La Dama

Pequeña

Han pasado pocos años y la pequeña bebita estaba creciendo.
Lady Eleonor la había educado como toda una princesita.

En esta noche habrá una fiesta en honor a tu aniversario de tu matrimonio-.
...
Espero estes presente- decía una mujer ya madura a Eleonor.
¿Un recordatorio de cuánto tiempo más debo aguantar?-.
Querida, se que tú matrimonio no a ido del todo bien, tu esposo sigue en busca de una amante que le dé un heredero y tú sigues con ese comportamiento tan arrogante-.

¿Arrogante?-la miro fijamente, se levantó de su silla y la miró de frente a la otra mujer.
Solo quiero recordarte madre que tú fuiste quien me obligó a casarme con Enrique, de no ser por ti no tendría esta enfermedad llamado odio hacia ti-.
La mujer solo callaba.
Entonces no vengas a darme más órdenes en mi propia casa, ya di lo que todos querían. Ahora pido que me sea otorgado ese derecho que pido-.

¡Eso jamas!- le gritó la mujer y Eleonor se alejo de ella.
¡No puedes pedir el fin de tu matrimonio con Enrique!-.

Eleonor miro a su ventana e ignorando lo que su madre le gritaba.
¡No puedes hacerlo! Tienes una obligación y es dar un heredero para está familia-.
¡YA LES DI UN HEREDERO, Y ESA ES MI HIJA!, NO VOY A PERMITIR QUE LE QUITEN SU DERECHO A SER ASESORA DE DUQUESA DE YORK.
NO LO VOY A PERMITIR-.

PUES ENTONCES RENUNCIA A DEJARTE DE SER LA ESPOSA DE ENRIQUE-.
Eleonor la miraba muy molesta y llena de rabia.

No puedes, porque así tu hija perdería ese derecho a ser duquesa. Tu te quedas sin un centavo y terminaran desterradas de esta familia. Enrique pondrá a su amante como la nueva duquesa y lo que siga sería repugnante-.
¿Porque lo sería?-.
Por qué esos niños que le pueda dar una amante serían bastardos y eso en los York no van a permitirlo, vamos a terminar en la ruina-.

Tu terminarías en la ruina, porque por mi recibes 50 libras por mes-.
No pongas eso en pelea-.

Sin mi no tendrías esos gastosos vestidos de alta costura-.
La mujer se molestaba mucho por esos comentarios.

Sin mi...no eres nada-.
...
Solo una vieja que nunca amo a su marido, solo fue vendida por el que tuviera más libras. Un hombre que dándote todo, quiso amarte, ganarse tu corazón.
La mujer lloraba de rabia.

Mi padre no hubiera permitido que me sometieran a sumisa de el duque-.
...
Lárgate de mi casa-.
...
La mujer indignada se marchó.

Eleonor seguía mirando afuera.
Su pequeña niña estaba jugando con la fuente.
En ese momento tocaron así puerta.
...

Ella volteo y sonrió.
Un hombre tan apuesto entro a la habitación y se acercó a Eleonor.
Me alegra que estés aquí-.

No puedo dejarte con esa carga tan pesada de pasarla sola en esta enorme casa-.
No me encuentro sola-.
Lo se, tienes a tu amada hija-.
Si...y también te tengo a ti-.
Lo se-.
...
...
Debo hacerle entender a mi Tío abuelo en qué me de el lugar a mi hija, en la sucesión al título de duquesa de York-.
Lo podrás lograr-.

Me ha costado trabajo lograrlo-.
Puedes hacerlo-.
También quiero el divorcio-.
Eso sabes que nunca se podra-.
¡Porque siempre me repiten lo mismo!-estaba resignada a seguir con esas mismas palabras siempre.

Eres la esposa de Enrique, duque de York-.
Pero sabes que tú deseas que yo sea tu esposa-.
...

Continuará