Ninyu :3

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Anyu

Hoy es una bonita mañana, me encuentro preparando una medicina para pequeño ninjalino, ya no estoy tan preocupada, el saber que voy a recibir ayuda...no de la mejor persona pero supongo, eso quiero creer, que, las cosas podrían salir bien.
-Hola pequeño -saludo
-Hola, buenos días
-¿Cómo te sientes?
-Igual
-Uh, bueno, te traje un medicamento
-Nooo -se queja-. Los medicamentos saben horribles -se enrolla con un manto
-Pero si no te lo tomas no mejorarás
-¡No!
-Bien, aquí te lo dejo -coloco la medicina a un lado de el
Me retiro sin más, supongo que Teeny no esperaba esa acción de mi parte, me dirijo al bosque de bambús para meditar, me siento serena, el viento soplando, susurrándome al oído, todo está en blanco, todo el pesar cargado que tenía ayer se esfuma, el sonido de los pájaros, todo, me siento como aquella vez en la que me convertí en protectora de esta montaña, los momentos en los que aún era una niña.
~Pa...señor
~Mande Anyu
~Crees que...¿Algún día podré ser alguien reconocida?
~Claro, tú puedes ser todo lo que te propongas y siempre tendrás mi bendición
~¿De verdad?
~Siempre y cuando sea para bien ~sonríe.
Esos recuerdos, donde toda la montaña estaba inundada de paz y alegría...todo eso tenía que cambiar, no pude salvar nada, falle, por eso tengo que ser más hábil y fuerte cada día, para que así, nadie se atreva a tocar a la montaña de nuevo.
—¿Qué pasaría si fuera una persona normal?
No sé qué me dio por decir eso en este momento, pero, es algo que pienso desde hace mucho,  sería bien asentada en la sociedad, acaso ¿Estudiaría junto a los héroes?, Al menos sería capaz de lograr entender las cosas que no conozco...soy interrumpida por un pájaro, no cualquier pájaro, si no un colibrí, es la primera vez que veo un colibrí después de tantos años, los colibríes son de buena suerte, ¿Acaso eso significará algo? ¿Quizás una respuesta a mis preguntas? O el que realmente hoy todo saldrá bien, no lo sé.
—Hola, ¿Qué haces aquí?, ¿Estás perdido?, Dime, entraste por el portal ¿verdad?
No recibo respuesta, solo se va volando. Yo hago los mismo me levanto y me dirijo a la pagoda a ver a pequeño.
—¿Te tomaste medicamento?
—Si, sabe feo —hace rabietas—. No pienso a tomarlo de nuevo —toce—
—Ya veremos, dime, quieres jugar un juego de mesa
—¡Si!, Damas chinas
—Claro
Y así estuvimos, durante un rato, ahora estamos en la quinta ronda, el me va ganando, es bueno.
—Y...¡Gane! —vitorea
—Uh, de seguro hiciste trampa
—Quisieras
—¿Te parece si te cuento una historia son títeres de sombra?
—Si, por favor, hace tiempo que no lo haces
—Bien, iré por las cosas
Me levanto del tapete donde me encuentro sentada, voy a una habitación en la parte trasera de la montaña para buscar entre algunas cajas unos títeres. De vuelta a la habitación, observó como pequeño tiende el tapete donde está.
—Te preparas muy rápido pequeño
—Claro
—Bien, hoy te hablaré sobre la leyenda "La perla del dragón"
—Oh —abre los ojos con mucha intriga
—Jej, la leyenda cuenta la leyenda que en la isla de Borneo, en la montaña más alta de la isla Kinabalu, habitaba un dragón que custodiaba una preciosa perla.
Todos los días jugaba con ella; la lanzaba al aire y la recogía con la boca. Se sentía dichoso con su perla. Muchos habían intentado en vano arrebatarle su tesoro, ya que el dragón no estaba dispuesto a perder su única posesión. —levanto los títeres y al dragón como si defendiera su perla —. No obstante, el emperador de China estaba dispuesto a retar al pacífico dragón y solicitó a su primogénito, el futuro heredero que consiguiera la perla para el tesoro imperial.
Tras varios días de travesía, el príncipe divisó la montaña y, en su cima, al juguetón dragón. Ideó un plan para arrebatarle la perla sin correr peligro. Ordenó a sus hombres que construyeran una cometa que soportara el peso de un hombre y una linterna de papel.
Después de siete días los hombres del príncipe acabaron la cometa, la más hermosa jamás vista y en la noche, montó en la cometa y voló a lo alto de la montaña. Se adentró sigilosamente en la cueva. El dragón dormía profundamente, portando la preciada perla. Con sumo cuidado, arrebató la perla del dragón y en su lugar dejó la linterna de papel. Hizo una señal a sus hombres para que recogieran la cuerda de la cometa, aterrizando en la cubierta del barco.
Rápidamente, mandó izar las anclas y el barco zarpó directo al mar —Tomo mi bastón y hago levitar el barco de origami por toda la habitación observando al Teeny Weeny con alegría.
—Cuando el dragón despertó, descubrió que le habían arrebatado la perla, dejándole una linterna de papel. Enoja comenzó a echar fuego y humo por la boca y se lanzó montaña abajo para atrapar a los que le arrebataron su perla; rastreó todos los rincones de la isla, hasta que divisó en alta mar un junco chino. Se precipitó hacia el barco y gritó ¡¡Devuelvan mi perla!!. Todos los marineros estaban aterrorizados.
El príncipe, en un intento desesperado por zafarse del dragón, mandó cargar el cañón más grande y disparó contra su furioso perseguidor. El dragón vio como entre la nube de pólvora salía una bola y pensó que era su perla así que abrió la boca para recoger su joya y se hundió en las profundidades del mar. El príncipe regreso triunfante, y la perla del dragón se convirtió en la joya más preciada del Reino de China.
—Que genial, pero, pobre dragón, murió, le arrebataron su perla
—Si bueno eso dice la leyenda
—¡Más, más quiero que me cuentes más historias!
—Ser otro día, tienes que descansar —digo colocando el termómetro al menor —. Te bajo la fiebre —digo alegre—. Eso es bueno —coloco mi mano en su frente para verificar —. Si sin duda te bajo, pero igual tienes que seguir tomando la medicina, me preguntó si Ninja Nocturno tendrá algún medicamento mejor
—No, no quiero medicinas, saben horribles
—No seguiré con esta conversación, descansa pequeño —sujeto los títeres y me salgo de la habitación
—Listo, ya está todo en su lugar —comento colocando la caja con títeres en su lugar
Voy a la habitación de Teeny Weeny, está dormido.
Me preparó un té y voy afuera para ir a entrenar.
–¡Derecha! —esquivo una mancha —. ¡Izquierda!...¡Arriba! —me agachó esquivando una liana pegajosa.
~Concéntrate siempre en los ataques del contrario Anyu, nunca bajes la guardia
~Ok
~bien...¡Atenta! ~lanza una patada
~serc...~es golpeada
~Atenta, mira mis movimientos, predice mis ataques ~golpea
~Wow
~Tienes tres años aún, pero sé que puedes, ¿Ok?
~Ok señor
~Ya sabes que puedes decirme padre ~lanza unas manchas
...
—¡Jaiya! —rompo el tronco que se dirija a mí
—Ok...creo que tendré que arreglar eso luego
Me dirijo a un bosque de cerezos, estando dentro cojo una de las flores, admirando sus pétalos, tan suaves; en el centro del bosque divisó uno de los posos de la montaña, algunas piedras cubiertas de musgo, en el fondo se logra ver una gran piedra, una piedra que me da nostalgia, quizás otra de las entradas o salidas de la montaña, no, no solo se que si es un portal, si no que también es el portal que lleva a la antigua aldea, una deshabitada, una que no logré proteger, una entrada que me recuerda que no pude cumplir con mi deber como guardiana.
—Si tan solo viese sido mejor
Me siento en uno de los árboles sintiendo el aire pasar, el haber perdido, sin duda alguna es un remordimiento que cargaré siempre dentro de mí.
—Siento mucho haber fallado...padre

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Holap, nuevo cap, corto...*llora*, no pienso decir más, para así poder continuar con el siguiente cap, descansen y tomen agüita ùwú

Bey, los jamo diyeitasticos
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