33 | 1027 words.

47 3 1
                                    

Karine se fue y al final no termine de ver lo que había, tome un vaso de agua de la cocina y me dirigi hacia afuera para seguir investigando.

Ya no se escuchaban ruidos, cuando veo hacia el piso se encuentran unos lindos cachorritos con su madre al pareces durmiendo.

Tomo a uno en mis brazos y lo acaricio con cuidado tratando de que no lo lastime ya que es bastante pequeño.

La mamá ladro por su pequeño cachorro así que se lo entregue, decidí que tal vez estuvieran bien dentro de la casa así que lleve a cada uno adentro.

La madre se veía un poco delgada, lamentablemente en mi refrigerador no había nada más que hielos en el congelador.

Tuve que dajalos solos y hambrientos unos minutos para salir a comprarles algo para comer.

Compré unos sobres de alimento para perro sirve y para cachorro, pero asumía que eran bastantes pequeños para comer ese tipo de alimento, así que termine llevado los aún así para cuando crezcan y probablemente lo necesiten.

Llegué a casa y había una vecina, digamos que un tanto chismosa, pero me conoció viviendo aquí desde que nací prácticamente, nos dió la bienvenida a mi y  a mi madre cuando mi madre compro está casa.

― ¡Señora Harper!, ¿Que hace usted aquí? ― dije con una sonrisa claramente falsa.

― ¡Hay dios, niña!, Escuché ladridos de perro aquí dentro, y tu madre nunca ah tenido perros dentro de esta casa, al menos que sea el perro de tu amiguito Noé ― así es, así ella le llamaba.

Claramente se refería a Noah.

― Oh, no, son unos cachorritos que acabo de aceptar, y no, no son los perros de Noah. ― dije un poco incomoda.

― niña, ¡Dios!, Estás tan delgada desde la última vez que te Vi con esos niños de la secundaria, Dios mío, pareces una anoréxica, deberías comer más. ― se sentía feo que la gente te mirara de esa manera, normalmente en Inglaterra no dicen esas cosas solo se quedan mirando y ya por qué las personas ahí son más "educadas", aunque alguna que otra anciana dicen exactamente lo que piensan, es aún más doloroso escucharlo y que sea verdad, en estos casos, lo único que hacía era bajar mi cabeza y soltar un lágrima y después sonreír como si nada.

― bueno niña, es hora de irme, come más! ― se fue y ahí estabas tu, con Riley, solíamos jugar con ella justo en el mismo lugar en dónde te encuentras, me miras con atención como si estuvieras preocupado por mi, gracioso, porque nunca lo harías, seguro escuchaste toda plática, seguro lo notaste.

Le eche una última mirada y me fui me adentre a mi casa cerré la puerta, camine tres pasos más y caí llorando, no por ti, o probablemente si, pero es más doloroso saber que deje de comer por ti, por el daño que me hiciste.

Lloraba tan fuerte que podía escucharse a cuatro casas más, pero en mi cabeza no escuchaba, te lo juro que no podía escuchar nada, mis oídos estaban sordos, mi cabeza dolía, mis piernas no soportaban la debilidad que tenía en ese momento, aunque estuviera sentada, estoy segura que me escuchaste y fuiste por mi, pero yo no te pude ver porque todo lo que pensaba que estaba mal, se torno aún mil veces más malo de lo que ya podía estar, mi vista se volvió negra, completamente negra, no podía ver nada, sentía que mis ojos sangraban, pero no era así.

Sentía que moría, pero no fui así o en realidad si lo era, estaba muriendo, cada día de mi vida me mataba a mi misma, ¿Por qué?, No lo sé, solo recuerdo que la persona a la que más amaba me dejó, porque no confiaba en mí o solo tenía "miedo".

Podía sentir mis venas por el hueso, podía sentir como mi poca sangre corría por mi cuerpo, podía sentir como dejaba de respirar, podía sentir como mi cabeza pesaba, podía sentir el hueso con mi piel, podía sentir todo.

No estaba bien y probablemente nunca lo este, sabía que moriría, lo sabía.

Y si no fue suficiente el viaje que te regale en el día de tu cumpleaños o la carta, los abrazos, los besos, las caricias, los te quieros, los te amos, todo lo que un mejor amigo hace por su otra alma gemela, tu eras la mía, pero yo no era la tuya, y te perdí como estaba perdiendo la vida, así de rápido alguien puede morir.

Y nunca, pero nunca, pensé en morir por ti, pensé que tú serías mi razón para sobrevivir.

Te amo Noah Cameron Schnapp, fuiste mi mejor amigo, pero ahora somos adultos y aveces no salimos con vida.

Lo lamento si nunca te sentiste bien conmigo y solo me hablabas porque tu madre y mi madre eran mejores amigas y ella te pedía que fueras bueno conmigo, ahora que lo pienso, duele más.

Ya lo quiero que duela, siempre eh deseado poder sanar mi sangrado, pero única eh podido, pero ahora es tiempo, tiempo de detener mi sangrado.

Estoy segura que moriré, quiero que le digas a Chloe que la amo demasiado, la amo demasiado, Evan supo cuidar bien de ella y quiero que sepa que la ame como si fuera una parte de mi al igual que tú, los dos formaban una parte de mi eso significa que sin no pudiera vivir, aún faltan 87 palabras y no que se cómo decirles que los amo, los ame y lo seguiré haciendo.

Quisiera poder quedarme y arreglar todo pero no valdría la pena haberme matado de hambre todos estos años, dios con solo pensarlo duele cada vez más, duele demasiado, duele cada respiración que doy, duele muchísimo, por eso, dejo este mundo, en cuál vine y así mismo me iré, ojalá pudiera quedarme contigo y verte a ti a Jackson juntos, ver a tus hijos, pero, tengo una pregunta, ¿Lloraras por mi muerte?, Por qué eh pensado en eso toda mi vida y nunca sabré si alguien llorara en mi funeral, quisiera quedarme a verlo, pero lo siento, siento que debo irme, pero aún así quiero quedarme.






1027 palabras.

𝐁𝐅𝐅.  | N.S Donde viven las historias. Descúbrelo ahora