505 (Matthao)

505: CINCO

Hanbin, un amigo y luego compañero romántico de Zhang Hao, desempeñó un papel fundamental en la complicada historia de amor entre Hao y Matthew.

A medida que la dinámica entre Hao y Matthew se volvía cada vez más turbulenta, Hanbin se vio atrapado en el fuego cruzado. Fue testigo de las peleas, los celos y la montaña rusa emocional que caracterizó su relación.

En el fondo, sabía que el corazón de Hao aún añoraba a Matthew, a pesar de su ruptura, y a pesar de haber empezado a salir con él.

A medida que su relación se profundizó, Hanbin no pudo evitar notar las grietas debajo de la superficie. Observó la inquietud ocasional de Hao y reconoció la presencia persistente de Matthew en el corazón de Hao. Se hizo cada vez más evidente para Hanbin que él era simplemente una fachada perfecta, un reflejo del compañero que Hao sentía que debería tener.

Sin embargo, el amor de Hanbin por Hao era genuino. Amaba la estabilidad y la seguridad que compartían, y realmente creía que podía proporcionarle todo lo que Hao necesitaba.

A lo largo de su tiempo juntos, Hanbin ocultó sus propias inseguridades, enterrando las dudas persistentes que susurraban en su mente. Luchó con el miedo de que nunca sería suficiente para Hao, que no importaba cuánto lo intentara, no podía competir con el amor ardiente y caótico que representaba Matthew.

Y cuando Matthew regresó a Corea y las tensiones aumentaron, Hanbin no pudo ignorar la creciente comprensión de que el corazón de Hao nunca había dejado realmente a su ex amante. Observó cómo los celos de Hao y el anhelo por Matthew se hacían más evidentes, y una punzada de celos carcomía el corazón de Hanbin.

Aún así, Hanbin amaba mucho a Hao. Había pasado por mucho para poder finalmente estar con él. Aunque sabía que Hao no correspondía su amor, todavía no quería terminar con él.

Igualmente, en alguna parte de su corazón, Hanbin supo que Hao había traicionado su relación.

Solo pudo confirmarlo después de lo ocurrido en el restaurante.

A medida que los días pasaban, Hanbin se tomó el tiempo necesario para reflexionar sobre su relación con Hao y aceptar la realidad de la situación.

Sabía que había asumido un riesgo al enamorarse de alguien que aún no había superado completamente a su anterior amante, y ahora estaba enfrentando las consecuencias de esa elección.

Aunque dolía, también entendía que el amor no siempre sigue un camino lineal y que algunas conexiones son difíciles de romper.

En lugar de permitir que el resentimiento y la amargura se apoderaran de él, Hanbin decidió buscar la paz interior.

Comprendió que su valía no dependía de estar en una relación con Hao y que merecía ser amado por alguien que pudiera darle todo su corazón.

Sin embargo, le había tomado varios días llegar a esa conclusión.

Días en los que ignoró las llamadas y mensajes de Hao.

Sabía que la única razón por la que ambos aún seguían juntos era porque Hanbin se había aferrado a su amor unilateral.

Zhang Hao nunca tendría el corazón de terminar con él, especialmente después de haber traicionado su relación de la forma en que lo hizo.

Hanbin estaba decidido a tener una conversación franca con Hao antes de dejarlo ir. Sabía que necesitaba expresar sus sentimientos y, en cierto sentido, también quería que Hao entendiera el dolor que había experimentado a lo largo de su relación.

Se encontraron en el lugar donde solían pasar tiempo juntos, rodeados por la suave brisa que acariciaba sus rostros.

Zhang Hao parecía una persona absolutamente ajena a sí mismo.