Vos no mandas, mando yo

Capítulo 2

PETER

Llegué al restaurante después de un primer día de clases larguísimo, se me hizo infinito porque todavía tenía muchas cosas a las cuales acostumbrarme, esta vez nadie iba a supervisarme, yo era la persona al mando.
-¡Hola!-saludé con un beso en los labios a Sabrina, ella me sonrió y le sonreí, nos sentamos enfrentados- ¿cómo estas?
-Yo estoy bien Peter, ¡¿vos cómo estas?! ¡Ya te absorbió el laburo!-primera indirecta del día, Sabrina reclamándome que le de más atención.
-Es el primer Lunes, el primer día de clases Sabri, ¡es obvio que voy a tener la cabeza en el laburo! ¡Mi cargo es muy importante! Y tengo que demostrarle a todo el mundo que soy merecedor de mi puesto-suspiré mirándola a los ojos, la cara de Sabrina cambió a uno de vergüenza- no es que lo nuestro se vaya a terminar solamente porque ahora tengo mucho más trabajo-intenté animarla- sólo no voy a poder estar en todo y todo el tiempo.. ¿me entendes?
-Sí...-Sabrina me respondió no muy convencida- sos demasiado generoso Peter, siempre pensaste mucho en los demás y no en vos.. tenes que pensar en vos, y darte gustos, pasar más tiempo disfrutando solo.. conmigo..-hizo una pausa, Sabrina estaba persuadiéndome para lograr su cometido: que pase más tiempo con ella.
-Es mentira eso, cuando era chico no era una persona muy considerada que digamos.. justamente, pensaba demasiado en mi mismo, y hace unos años aprendí el que no soy el centro del universo-me sinceré y Sabrina se quedó estática, pensativa.. era tan obvio que no le había caído bien mi respuesta- ¡hola-saludé al mesero que se acercó para darnos la carta- buenas noches, gracias
Después de agradecerle al mesero Sabrina eligió lo que quería comer y yo también.
-Estábamos hablando de otra cosa antes de que vengan a preguntarnos por la comida- Sabrina y su cara de pocos amigos me anticiparon el que algo andaba mal- ¡Peter llevamos dos años juntos! Dos años en los que nunca me pediste que sea tu novia.. y todos tus amigos me conocen, ¡tus papás me conocen! ¡Y creen que soy tu novia! ¡Pero nunca me presentaste cómo tu novia!-estalló en mi cara, la bomba de tiempo finalmente explotó- siento que no estas comprometido con nosotros... conmigo..
Los ojos de Sabrina se llenaron de lágrimas y recién ahí me sentí mal, culpable.
-Sos una mujer maravillosa... Pero no estoy listo para tanto compromiso Sabri, te quiero, es obvio que te quiero, pero ahora mi máximo compromiso es llevar una escuela adelante y educar
-¡¿Y antes?! ¡Ahora me decís esto porque sos director! Pero antes sólo eras maestro y..-Sabrina iba a seguir y la interrumpí.
-Te quiero... y me caes bien... y disfruto de compartir con vos... pero tengo otras prioridades en mi vida, y vos también tenes otras prioridades, y no quiero lastimarte, no sabía que estaba haciéndolo-quise morirme porque empezó a llorar- es mejor que sea sincero Sabri, lo mejor es que nos frecuentemos menos, que haya un tiempo.. me gustaría pode llegar a ser amigos sin la necesidad de..
-¡¿Sin la necesidad de coger?!-Sabrina elevó el tono de su voz-¡¿una persona fija para coger fui todo este tiempo?!
-¡No!-le aclaré, iba a seguir justificándome y ella se paró, se puso de pie y abolló la servilleta de tela para tirármela en la cara, y se fue, salió del restaurante,a mi alrededor los comensales murmuraron cosas y me miraron.

LALI

Abrazada a Candela y a Eugenia caminé por la calle, juntas íbamos hablando de nuestras vidas hasta que llegamos a la puerta del restaurante para el cual había reservado María.
-Hola, Mery del Cerro hizo una reserva para hoy-Eugenia habló y la persona de la recepción revisó una lista, asintió con la cabeza y nos hizo pasar.
Al traspasar la puerta en eso veo a una chica rubia y alta tirar una servilleta de tela a la cara de una persona, ¡seguro de un hombre!
Los murmullos en el restaurante no se hicieron esperar, y no me sorprendí para nada de porqué esa mujer se había enojado con el hombre que había tenido frente a ella.
Me quedé mirando firme a Peter Lanzani y elevé mis cejas, él me imitó y me sonrió, yo me reí con ironía y negué con la cabeza.
-Seguro te lo merecías-caminé por al lado suyo y después lo ignoré, mis amigas se quedaron desconcertadas y saludaron a Peter con amabilidad, y él se hizo el simpático-¡al fin solas!-celebré cuando llegamos a nuestra mesa-¿que onda Mery?-cambié de tema-¿avisó que iba a llegar tarde?
-Acabas de cruzarte con Juan Pedro Lanzani después de no verlo durante AÑOS y actuaste de manera civilizada... ¡y lo ignoraste!-Candela estaba maravillada-¡¿cómo?!
-Lo vi hoy por a la mañana, ¡¿no se enteraron de que es maestro y ahora el nuevo director de nuestra escuela?!-miré a mis amigas a los ojos-¡hoy llegué tarde! ¡Y el tarado de Peter Lanzani por poco me lo descuenta! ¡Nunca llego tarde boludas! Y la persona que primero veo al entrar al aula es a ÉL, ¡una verdadera pesadilla!
Claro... desde que terminé mis horas laborales y volví a mi departamento estuve concentrada en organizar actividades para mi materia, y no tuve tiempo de procesar algo complejo: el de ahora en más compartir espacios en común con Juan Pedro.
-Ok... ¡Es mucha información junta!-Eugenia se rió y me sonrió-¡lo lindo que está el hijo de puta! ¡Sigue igual de lindo! ¡Igual creo que está mejor que antes!
-Pero sigue siendo un idiota, su cita se escapó de él de manera furiosa, seguro hizo bien, ¡va a ser muy feliz! ¡Lejos de la persona más falsa y dramática del mundo!
-Veo que todavía no le perdonaste lo que en el pasado te hizo..-Candela me miró a los ojos.

-Flashback-

Jugar a la botellita en el colegio era algo polémico, los maestros que daban vueltas en el horario del recreo se ocupaban de que no nos matemos por brutos y de que no hagamos locuras.
La botellita constaba en girar en el centro de una ronda de gente una botella vacía y ver a quién le tocaba la parte de la tapa, esa persona tenía que tirar otra vez para que quién salga sea la persona con la cual tenían que compartir un beso.
No sé cómo pasó pero terminé en la ronda, no era un juego que me gustara, además los chicos nunca habían reparado en mi de manera interesante.
Y la persona que giró la botellita y a quién le toqué fue a Juan Pedro, sus amigos se cagaron de risa y él sonriéndoles también se rió, yo intenté irse pero una chica a mi lado me agarró del brazo para prohibírmelo.
-¡Aprovechá!-la chica me lo susurró-¡es un bombón!
-Bombón las bolas-hablé en voz alta y Peter me escuchó.
Su cara de boludeo cambió y se puso cuatro para caminar en el suelo de ese modo y acercarse a mi, al minuto se sentó sobre sus rodillas.
Peter tomó mi cara entre sus manos y me quedé congelada porque no lo había esperado.
Sus amigos lo animaban a proseguir pero burlándose de que iba que tener que besarme a MI, que seguro iba a ser mi primer beso y tenía que sentirme afortunada.
Peter acercó su boca a la mía y rápidamente actué, ¡pensé en rápido!, ¡le mordí fuerte la oreja y me puteó!
Me aparté y me puse de pie, y me escapé...Sobretodo me escapé porque no pensaba recibir mi primer beso de parte de una persona que no lo deseé, ¿ser un jueguito para alguien? No, y menos de Juan Pedro Lanzani, ¡no lo soporto!

-Fin del flashback-

Pestañeé varias veces después de volver a la realidad.
-Casi hizo.. ¡y fui rápida! ¡Pensé y actué más rápido que él!-le respondí a Candela orgullosa.
Para suerte mía llegó nuestra amiga María y pudimos pedir comida para comenzar con nuestra cena, y claramente nos pusimos al día.

Martes 4:30 AM, ya bañada, vestida y lista, ya desayuné café con leche y tostadas con queso crema.
Me dejé el pelo húmedo con la esperanza de que se seque sólo, pero para mala fortuna mía me tocó un día lluvioso y con humedad para afrontar.
Esperé al colectivo abajo de la lluvia y al ingresar estaba lleno de gente.
Incómoda tuve que quedarme parada y apretada al resto de los seres humanos, parecíamos sardinas enlatadas.

PETER

Iba a tomarle lista a los docentes de la institución en media hora, y dejé a Lali última para en cierta manera darle una "tregua" lo último que me hacía falta era tenerla de enemiga, justamente no la necesito de amigo, necesito que sea una aliada, que trabaje en equipo, y que nos podamos llevar bien, lo cual sería algo nuevo.
Lali esta vez llegó a tiempo, demasiado a tiempo, demasiado rápido.
-¿Llueve?-le pregunté desconcertado y ella asintió-¿y porqué no trajiste un paraguas?
-Porque tenía miedo de dejar pasar el bondi y que no aparezca otro, no quería llegar otra vez tarde Peter-suspiró- e iba a tener que subir por las escaleras para buscar un paraguas, porque donde vivo no funciona el ascensor y tal vez se me hacía tarde..
Arrancó a hablar en modo lorito y eso me causó gracia, me reí y ella saltó a la defensiva, se volvió seria.
-Pero llegaste bien.. y demasiado temprano..-suspiré, Lali tenía ganas de "ladrarme" en la cara, lo sabía porque la conocía, y estaba conteniéndose para mantener la paz- vení, pasá..-la llamé para que me siguiera y llegamos a mi oficina, abrí un guardarropas y en mi bolso deportivo había una toalla, se la ofrecí.
-¿No está sudada?-Lali desconfió y negué con la cabeza mientras se me formaba una pequeña sonrisa-¿seguís jugando al fútbol?
-Sigo jugando al fútbol con nuestros ex compañeros una vez por semana, tuviste suerte de que ese día justo sea hoy.. y la toalla está limpia, no soy un sucio-intenté hacerla reír pero ella siguió a la defensiva- te juro que no hay ningún truco Mariana, si te secas la cara con la toalla no vas a terminar teñida de rosa-elevé mis cejas e hizo lo mismo, elevó sus cejas, y tan sólo por un momento nos quedamos así... evaluándonos, ambos a la defensiva.
-Así que no hay trucos...-ella se pasó la tolla por la cara para secarse la cara y noté que se manchó- ¡lástima por tu toalla blanca! ¡Pero justo hoy me puse base! Espero que seas bueno lavando ropa
-¡Sos tan terriblemente infantil!-la miré mal y ella soltó esa sonrisita linda y burlona de siempre.
-Excitante, lo sé-me boludeó y me dio una palmadita en el hombro- gracias por ser todo un caballero, ¡por una puta vez en tu vida!
¡Y era tan obvio que iba a tirarme la toalla en la cara! Imitó lo que me hizo Sabrina la noche anterior.