𝐸𝑙 𝑑𝑒𝑠𝑒𝑙𝑒𝑔𝑖𝑑𝑜

136 16 0
                                    

La celda era lo más incómodo en lo que se podía estar, pero por alguna razón se habia quedado dormida unas cuantas horas despues

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La celda era lo más incómodo en lo que se podía estar, pero por alguna razón se habia quedado dormida unas cuantas horas despues.

Sus ojos se abrieron y se encontraba en aquella isla nuevamente con curiosidad busco aquella masa oscura en el océano, pero para su sorpresa se encontró que no habia mar, todo estaba cubierto por aquella masa, retrocedió unos pasos antes de acercarse nuevamente.

Se agacho y con uno de sus dedos toco aquella sustancia alejo su mano con asco, al tacto aquella masa era viscosa y tambien se dio cuenta que se movía.

Se alejo al darse cuenta de que a pesar de lo lento que se movía esta avanzaba, comenzo a dar pasos hacia atrás sin esperar mucho más, quizá podría sentarse hasta que aquella sustancia viscosa la acorrale.

Hasta que se tropezó, cuando levanto la cabeza se encontró con un cofre, aunque si lo ponemos en perspectiva no habia nada a kilómetros de aquel lugar.

Lo miro con detenimiento, se veía demasiado elegante para ser un cofre de pirata y demasiado caro como para que alguien lo dejase tirado en medio de la nada.

Lo miro con detenimiento, se veía demasiado elegante para ser un cofre de pirata y demasiado caro como para que alguien lo dejase tirado en medio de la nada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¿Quién dejaría algo así en medio de la nada primigenia?

Le dio la vuelta para verlo con más detenimiento, poso una de sus manos en a uno de sus costados, en un solo parpadeo ya estaba en el suelo de su habitación quejándose del golpe que se habia dado.

Espera, ¿En su habitación?

Miro a su al rededor con confusión, definitivamente estaba en su casa, pero algo faltaba, sus bellas y míticas mascotas no estaban y tampoco habia signos de que hubiesen estado ahí, salió de su cuarto y camino a lo que era la habitación de Valeia.

Pero ahí no habia nada, ni tampoco estaba ella, algo habia pasado, suspiro con intranquilidad al ver su pijama y fue a cambiarse.

Su impaciencia la consumía al igual que su ansiedad, todo estaba tan normal como hace unos meses, de hecho, todo era exactamente igual a como era hace unos meses, cuando ella no sabía absolutamente nada de la magia ni de aquel mundo bajo sus pies.

𝑈𝑛 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜 (𝐽𝑎𝑚𝑒𝑠 𝐿𝑎𝑘𝑒 𝐽𝑟 𝑥 𝑂𝑐)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora