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A Lukas nunca le había molestado enfermarse, podría decir que hasta le gustaba, y mucho. De pequeño cada que se enfermaba era el consentido de su hogar, su madre le dejaba no ir a clase, quedarse todo el día en la cama y le llevaba el desayuno, almuerzo y cena a su habitación, era extremadamente maravilloso.
También le frotabas en su pecho el frío VapoRub , incluso se quedaba horas y horas mimandolo con el fin de hacerlo sentir mejor.

Quizás su madre fue la causa por la cual solía ser muy mimoso cuando se enfermaba, incluso cuando agarraba una simple gripe u resfriado su madre se mataba horas y horas cuidando de el, pero está vez durante sus 17 años de vida, se sintió horrible de estar enfermo.

Sábado por la noche; Lukas.

— ¿Y bien? -le pregunté a mi hermana curioso de la respuesta que le había dado mi madre-

— Me debes una, no sabes lo mucho que me costó convencerla. Saldremos al restaurante en unos minutos y te quedarás solo en casa, no vayas a estar inventando.

— ajá, cómo tú digas noona

— Carlota ya vámonos -mi madre entró en la habitación- Cuídate mucho Alexander, si te sientes muy mal llámame y vendré en seguida a casa.

— Está bien ma, tranquila, no me va a pasar nada. Ve y disfruta, no te preocupes por mi.

Mi madre y mi hermana terminaron de alistarse y se despidieron de mí para irse de casa.
Al fin, casa sola.

Tener la casa vacía un sábado por la noche a toda mi disposición era la jodida gloria, claro, nunca organizaria una fiesta enorme o algo así por el estilo como harían los demás adolescentes de su edad, a mí me gustaba colocar música y disfrutar de ponerla a todo volumen sabiendo que nadie me podrá reclamara nada.

Y ese sería mi súper acto de rebeldía está noche, subir al tope su televisor y escuchar las nuevas canciones del nuevo álbum de un grupo que Ale me había recomendado,

Prendí mi televisor colocando el YouTube y comencé a escuchar la música a todo volumen.
cómo amaba hacer esto.

Era bastante tarde así que decidí tomar un baño, la fiebre no me había bajado para nada.
Me desvesti enfrente al espejo del baño mientras el agua tomaba temperatura, miré más allá de mi rostro algo ojeroso y pálido, actualmente demacrado por la fiebre y el malestar, observé mi cuerpo delgado y ligeramente trabajado, bastante normal en mi opinión.

Tenía los abdominales mayormente marcados más por el baile que por el ejercicio, no era un fanático del ejercicio en general. De la nada mi mente comenzó a divagar pensando en lo bien que se vería el contraste de mi cuerpo desnudo junto a la piel acaramelada  del cuerpo increíblemente bien formado de Ale.

Joder, no joder, no puedo hacer esto. Es el maldito novio de mi hermana mayor.

No puedo pensar así. Me reproche a mi mismo, aunque en realidad ya era tarde para deshacerla imágen formada en mi mente,  podría eliminar esos pensamientos con algo de esfuerzo, sin embargo no podría controlar las reacciones que había comenzado a tener su cuerpo por esos pensamientos tan estimulantes del cuerpo desnudo de Ale haciendo lo que le plazca con él, de verdad esto estaba mal. Pero solo era otro adolescente hormonal del montón.

El sonido del agua callendo por la regadera me hizo reaccionar, me apresure a cerrarlo lleno de vergüenza y culpa por lo que estaba sucediendo, mis mejillas ardían y mi entrepierna latía, en serio necesitaba hacerle caso a su cabeza pero no estaba seguro a cual de las dos, traté de ignorar la necesidad de tocarme volviendo a abrir el grifo mientras el agua comenzaba a caer nuevamente sobre mi cuerpo, preferí hacerle caso a mi cerebro y no a mi pene por primera vez.

Sin embargo esta semana estuve luchando lo máximo que pude contra todos mis pensamientos pervertidos toda la semana, ¿cómo explicarle a mis hormonas que Ale ya no podía ser de material para masturbarme?, ¿cómo le explicaba a mi polla que Ale estaba prohibido y que no podría tener el más esperado de sus orgasmos? Incluso estos pensamientos lograban excitarme aún más. Y ya fue tarde cuando me dí cuenta que mi miembro estaba completamente duro y mi mano pasaba suavemente sobre el intentando aliviar la necesidad de tocarme un poco.

A la mierda con todo, el plan será fácil, me masturbaré y mi único y último pensamiento será Ale, y luego de eso me olvidaré de el y seguiré con mi vida. No puedo seguir así para toda la vida, me traerá muchos problemas.

Sin abrir mis ojos, mi mano diestra fue bajando lentamente recorriendo mi abdomen, sentí un leve cosquilleo en toda la espalda cuando trace una línea invisible con la base de mi vientre y la base de mi miembro, sin más demora, rodeé con mi mano mi erección, soltando en el transcurso un leve suspiro, mejor dicho un gemido cuando sentí mi propio tacto y la calidez que me proporcionaba este.

Inicié una ronda lenta de caricias subiendo y bajando al rededor de mi erección sin ejercer presión en ella, jadeando en el proceso.

Poco a poco fuí aumentando la velocidad de mis movimientos y el agarre de mi mano, presionando con firmeza, aumentando el volumen de mis descontrolados gemidos que salían de mis labios, traté de callarlos mordiendo mi labio inferior con mis dientes, dañando algo este, pero todo salió de control cuando en la playlist comenzó a sonar la siguiente canción NXT 2 U, causando un escalofrío en todo mi cuerpo, pensé que la mejor forma de correrme sería imaginándome escenas con Ale y esa música de fondo.

Me esforcé por llegar a mi tan esperado climax, aumentando mi velocidad junto a mis caderas embistiendo con rudeza mi propia mano, al mismo tiempo lleve mi mano zurda a mis testículos presionandolos un poco, no me preocupé en callar ahora mis gemidos, estaba tan concentrado en llegar a mi orgasmo, reemplace las anteriores imágenes de mi mente por una en dónde Ale hacía todo el trabajo, bombeando mi erección lentamente y luego rápidamente, así sucesivamente torturandome y haciéndome rogar para que me dejase terminar, no tardé mucho en soltar un fuerte y agudo gemido, liberando aquel característico líquido blanco y pegajoso el cuál cayó en el piso de la regadera.

Permanecí recostado contra la pared recuperándome un poco esperando a que mi respiración se regulará y que la temperatura de mi cuerpo bajara, la velocidad en la que me había corrido me había dejado algo tonto, me había permitido olvidar de todos mis problemas actuales y solo centrarme en el placer y la imaginación junto a Ale, pero al darme cuenta, lo había empeorado todo.

Mierda, mierda, mierda, acababa de masturbarme pensando en Ale, el novio de Carlota, mi cuñado, era algo imperdonable, si mi hermana llegase a enterarse estoy seguro de que me odiaría por completo, me sentí tan culpable luego de eso.

Sin embargo dejé de pensar en eso y seguido de mi batalla mental decidí tomar un baño no sin antes limpiar los restos de mi escencia que había sido derramada, me vestí con mi pijama un poco más relajado y tranquilo que antes, sin dejar pruebas de lo que había sucedido anteriormente.

No terminé de decidir si esto había valido la pena o no cuando de repente alguien llamo a la puerta de mi hogar, y unas notificaciones llegaron a mi teléfono. Fruncí el ceño extrañado, puesto a qué no esperaba a nadie y mi familia llegaría más tarde según lo acordado, prendí mi celular casi desmayandome al ver de quién se trataba.

ale hyung
|  10:23.p.m |

¿Estás despierto niñito? Llevo parado media hora en la puerta de tu casa, mueve el culo y ve a abrirme.

Tu hermana me dijo que estabas enfermo y estabas solo en casa, me pidió que viniera a cuidarte.

holaa, fin del cap de hoy, que tal te pareció lu?
slow it down make it bouncy - para q wattpad no me tache de  copyright
es mi primera vez escribiendo porno ok, no acepto quejas
bai :3

¿daddy?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora