♡ Bright esta en el equipo de basquet
♡ Win tiene que fotografias al equipo de basquet
♡ Bright quire saber el nombre del bonito castaño amante de la fotografía
♡ Win no tiene nada de interes en el atrevido pelinegro
"- Bonito, ¿No vas a decirme tu...
El equipo de básquet había terminado su entrenamiento, estaban más cansados de lo normal, puesto que se quedaron más tiempo. Pero, al contrario, Bright tenía más energías que nunca, amaba jugar al básquet, era su pasatiempo favorito.
Cuando el entrenador les dijo que podían irse todos fueron desesperados a las gradas a buscar sus botellas de agua, Bright fue más lento, estaba feliz. Todos salieron del gimnasio bromeando, iban hacia los vestidores.
Algo llamó la atención del peli-negro, quien sonrió aún más que antes, y Boun no ignoró eso.
—¿Ese es el chico que nos fotografió el otro día? —Le preguntó al más bajito— Oh, no me digas que irás a hablarle.
—Claro que sí.
—En una hora tenemos que irnos al club, así que ve a cambiarte.
Boun era parte del club de baile, y Bright era parte del club de canto, el cual incluía el rap, otra de las cosas que le fascinaban al peli-negro.
—Boun, relájate —Comenzó a caminar de espaldas hacia su objetivo— Es viernes, y tu cuerpo lo sabe. wUUuU —Boun negó mientras reía y se metió a los vestidores. Bright se dio la vuelta y caminó de frente y decidido hacia el peli-castaño, quien estaba concentrado sacando algo de su casillero— Bonito, ¿No vas a decirme tu nombre?
El chico al ver cómo Bright se apoyaba en los casilleros cerró el suyo y lo miró con el ceño fruncido.
—A ver, ¿Qué interés tienes en conocerme? No lo entiendo.
—Eres muy bonito —Sonrió— Por eso quiero conocerte, ¿Qué tiene de malo?
—Uh. Supongo que gracias. Pero no quiero saber nada de ti, adiós ~ —Se dio media vuelta, dispuesto a caminar.
Bright tomó del brazo al peli-castaño y lo estampó contra los casilleros. Se acercó sin borrar su sonrisa, viendo cómo el contrario se tensaba.
—Aléjate, hueles horrible.
El más bajito cayó en cuenta de que no se había duchado ni tampoco cambiado, pero le dio igual, tenía al peli-castaño acorralado, era su momento.
En un intento de escape del chico, Vachirawit apoyó algo brusco una de sus rodillas en los casilleros, entre medio de las piernas del contrario. El peli-castaño se tensó de más y sus mejillas tomaron un leve color rosa. Estaba nervioso, y no lo negaba.
—Br-Bright, apártate —Ordenó, pero fue completamente ignorado.
—Tú sabes mi nombre, ¿Por qué no puedo saber el tuyo?
—Si te lo digo ¿Me dejas en paz?
—Por ahora...
—Oh, no, entonces claro que no.
Bright cortó la distancia entre ambos cuerpos, logrando poner aún más nervioso al peli-castaño, quien desvió su cabeza hacia el costado.
—¿Vas a hablar? —Sonrió mientras veía como el chico relamía sus labios incómodo.
El peli-castaño se negaba a tocar a Bright, estaba sudado y eso le daba asco, por lo que no podía apartarlo.
—Bright, ya deja al pobre chico y ve a cambiarte.
Jodida mierda.
Vachirawit resopló. Se alejó por completo del peli-castaño y se metió en el vestuario, no sin antes dirigirle una mirada fugaz. El chico miró con agradecimiento al chico que le había salvado.
—¡Ah! Dios mío ¡Gracias! —Exclamó haciendo reír a Boun, quien estaba apoyado en los casilleros.
—Ten en cuenta que no se va a rendir —Le advirtió.
—Hm, si él insiste yo también puedo hacerlo —Boun lo miró con una ceja alzada— Se cansará de preguntar y sólo se irá, en ningún lado está escrito que yo debo rendirme.
El peli-castaño le agradeció nuevamente a Boun y luego se fue rápidamente. Boun quedó atónito, ¿Qué acababa de escuchar? Pues no sabía, pero sí sabía que a Bright le iba a encantar escuchar eso.
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