𝗧𝗢𝗠 𝗞𝗔𝗨𝗟𝗜𝗧𝗭 - 𝐁𝐔𝐒𝐈𝐍𝐄𝐒𝐒𝐌𝐀𝐍

𝟏𝟗

Pasaron dos años,si dos años y me gradué.

Nunca llegué a tener ninguna relación con Eddy y llegó el momento de renunciar en la cafetería,me despedí de Eddy y Emilio.
Ahora tendría que trabajar en lo que había estudiado y rehacer mi vida pero ya no sería en Florida,después de tanto dudar decidí regresar a mi ciudad natal y si,era de algún día ver a Tom no lo esperaba pero si me imaginaba verlo aunque yo había dicho que jamás volvería a verme el mundo es pequeño y tarde o temprano terminas encontrándote con esa persona.

Tomé un vuelo y al cabo de unas horas llegué de nuevo,donde ya estaba decidida a comprar mi casa y aún auto,me hospedé en el hotel donde ya había estado y no le avisé a Bill y por suerte nuestra relación de amistad se pudo recuperar ya que nos estábamos olvidando él ya sabía de mi graduación y que renunciaría a la cafetería pero no sabía que volvería de nuevo así que quedaría como secreto hasta que decidiera el día en decirle o llegar de sorpresa a la casa de sus papás.

Unos días después,salí a caminar así que estaba un poco lluvioso y disfruté las pequeñas gotas que caían mis pies hacían que sonaran los charcos de agua,miré al cielo mirando un hermoso paisaje nublado con nubes negras y olía a tierra mojada.Suspiré y seguí caminando al momento de cruzar miré una enorme camioneta en color negro demasiado elegante,era más o menos algo que quería pero me sentiría demasiado pequeña estar arriba de esa monstruosidad y pensé que pararía al momento de yo cruzar pero siguió y casi me atropella,la persona que iba a dentro dió un frenón de golpe haciendo que rechinaran un poco las llantas y yo sentía el corazón salirse de mi pecho,furiosa grité.
Después escuché que abrieron la puerta y alguien bajó pero no lograba ver quien era hasta que rodeé la camioneta.

—Oye fíjate pedazo de idiota,casi me atropellas ¿que no te fijas como manejas? -estaba furiosa quería golpear a esa persona-

Mi cuerpo quedó en shock y comencé a temblar un poco al ver quien era esa persona era un hombre y pude ver su rostro por la luz de la luna,se escuchó una leve risa burlona y se acercó más.

—Me alegro de verte -dijo sonriendo,era Tom-

—La puta madre Tom,casi me matas -dije algo molesta pero estaba feliz de verlo-

—Lo siento,venía viendo mi celular es qué pasó algo así que no miré al frente y no lo hago siempre,pero esto era urgente -hizo una pequeña mueca-¿Te encuentras bien? ¿Quieres que te lleve al hospital? -se veía preocupado-

—Estoy bien-dije mirando sus ojos y podía ver qué brillaban demasiado-

—Me alegra verte,Tom-di pasos largos y llegué hasta él dándole un abrazo,si,hace dos años me vengué muy poco de él pero esta vez no venía a eso-

Él me abrazó fuertemente y suspiró en mi oreja,yo lo tenía bien sujetado de su cuello y olía a cigarrillo,me separé un poco de él quedando a unos centímetros de su rostro nos miramos directamente a los ojos y él sonrió.

—Maldita seas Less,te ves hermosa -dijo sonriendo y acarició un poco mi mejilla-

¿Gustas que te lleve a cenar? o ¿quieres hacer algo de cenar? -rió-

—¿Quieres preparar de cenar conmigo? -alcé una ceja-

—Yo,encantado siempre -dijo sonriendo tocando su pecho-

Subimos a su camioneta y fuimos a su casa pero ya no era la misma de antes,era otra más grande y más lujosa.
Entramos y aprecié cada rincón,llegamos a la cocina y pude ver que su alacena estaba completa,extraño.

—¿Tienes alguna empleada?

—Si,pero hoy empezaron sus vacaciones-dijo suspirando-

Comenzamos a cocinar como antes pero no intercambié demasiadas palabras con él así que seguimos en lo nuestro y llegó el momento de cenar donde se rompió el hielo y comenzamos a platicar.