Una Estrella en el Cielo

CAP 1

CAMERON

Así que se llamaba Alex Interesante
Tengo que admitir que es demasiado atractiva, su piel morena, su cabello ondulado color negro, sus ojos color negro, sus pestañas largas, sus labios carnosos era más pequeña que yo, pero en verdad ella se vea tan bien con ese traje de baño, antes de seguir mirándola mi hermana me saco de mis pensamientos

–Cam saluda–me miro con cara retadora

Lo único que hice fue corresponderle el saludo, algo me dice que ella no aparenta ser quién es, se ve tan perfecta, no todo en ella puede ser de color de rosa, algo oculta y yo seré quien lo descubra

–bien ¿quieren algo de tomar? ¿Jugo o malteada?–pregunto la amiga de Alex llamada Isabella

–yo quiero una malteada–Respondió Azul

–¿y para Cameron?–Pregunto Ivanna

–¿tienen cerveza?–pregunto Azul apenada

–Nosotros no tomamos ese tipo de bebidas–respondió Alex

–que lástima, entonces mi hermano tendrá que buscar una en otro lugar–dijo mi hermana mirándome

La mire y me levanté para ir a buscar mi bebida, al parecer a mi hermanita quiere hacer nuevos amigos quién lo diría
Al regresar me di cuenta que estaban escuchando música y bailando, pero mi mirada se clavo en ella, en Alex, estaba mirando el cielo, me pare y me dirigí a ella, al sentarme ella me miró confundida

–¿Que haces?-me pregunto

Yo no le respondí, no soy una persona de muchas palabras, hablo con las personas que son como yo, o cuando les tengo confianza

–ah tampoco hablas, aparte de maleducado, mudo–dijo

Ella se paró me miró y estaba a punto de irse cuando la detuve y le dije

–«sé quién eres en verdad Alexa, puedes engañar a todo el pueblo, pero a mí no»– le dije para luego tratar de irme, pero algo me lo impidió

–¿quien te crees eh?–me pregunto

–¿a que se debe esa pregunta eh?–le devolví la pregunta

–la primera vez que te vi, chocamos , tropecé y caí de culo, ni si quiera me ayudaste, y ahora me dices que puedo engañar a todos pero ¿menos a ti?, Diablos ni si quiera te conozco–respondió

–tienes razón la primera vez no fui gentil, y si quieres una disculpa para poder morir en paz, de acuerdo te la daré «perdón por verte caer preciosa» pero en esta ocasión yo tengo la razón, tu no eres quién aparentas ser, puedo verlo en ti, lo puedo ver en tus ojos, la cosa aquí es que tú quieras admitirlo–le dije acercándome a ella

–número uno: no vuelvas a decirme en tu vida preciosa, número dos: no vuelvas a decir que no soy quien parezco ser, por qué te equivocas, y número tres–dijo acercándose a mi– «yo siempre tengo la razón querido»

Eso último me hizo sonreír, esto será divertido, comencé a acercarme más, no entendía por qué, pero algo en mi quería eso, ella también se empezaba a acercar a mi, nuestras respiraciones chocaba hasta que alguien rompió el momento y por alguna extra razón me sentía raro

–ALEX, ALEX ¿ESTAS AQUÍ?–la voy de Ethan se hizo aún más cerca

Antes de que nos vieran alguien jalo de mi playera Y supe quien era

–no vuelvas a acercarte a mi ¿entendido?–me advirtió mirándome

–Cómo usted diga preciosa–dije mirándola

–que no me vuelvas a decirme preciosa–me miro con rabia

–perdón Señorita perfecta–dije mirándola con una sonrisa de malicia

Antes de que ella pudiera decir algo, Ethan llegó

–oh aquí estabas, hola Cam–dijo saludando

Yo solo lo salude con la mirada y mire a Alex

–¿interrumpo algo?–Pregunto mirándonos

–no para nada yo ya me iba–le respondí

–nos vemos luego Alex, adiós Ethan–me despedí

Recordé que mamá nos dijo que nos quería antes de las siete en casa, a esa hora era la cena así que fui por mi hermana y nos dirigimos a la salida

–¿que te traes eh?–dijo poniéndose el casco

–¿de qué hablas?–pregunte

–no hablaste con ellos ¿por qué?–Pregunto

–tal vez por que son demasiado fresas, sabes que ese tipo de personas no me agradan–respondí

–entonces ¿por qué hablabas con Alex?–me miro con cara pícara

–oh no, ni me mires asi, ella solo se me hace interesante, además le caigo mal ¿crees que podría gustarme alguien como ella?–la mire

–nunca te pregunté si te podría gustar, te pregunté el por qué hablabas con ella, pero veo que tal vez pueda pasar algo entre ustedes–dijo subiéndose a la moto

–estas loca hermanita–le dije mientras encendía la moto

–tu hermano mío, estarás loco por ella, ya lo verás–dijo ella

–dios me libre de eso

Y al terminar de decir eso arranque mi moto y nos dirigimos a nuestra nueva casa, al llegar vimos a mamá afuera acomodando unas flores y decidí ayudarla

–yo te ayudo mamá–le dije para correr a ayudarla

–oh gracias mi niño–dijo mi madre para acariciar mi mejilla

–cuando termines de acomodar las flores entras y te lavas las manos-ordenó mi madre– y tú Azul ayudame con la mesa

–Claro mamá–dijo mi hermana para entrar

A mí y a mi hermana nos gustaba ayudarle a mi madre a los deberes de la casa, algunos eran productivos, algunos no lo eran, mi madre una vez me dijo cuando era niño
«Siempre aprovecha cada momento que tienes con esa persona tan especial para ti, por qué cuando menos te lo esperes, en cualquier momento se puede ir de tu vida, tal vez por un tiempo o para toda la vida, por eso hay que saber valorar a cada persona cuando la tienes a tu lado» y eso hacíamos mi hermana y yo, aprovechar cada momento que teníamos con mi madre, papá no tenía tanto tiempo para nosotros, siempre tenía viajes de negocios, también era una de las razones por las que no dejaba a mi madre sola
Al terminar de acomodar las flores fui a lavarme las manos y cuando estuve a punto de sentarme alguien tocó la puerta

–¿esperaban a alguien?–Pregunto nuestra madre mirándonos

–No, a nadie–respondió mi hermana

–bien iré a ver quién es–se levanto mi madre

Al escuchar una conversación de personas mi hermana y yo nos miramos por unos segundos y decidimos y a ver quién era, y al ver quién era, se formó una sonrisa de oreja a oreja