ɪɴ ᴏᴜʀ ᴅʀᴇᴀᴍs

23

Capítulo 23: Playa

-¡Chispitas!

-¿Hyunjin?

-Pensé que no te volvería a ver.

-Yo también pensé lo mismo

-Me gusta tu traje de baño; me gusta el diseño de piñas. También me gusta tu abdomen, no pensé que sería marcado.

Felix miró hacia abajo y efectivamente estaba sin camisa. Eso hizo que se avergonzara un poco ya que no solía mostrar su abdomen incluso cuando iban a la playa o piscina.

-Ahora que lo pienso eso sonó muy raro, perdón si te incomodé.

-No me incomodaste, pero si me dió vergüenza.

-¿No sueles estar sin camisa?

-La verdad es que no.

-Ni yo... si quieres te doy la mía.

-Eso no es necesario, no te molestes en hacerlo.

-Tranquilo, no me molesta.

Hyunjin empezó a quitarse su camisa dejando su pecho y abdomen al aire. Felix pensó que el rubio también tenía un buen abdomen. Tenía un buen cuerpo en general. Le gustaba mucho sus brazos y como se marcaban sus venas cada vez que los dejaba reposar. Hyunjin le dió la camisa y Felix se la puso rápidamente.

-Gracias...

-No hay de qué.

-Tú también tienes un buen abdomen.

-¿Si? Gracias. Realmente no hago mucha actividad física, solo bailo.

-Entonces debe ser más genético.

-Eso creo. ¿Quieres caminar alrededor de la playa?

-Eso estaría bien.

Hyunjin tomó la mano de Felix y este se sorprendió un poco. Ambos empezaron a caminar en silencio, pero no era un silencio incómodo. Hyunjin realmente se sentía muy bien de estar a su lado y Felix igual. Habían pasado unos minutos y el rubio finalmente habló.

-¿Sabes? Tuve algo de miedo. Pensé que no te volvería a ver. Me gusta estar contigo.

-Yo también tuve miedo y también me gustar estar contigo.

Felix estaba empezando a pensar que los sueños con el rubio era un forma de su cerebro recompensar los malos ratos que pasaba con su novio. En verdad le gustaba soñar con el rubio. Cada vez que lo hacía se levantaba de buen humor y se sentía amado.

-Me alegra escuchar que a tí también te guste.

Ambos quedaron en silencio nuevamente y siguieron caminando. Esta vez Felix se había acercado más a Hyunjin. Ya casi llegaban al final de la playa y podían ver un lugar hermoso. Era un lugar cerrado donde habitaban muchos peces y corales. Había una especie de acantilado que formaba una cueva, un lugar realmente hermoso. Felix soltó su mano y empezó a correr hacia ese lugar.

-¡Ven!

Hyunjin solo lo empezó a seguir. Cuando Felix llegó al lugar se quedo viendo el paisaje y Hyunjin pudo ver como sus ojos se iluminaban con la poca luz que había. Él no pudo evitar sentir mariposas, se veía tan feliz, tan bonito...

-El sol se va a poner en unos minutos... ¿Hyunjin?

-¿Qué? Perdón no te estaba escuchando.

-¿Estás bien?

-Si, solo que... te ves muy bonito cuando estas feliz.

Felix no pudo evitar sonreír Hyunjin era muy lindo con él. En estos momentos solo quería besarlo, así que lo hizo. Se acercó a él y lo besó. Hyunjin lo tomó de la cintura mientras que el castaño lo agarraba del cuello. Ambos sonrieron entre el beso y vieron como el sol se ponía.

-Es hermoso.

-¿El atardecer?

-Si Lix, el atardecer...

Nunca podían estar así por mucho tiempo ya que siempre terminaban siendo despertados. Como siempre a Hyunjin lo despertaba el menor de sus amigos y a Felix su novio.