Enamorándome de mi rival

3

Después de un rato de caminata por los desolados pasillos de la escuela el pelinegro llegó a la oficina del director y tocó la puerta un par de veces para luego escuchar un 'pase' y abrir lentamente la puerta

--Con su permiso-- hizo un reverencia -- me llamó señor akainu-- dijo el chico viendo a aquel hombre que se levantaba de su escritorio y se acercaba a él

--Ace quiero presentarte a sabo-- dijo señalando al chico que estaba parado a unos cuantos pasos de dónde estaban ellos-- él estará en tu clase, es nuevo y quisiera que le muestres la escuela y como es todo por aquí

El pelinegro asintió para después pararse frente al rubio y mostrarle una gran sonrisa– Portgas D Ace un gusto en conocerte– El gusto es todo mío – le respondió de igual manera con una sonrisa

Después de eso salieron de la oficina de la dirección y se fueron a su salón, el resto de las clases concluyeron normal osea ace durmiendo en clase sin ser descubierto y Robin y Yamato cubriéndolo para que los maestros no lo descubrieran, llegó la hora del descanso, Yamato y Robin fueron las primeras en salir ya que primero irían a el tocador y después a hacer fila en la cafeteria, ace había terminado de copiar los apuntes de las clases (en las que se durmió) que sus amigas le pasaron, iba a salir de camino a la cafetería ya que sabía que ellas lo estaban esperando hasta que se percató de una presencia en el salón, se extrañó pues creyó que no había nadie ya que era descanso pero al Voltar se encontró con un rubio viendo hacía el patio de escuela, al ver al rubio solo ya que era su primer día en aquella escuela decidio acercarse a él

– Hey sabo– el nombrado volteo a ver quién lo había nombrado y le ofreció una sonrisa

– Hola ace, que sucede– pregunto al pelinegro parado frente a él

– Queria saber si te gustaría ir a la cafetería conmigo a comer, cómo es tu primer día no conoces toda la escuela y pos después te puedo dar un pequeño recorrido – dijo el pelinegro algo apenado y con un pequeño rubor en sus mejillas ya que nunca se había ofrecido a ser guía de alguien y le daba un poco de vergüenza

El rubio al ver el rostro del pelinegro soltó una pequeña risita desconcertando un poco al contrario– Claro – respondió con una sonrisa y se levantó de su asiento, ambos se fueron hacia la cafetería entre risas, una que otra broma y conociendo cada parte de la escuela

Después del almuerzo sonó la campana indicando el regreso de las clases lo cual aburría al pelinegro, las clases transcurrieron normal, osea ace durmiendo, sabo poniendo atención, Yamato y Robin anotando todo para después pasárselo a cierto pecoso, sonó la campana indicando haci el fin de las clases, todos los alumnos salieron disparados de los salones y hacían carreras por todos los pasillos de aquella escuela, el pecoso espero a que la mayoría salga y después salió con las chicas ya que les había prometido ir a comprar con ellas, al salir de allí se encontró con cierto rubio y decidió acercarse a él

–Ahora vuelvo chicas, ustedes adelantense– las chicas asintieron y se fueron– Hey sabo– dijo el pecoso al estar lo suficientemente cerca del ojiazul

–Oh Hola ace– contesto el ojiazul por la recién llegada del pecoso– Dime qué sucede– comento al ver que el contrario quería decirle algo

–Me preguntaba si no estarías ocupado te gustaría ir conmigo y con las chicas al centro comercial a comparar algunas cosas– propuso el pecoso– bueno si tú quieres, si no, no pasa nada –

–Claro, estaba esperando que me pasen a buscar pero creo que están ocupados– dijo el ojiazul – además también necesito comprar algunas cosas

El pecoso sonrió al escuchar la respuesta y se puso a caminar junto al rubio hasta llegar al centro donde se encontraron con las chicas, la tarde transcurrió de risas, compras, una que otra broma y algunos lugares de comida que les llamaba la atención (más al pelinegro), después se despidieron y se fueron cada quien a su casa

El rubio al llegar a su casa no vio a nadie así que se dispuso a ir a su habitación, darse una ducha, hacer tarea del mismo día y después leer uno de los libros que tenía por ahí

El pecoso después de llegar a su casa se fue hacia la cocina a guardar la comida que había comprado y al llegar a la nevera vio una pequeña notita que decía "ace cariño llegaré un poco tarde, deje comida en el horno, si tienes hambre calentarlo, te quiere mucho mamá ", guardo las cosas y se fue a su cuarto a bañarse, se puso a jugar un rato con su celular, después le pediría a sus amigas los apuntes del día, el tiempo pasó tranquilo hasta el llegar de la noche, el pecoso al ver que ya anocheció decido mandarle un mensaje a su mamá y está le respondió diciendo que esa noche se quedaría en casa de su amiga, el pelinegro al saber que si mamá estaba bien y se quedaría en un lugar seguro se dispuso a dejar su teléfono cargando al lado de su cama y se acomodo en ella para recibir a Morfeo después de aquel día tan agotador que había tenido así quedando dormido hasta el día siguiente

.

.

.

Pido perdón por desaparecer más de un mes, el caso es que hace 3 semanas volví a clases y me han dejado muchas tareas y exposiciones que me han mantenido ocupada pero e aquí un nuevo capítulo, espero que les guste y trataré de actualizar cada que pueda, dicho esto me despido

Hasta el próximo capítulo ✨