoy hablando. Pero claro, es un concepto general.
No habría pasado sin presente, al igual que futuro... lo que nos lleva a que no habrían futuro sin pasado o pasado sin futuro. ¿Me entiendes? Se necesitan, se complementan. Tanto pasado como futuro acompañan día a día al presente, cogiditos de la mano, uno a cada lado.
Es curioso pensar que sean tres términos tan diferentes pero iguales a la vez ¿verdad?A lo mejor ahora me estás mirando con cara de " esta está para ingresar en un psiquiátrico pero ya". No, es que de verdad que me he frustrado mucho. No consigo entender por qué dicen "vive el presente". A ver, que sí, que ahora mismo es presente, pero a grandes rasgos. El presente se forma de pasado y futuro, y punto.
Siento si te ha molestado que te lo contara. Lo último que quiero es que me dejes de escuchar. Por favor, si no te ha parecido bien no lo tengas en cuenta. Disculpa.
Supongo... supongo que me tengo que ir. Nos vemos pronto... Byee!
¡No, espera! Que quería decirte otra cosa y casi se me olvida.
¿Recuerdas aquel examen que te dije que tenía y que no me sabía? Pues tenía razón, lo suspendí... pero Summer, (ajá, es americana) la profesora me ha dicho que no tiene importancia.
Está de sustituta, se acaba de mudar de Connecticut. Tendrá unos 45 o 46, creo yo. Tiene dos hijos. El mayor creo que tiene dos más que yo, y el pequeño unos 5 añitos. Se ve que lo tuvo ya mayor, *jejeje*.
La verdad me cae genial esa profesora. Se nota en el brillo de los ojos cuando explica el tema que ama su trabajo, que es profesora porque quiere y le gusta.
Así da gusto prestar atención. Te motiva a seguir estudiando y a seguir aprendiendo más y más.
Buuuf, si todos los profesores fueran así... qué bien iríamos.Ya te he aburrido suficiente rato, ¿no crees? Venga, me voy, que seguramente te habrás quedado dormido mientras hablaba *jajaja*.
Un besitooo, muaak. ¡Hasta la próxima amigo!*piiip*
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Dulce, como el mar.
Teen FictionEsta es una historia normal y corriente sobre una chica tan atípica como un cielo blanquecino o una flor grisácea. A ella le gustaría que le dieras una oportunidad. Por favor...