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El casco de Bo golpeó con brusquedad al de Din al ser despertada en algún punto de la madrugada. Bo-Katan sintió como su cuerpo temblaba y como aquella horrible sensación de miedo la recorría. Pesadillas, nuevamente no la dejaban en paz.

Las manos de Din estaban sobre sus hombros, al este haber intentado despertarla. Los labios de Bo-Katan temblaron mientras su respiración colapsaba bajo el casco.

—Tranquila, tranquila, Bo.—La suave voz de Din, la ayudó a salir de aquel letargo—Es solo un sueño. Nada es real.

Bo ahogó un sollozo, su cuerpo temblaba. Si, lo que soñaba era real. Soñaba con la purga, soñaba con sus camaradas fallecidos, soñaba con Satine.—Yo.. G-gracias ¿Qué hora es?—Preguntó.

La pequeña cueva en la que dormían estaba totalmente a oscuras. La lamparilla estaba lejos de ellos y R5 parecía estar demasiado concentrado en su propio descanso para escucharlos. Din llevó su mano hacia su casco y prendió la pequeña linterna en él, la luz iluminó parte del cuerpo de Bo.—No lo sé—Confesó Din.

Bo respiró profundo, no podía. No podía, necesitaba quitarse el casco para limpiarse el rostro y respirar un poco mejor—Y-yo… quiero quitarme el casco.

Din guardó silencio al escucharla. Bo se atragantó con su propia saliva al percibir el silencio de Din, y trató de explicar el porqué—Yo… me estoy ahogando, o al menos siento que lo estoy, solo… solo por unos minutos ¿Si es posible?

Din tragó ruidoso—No puedes mostrarme tu rostro, Bo.

Bo-Katan asintió, eso ella lo sabía.—Si apagas la luz de la linterna y me quito el casco ¿Estaría rompiendo el voto? Quiero decir, no podrías ver mi rostro, todo está jodidamente oscuro.

Din respiró profundo, pareció pensarlo por unos segundos hasta que apagó la linterna de su casco.

Bo suspiró, llevó sus manos a su propio casco y lo quitó, sintiendo el poco aire que circulaba dentro la cueva acariciar su rostro. Bo-Katan se apresuró en limpiar su rostro, su nariz y respirar profundamente—Gracias.

Din le dio un leve apretón en su hombro, ella no podía verlo, pero si podía sentirlo frente a ella.—¿Mejor?

Ella asintió, aunque al segundo recordó que Din no podría ver aquel gesto, a menos que estuviera haciendo trampa con su casco—Espero que no estés viéndome con tu visor nocturno, Din—Intentó bromear.

—No te faltaría el respeto de esa manera.

Bo soltó una risita—Ya sabes cómo es mi rostro, aún puedo recordar cuando nos conocimos, pensé que te tirarías por la borda del barco cuando viste que me quite el casco.

Din soltó un resoplido parecido a una pequeña risa—No sabía que habían mandalorianos que se quitaran el casco.

Bo hizo una mueca que ocultó la oscuridad—Tampoco sabías lo que era un Jedi.

—Si, bueno, nunca nos hablaron de eso aquí—Murmuró—Hay muchas cosas de las que aún soy ignorante.

Bo-Katan suspiró. Su respiración se había calmado, y se sentía un poquito mejor—Creo que intentaré dormir de nuevo—Murmuró y muy a su pesar volvió a colocarse el casco.

Din asintió, regresando entre la oscuridad  a su colchoneta—Descansa, Bo.

—Tu igual, Din—Susurró ella, con la esperanza que realmente el sueño llegara. Sé quedó despierta por al menos dos horas más hasta que en algún momento el sueño logró atraparla.

No tuvo pesadillas, más su sueño no fue profundo como le hubiera gustado. Despertó al sentir las manos de Grogu toqueteando su casco. Din parecía aun estar dormido, la luz dentro de la minúscula cueva era nula, Bo prendió la linterna de su casco y cargo al bebé para acercarse a la lamparilla y prenderla.

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