𝘐 𝘢𝘤𝘤𝘪𝘥𝘦𝘯𝘵𝘢𝘭𝘺 𝘵𝘦𝘹𝘵𝘦𝘥 𝙠𝙞𝙣𝙜 𝙚𝙭𝙥𝙡𝙤𝙨𝙞𝙤𝙣 𝙢𝙪𝙧𝙙𝙚𝙧.

𝘕𝘰 𝘦𝘴 𝘶𝘯 𝘦𝘹𝘵𝘳𝘢𝘯̃𝘰.

Los dos no se enviaron mensajes de texto durante un mes.

No, no fue por nada grave. No es como si las dudas de Izuku se hicieran realidad. Aunque lo perseguían cada vez que abría el chat de Kacchan por impulso cuando en realidad quería enviar un mensaje a sus amigos.

La culpa recayó en el verdadero enemigo de los estudiantes.

Exámenes.

Izuku apenas tenía tiempo para nada además del trabajo y la escuela. Se intensificó en algún momento y ni siquiera tuvo tiempo de comer una comida adecuada, optando por comer de camino a la parada del autobús o mientras estudiaba. Por comer se refería a bocadillos y veinte tazas de café para mantenerse despierto y bien, con vida. Si consideras su estilo actual 'vivir'. No era el único zombi que caminaba por el campus. Todos tenían los mismos rostros oscurecidos y nubes sombrías flotando sobre sus cabezas, lloviendo fragmentos de cada tema, proyecto y presentación que tenían para la semana. Mira a uno a los ojos durante más de un segundo y te silbaran. Son como gatos protegiendo a sus gatitos.
La picazón de enviarle un mensaje a Kacchan empeoraba con cada día que pasaba. Pasar por alto era más difícil que estudiar, y eso en sí mismo decía mucho porque la especialización de Izuku no era un paseo por el parque. Eso sí, Izuku tenía un par de minutos libres para enviar uno o dos mensajes, pero cada vez que los tenía, se acobardaba.

Izuku pensó que Kacchan no le envió un mensaje de texto por la misma razón. Exámenes. No por suposiciones estúpidas como que Katsuki lo odiaba o algo así. De todos modos, no pudo evadir la ola de decepción cuando pasaron dos semanas sin un solo mensaje de él. Ahogó a Izuku, y con ello aumentaron las especulaciones.

Kacchan no me considera un amigo, Kacchan se cansó de mí, Kacchan piensa que soy aburrido, Kacchan me odia a muerte, Kacchan no quiere hablar más, Kacchan no quiere hablar más, Kacchan no quiere para hablar más, Kacchan no quiere hablar más.

La pluma se deslizó entre sus dedos y cayó sobre el libro abierto con un ruido sordo, dejando una marca negra. Negra como las bolsas debajo de sus ojos que perdieron su tono verde brillante.
Izuku parpadeó, pero no fue suficiente para limpiar su visión de esos molestos puntos diminutos que dificultaban reconocer su entorno. Parpadeó de nuevo. No.
Izuku suspiró, cerrando los ojos con fuerza. Sus dedos masajearon su sien mientras su espalda se encorvaba sobre la mesa redonda en la que estaba sentado. No fue el único que pensó que estudiar dónde podría tener acceso a la cafeína sería una buena idea. Los estudiantes estaban esparcidos en diferentes mesas, pero algunos permanecieron vacíos mientras la mayoría acampaba en la biblioteca. Su vacío mental le impedía descubrir por qué estaba allí, sentado en una mesa con dos tazas de café vacías, una pluma extraviada en un libro abierto junto a una pila de libros, archivos y folletos. Su bolso amarillo estaba en la silla opuesta. Le dio una mirada al libro abierto antes de que un sollozo escapara de su garganta.
Bien. Izuku tenía una tarea estúpida de un profesor que pensaba que dar tareas a sus alumnos durante el período de exámenes era una gran idea para su salud mental. La mejor parte es la dificultad de esas asignaciones. Estaba atascado en este y terminó distraído.

¿Por qué no se quedó dormido en lugar de reflexionar sobre su amigo en línea (?)?

– No puedo hacer esto.

Las manos de Izuku se movieron alrededor de la mesa, moviendo las cosas hasta que encontró su teléfono escondido debajo de un cuaderno. Lo deslizó allí porque sus estúpidas manos no dejaban de extenderse para comprobar los nuevos mensajes. Por cierto, no recibió ninguno, por lo que verificar constantemente era una pérdida de tiempo que no tenía.