capitulo 8

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Unas semanas después la azabache le pidió permiso a sus padres para invitar a sus amigos a casa y ellos aceptaron gustosos ya que confiaban en su hija y aquel día no estarían en casa por cuestiones de trabajo

La azabache se encontraba leyendo en su sofá, todo era un completo desastre, por todos lados habían torres de libros y tazas de café vacías, pero no estaba preocupada ya que era muy temprano, la chica se perdió en la lectura y cuando llegó al capitulo final del aquel libro comenzaron a tocar su timbre

Saiki: mierda ¡YA VOY!

La pelinegra corrió a abrir la puerta encontrándose con la bakuescuad

Denki: ¿Y mis suegros?

Mina: ¡Hola!

Kirishima: ¡Te compramos galletas!

Sero: ¡Si!

Saiki: mis padres no están, gracias por las galletas y hola

La chica dejo que pasaran y comenzó a recoger los libros

Kirishima: te ayudamos

Mina: ¡Si!

Después de un buen rato terminaron de ordenar el lugar y la chica se cambió de ropa ya que seguía en pijama

Sero: ¿Y en alcohol?

Saiki: ni lo sueñes

Denki: pero no están mis suegros

Saiki: en mi casa no perdedores

Mina: ¿Y la música?

Todos decidieron poner música mientras cocinaban algo para comer y hablaban  pero los gritos y regaños del cenizo no tardaron

Katsuki: ¡¡ASI NO SE USA EL CUCHILLO!!

Katsuki: ¡¡ES MUCHA SAL!!

Katsuki: ¡¡ESA MIERDA SE ESTA QUEMANDO!!

Katsuki: ¡SABE HORRIBLE!

Después de todo esto todos pudieron comer tranquilamente y al terminar decidieron ver alguna película, el rubio eléctrico era el encargado de búscala mientras los demás limpiaban el desorden

Saiki: ¿Alguien vio mi celular?

Todos: no

Kirishima: ¿Lo vas a necesitar?

Saiki: mis padres me pidieron que los llamara a las cinco y ya son cinco y media

Denki: ¿No lo dejaste arriba?

Saiki: mierda, si en mi habitación

Sero: alguien puede ir por el

Todos miraron al cenizo que solo estaba sentado en el sofá sin hacer nada

Katsuki: no

Kirishima: vamos bakubro

Katsuki: no voy a ir por su celular

Sero: si, bakugo no puede ir, es demasiado para el

Al escuchar eso los dientes del cenizo rechinaron mientras subía rápidamente las escaleras

Al entrar a la habitación de la pelinegra noto que todo seguía igual así que decidió comenzar a buscar el celular

Después de unos minutos lo encuentro cerca de la cama pero cuando decidió volver con sus amigos noto algo, era aquel tulipán blanco que una vez le regaló, este estaba adornando aquella mesita de noche
El tulipán estaba dentro de un marco de vidrio que llevaba unas lucesitas de color blanco

Déjame Amarte/Bakugo×tnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora