𝑱𝑼𝑺𝑻 𝑨 𝑷𝑨𝑹𝑻𝑵𝑬𝑹 [𝐁𝐲 𝐓𝐚𝐧𝐮𝐦𝐚𝐒𝐚𝐧✔︎✔︎]

2. Routine Not Routine

Al día siguiente Kiba, como de costumbre se levanta temprano, al salir de su habitación nota a su can durmiendo mientras en el departamento el olor a comida se impregnaba en cualquier superficie.

El olor era glorioso.

Kiba camino con sigilo por el pasillo notando a Kankuro, ya Arreglado, haciendo el desayuno.

Algo que claro, le molesto, pues no tenía autorización para utilizar la cocina y ya se había adelantado a usar el baño.

-Buenos días, jefe. -le dijo aun dándole la espalda mientras servía la comida en platos.

-Buenos días.. -responde Kiba aguardando sus ganas de reclamarle por aquello.

-Bien, sé que dijiste, pero tenía hambre y no despertabas, ¿qué mejor que un desayuno hecho por tú huésped? -cuestiona sonriente, Kiba niega con la cabeza.

-Ni siquiera sé que tiene eso. -agrega él cruzando sus brazos.

-Aah, ¿es eso? Pues es una receta familiar, te cuento. -ríe un poco, Kiba aun desconfiado estuvo a punto de regañarle, pero Kankuro logro hacerlo seder, por lo que este tomo asiento. - Confía. -le dijo en un tono insistente.

-Veremos.. -tal parece que aquello hizo seder a Kiba, se sentó aun dudoso y provo un poco del contenido del plato, allí, sus párpados dejan ver mejor sus ojos algo impactados.. Rápidamente Kankuro sonríe por aquello.

-Sabía que te iba a gustar. -dijo él cruzando sus brazos aun sonriendo mientras Kiba rodaba los ojos.

-Es solo comida, a cualquiera lo gusta. -se queja con el ceño fruncido, sin embargo sigue comiendo de manera molesta, haciendo reír un poco a Kankuro.

-Tienes razón, jefe. -asintió volviendo a la estufa, al terminar de pagarla se sentó para finalmente desayunar.

Kiba le miró un poco, Kankuro comía sin preocupación alguna, parecía bastante tranquilo, lo estaba.

Entonces él Inuzuka vuelve la mirada a su plato de comida y dando un segundo bocado, aun con dudas, habla.

-No está mal, pero no es que me guste que extraño utilicen mi cocina. -dice él de manera neutra.

-Lo siento por eso.. Es que.. Sinceramente tenía hambre y no quería despertarte y que ocasionarás un incencio. -Kiba arqueo una ceja y seguido de eso negó con la cabeza. -No habrá próxima vez, lo prometo. -vuelve a hablar el más alto.

-Bien, ya no te preocupes. -reñago nuevamente por lo que Kankuro simplemente asintió.

-¿Y qué tal? ¿Tenemos algo en especial hoy? -cuestiona el de cabellos marrones.

-Me hicieron elegir entre el papeleo y darte un paseo. -responde con molestia dejando de comer, por lo que Kankuro arquea una ceja.

-¿Y bien? -Kiba se puso de pie y le miró de reojo antes de alejarse.