Capitulo 1. (Kalista)

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Siento que la piel se me pone de gallina, siento que el corazón se me acelera como si el peligro estuviera cerca de mí y no miente porque siento una presencia detrás de mí y como me susurra al oído.

- No deberías acercarte a mi o te acabare mordiendo, caperucita roja.

Se al momento que es el, después de tantos meses es la primera vez que hablamos y aun así puedo reconocer su presencia imponente. Tengo que recordar las palabras de Lily y hacerme la desinteresada porque seguramente esperaría que yo me volviese loca por el y no era así, me gustaba pero tenia el suficiente orgullo así que me giro para mirarlo y si, me sentía enana y pequeña en comparación a el y el parecía que se había dado cuenta porque tenia ya en sus labios una sonrisa de suficiencia así que le respondo

- Ah, que muerdes y todo .. y yo pensando que eras un corderito y no un lobo.

- ¿Acaso quieres comprobarlo? Después no me hago cargo

Maldito Aiden sexy, ¿Por qué me ponías las cosas tan difíciles?, parecía que había nacido para llevarme al limite. Su camiseta abierta dejaba ver otro tatuaje que tampoco había visto nunca además sus manos llena de anillos, me daba igual que se viera que me estaba fijando.

- Seguro que lo pruebo y no es para tanto, mucho hablar y poco hacer

Suelta una risa que inunda toda la sala, y las miradas se fijan en el. El se agacha hasta quedar a mi altura y se acerca lo suficiente para sentir su colonia y me susurra en el oído.

- Cuando quieras lo probamos, porque eso me suena mas a ti ¿No?. Te llevas meses mirándome pero nunca has sido capaz de mover ficha.

Me sonrojo y me doy cuenta de que me ha clavado,y me pregunto porque nunca lo hice. En ese momento aparece otro chaval que parece ser el amigo de antes que tiene el pelo rubio y rizado y los ojos azules como el propio mar, le rodea los hombro a su amigo y le dice

- Aiden no seas malo con ella, quien se te va a acercar con esa cara que me llevas de asesinar gente aunque perdóname pero me lo tengo que llevar que hay un problema jefe

¿Jefe?

- No te preocupes, ya tendremos otro día para tener una buena oportunidad para hablar - Sonrió brevemente, y le doy un gran sorbo a mi copa

- No hagas cosas malas Kalista sin mi y creo que deberías dejar de beber aunque tu amiga parece que se ha ido a la otra punta del mundo y no al baño.

Cuando sus labios pronuncian mi nombre me quedo sorprendida porque no esperaba que se lo supiera, muerdo mi labio aunque eso no quitaba de que era un mandón diciéndome lo que tenia que hacer así que lo fulmino con la mirada y el se despide con la mano para irse con su amigo a lo que parecía a un pasillo que había en la otra punta.

Mi amiga no tarda en volver de su ruta al baño y me cuenta que estuvo hablando con un chico muy guapo. La noche se me hace eterna ya que ella no quiere irse y tampoco vuelve a Aiden, y para empeorar la situación aparece el chico con el que liga Lily y me siento como una sujeta vela así que llega un momento de la noche en que me pierdo por el bar y me siento mareada, creo que debí haberle echo caso ya que ahora sentía que me había subido demasiado el alcohol y encima sola, pero tampoco encontraba a Lily. Quiero salir pero alguien me agarra de la muñeca y al mirar atrás es un tio, que no conozco y intento deshacerme de su agarre pero se vuelve insistente, diciendo que baile con el y me niego, estaba borracha pero no era tanta pero aun así jala de mi, la ansiedad me atrapa. Quiero irme, ¿Dónde estas Lily?

Consigo que me suelte y salgo del bar dando algo de tumbos, y siento el viento frio en mi rostro. Me apoyo en la pared del bar y por unos segundos cierro los ojos, todo me daba vuelta.

Mi oscura obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora