Cuerpo de zombi corazón de heroína.

Capítulo 2: ¿Cuáles son las habilidades de una Zombi?

My Hero Academia, pertenece a Kōhei Horikoshi.

N/A: Este Fanfic está basado en el Fic: The Undead Schoolgirl: Dead Pulse, de Wickerbot de quien tenemos permiso.

Cuerpo de zombi corazón de heroína.

Inōe y su madre, Inko, estaban en la sala de un Hospital de Evaluación de Quirk, acompañadas por Kamui Woods.

El hombre enmascarado, firmó algunos autógrafos y no pudo evitar escuchar, la risa de Inko, haciéndolo girarse. — ¿Cómo se siente no poder ir a ninguna parte, sin poder ni tan siquiera, comer un helado, sin que te pidan firmar un libro?

Kamui Woods suspiró. —A veces es abrumador.

Recuerdo

Lo ocurrido a Inōe, llamó la atención de los medios y ni los héroes, ni sus posibles conexiones, pudieron detenerlo: «Niña es atacada por villano de rango E, asesinada y resucitada por su Kōsei».

Si bien, en ninguna parte del reportaje, se dio el nombre de Inōe, la Oficina de Kamui Woods, envió a algunos de sus asistentes, para que estuvieran al cuidado de las Midoriya, por si algún villano aparecía o algo inusual, tuviera lugar.

Era una mañana normal, solo habían pasado dos días, desde el ataque a Inōe, pero, aun así, Inko encontró que su hija, no parecía estar sufriendo de ninguna clase de shock traumático, por el hecho de haber muerto. Sino, que se veía alegre por estar viva y tener un Kōsei, después de tanto tiempo.

Katsuki seguía siendo su amigo a pesar de todo lo que le hizo y en clases, se podía ver a Kacchan, tratando de ser un mejor alumno, juntándose con Inōe y enviando Mensajes de Texto a su madre y a la tía Inko, sobre los nuevos gustos alimenticios de Inōe: Yogur griego, salmón, Nigiride marisco (una bolita de arroz que se corona con una fina lámina de pescado o marisco), calamar y anguila.

Esa misma mañana, en la cual la Midoriya, fue al hospital, le mandó un mensaje de texto a Katsuki: «¡Kacchan, Kamui Woods dice que iré a un hospital especial, para aprender más sobre mis habilidades y al volver, voy a enseñarte lo que puedo hacer como Zombie!»

Fin del Recuerdo

— ¡Yaoyorozu Momo, Yanagi Reikō e Midoriya Inōe! —llamó un doctor, no muchos minutos después de estar esperando. Inko vio como una niña de cabello gris y otra de cabello negro, seguían a su hija.

Fueron llevadas a un gran consultorio, que antes fue un quirófano; actualmente, allí había máquinas de correr, bicicletas estáticas, una piscina, mancuernas, pesas, ligas y más.

A las tres niñas, les colocaron unos electrodos en sus cuerpos y sus familiares, fueron llevados a una habitación conjunta, en donde había un vidrio que impedía ver desde el otro lado, en donde un doctor, tenía tres electrocardiogramas. El doctor frunció el ceño, ante los curiosos movimientos en el electrocardiograma de Inōe y susurró: — "Nunca antes, he visto algo como esto" —comenzó a teclear algo en un computador y luego presionó una tecla en un micrófono, haciendo que su voz sonara a través de un altoparlante: «Por favor: comencemos las pruebas con Inōe, pues su cuerpo parece haber sido reestructurado a base de su Kōsei Zombi.»

Una doctora de cabello castaño y ojos azules, con una sonrisa dulce, dio un paso al frente. —Muy bien, comenzaremos entonces, con un caminar suave, luego pasaremos a caminata rápida, trote y correr. Todo esto, en estas máquinas para caminar, ¿entendido, niñas? —las niñas asintieron. —Está bien, Inōe, comencemos contigo. Caminarás por cinco minutos, trotarás por 7 y correrás por 10. —Ella vio a las tres chicas, mientras tomaba notas y sabía que sus compañeros, del otro lado del vidrio, también tomaría notas y sus datos serían aún más exactos que los suyos. Luego, pidió a las niñas hacer flexiones de brazo; después sentadillas; volvieron a las caminadoras, pero ahora estaban inclinadas, lo cual a las niñas a agarrarse de las barras de la caminadora. —Está bien, las tres lo han hecho muy bien. Por favor: pasen a la habitación de la puerta roja, coman todo lo que encuentren allí, siéntense o acuéstense, hasta que vuelva, ¿de acuerdo? —las tres asintieron y atravesaron la puerta, dispuestas a conocerse más, sintiendo que estarían allí, por bastante tiempo; mientras que la doctora, iba a ver a su compañero y compartían datos sobre las niñas. Volvió un rato después, necesitando más información sobre Inōe, cosa que a Inko no le sorprendió. Cuando la doctora volvió, encontró a Reikō y Momo riéndose, mientras que Inōe estaba sonrojada y comía muy lentamente su cerdo. —Está bien: Voy a llevarlas a otra habitación y dejaremos que su cuerpo haga la digestión, por las próximas 2 o 3 horas. —las niñas se quejaron y siguieron a la doctora, pero sus rostros apesadumbrados, pronto se fueron, cuando las llevaron a una habitación con videojuegos, comics, mangas y libros. La doctora se fue y ellas se divirtieron, hasta que la misma doctora regresó, las tres chicas, algo malhumoradas porque les quitaron su rato de diversión, siguieron a la doctora, hasta una cabina de resonancia magnética. Las lectoras de Momo y Reikō, fueron bastante normales, pero las de Inōe, fueron asombrosas y desconcertantes...

Al menos de que fueras el doctor encargado de aquel día. —Esto es... asombroso... su cuerpo ha creado órganos completamente nuevos y nunca antes vistos, en ningún ser humano. En ningún usuario de Kōsei, en mi vida o en ningún libro de anatomía, que he llegado a leer. Su corazón se ha hecho más alargado, lo cual permite que más sangre y más oxigeno sean bombeados, también posee intercesiones nunca antes vistas en medio de sus venas y las arterias: algo similar a corazones diminutos, permitiéndole tener una alta resistencia, antes de cansarse completamente. Su piel absorbe oxígeno, como si... como si su piel fuera alguna especie de nariz gigantesca. Sus músculos se han vuelto más densos, ahora posee garras retractiles, sus dientes han sido convertidos en colmillos y.... necesitamos una prueba de su mordida, porque la estructura de su mandíbula, igualmente se ha modificado. Su cabello funcionará como las agallas de un pez, si es que ella debe de sumergirse bajo el agua. Asombroso... —el doctor se acercó más a la pantalla — ¡asombroso!

En la prueba de mordida, el doctor supo que tenía razón, respecto a la reestructuración de la mandíbula de la niña y vio a simple vista sus colmillos, Inōe demostró tener una fuerza de 200 libras.

Se les hizo una prueba de fuerza e Inōe demostró una fuerza física de 300 libras, que aumentaba a 350 libras si lo hacía con seriedad y fuerza en serio.

Inōe lanzó un puño mal y literalmente rasgó la pera de boxeo, con sus nuevas garras, chillando y dando un paso atrás, asustada, pero eso solo emocionó a Momo y Reikō; mientras que el doctor loco, daba datos sobre garras retractiles de queratina y cosas así, comenzando a pensar en cómo le hizo la niña zombi, para accionar esas garras y buscando en Google y Wikipedia, sobre las garras de los felinos.

Y mientras que Kamui Woods pensaba en enviar la niña con Gunhead.

Inko pensaba en como alejar a su hija del doctor loco.

Durante una prueba, en la cual midieron su rango de regeneración, descubrieron (accidentalmente) al cortarle la mano, que unas fibras musculares saldrían de la parte cercenada y volvería a cocerla.

Sin embargo, Inōe parecía haber encontrado un nuevo truco, solo con cortarse la mano, después de todo: Si no le dolió una vez, ¿Por qué dolería una segunda?

Mientras tanto, en el Salón de la Justicia...

Perdón, quise decir: Mientras tanto, con el doctor loco. —Fuerza física, garras retractiles, colmillos afilados y mandíbula poderosa; sin cansancio, luego de ejercicio fatigoso... capacidad auditiva avanzada, visión nocturna... ¡ESTA NIÑA ES ASOMBROSA! —decía el doctor.

—Es definitivo: voy a ponerle una orden de restricción de 10 kilómetros —pensó Kamui Woods, al ver al doctor loco, mientras él pasaba una mano por el hombro de Inko.