Capitulo 1: "La lluvia"

7 0 0
                                    

La vista de la ciudad desde mi punto de vista es bonita, pero solo si no se enfoca bien. Se ven edificios a lo lejos, modernos y tecnológicos, una fuerte lluvia hace parecer que se mueven, pero esos gigantes de hierro y concreto son muy resistentes. Cada cierto espacio se logran observar las torres de control, para evitar el caos en la ciudad. Y al final, a lo más lejos se observa la muralla, no muy alta, cuya utilidad es marcar una frontera. Bueno, esto es viendo hacia el centro del continente, en cambio del otro lado la vista puede resultar, tanto tranquila como perturbadora. Casas y algunos edificios, y luego el océano, grande y extenso, pero en ese océano hay pueblos y ciudades abandonados, borrados de la existencia gracias al océano.

Mi habitación estaba silenciosa, al igual que toda mi casa. Mi mamá se fue de viaje a la ciudad A21, y Natalia (la típica hermana gemela odiosa) estaba en un campamento con sus amigas, en algún bosque cercano de la ciudad. Estaba completamente solo. Mañana es el décimo aniversario de la "Salvación", aquella arma de doble filo, que salvo la tierra pero al mismo tiempo la dividió. Un gran rayo cayó y creo un gran estruendo.

-Gran momento para estar solo, Nathaniel- Me dije a mi mismo en voz baja, era alrededor del mediodía, pero aparentaba el cielo una hora antes de oscurecer. El aburrimiento me llevo a llamar amigos a mi casa, pero por las intensas lluvias ni Clarie ni Ryan podían venir, ya que Vivian en el centro de la ciudad, la única opción era Samantha, que vivía al final de la misma calle que la mía. "No puedo hacerla venir aquí" fue lo primero que pensé, así que yo fui a su casa, claro, antes tomando un paraguas.

Al llegar a su casa, su madre me recibió, me hizo pasar y fui con Samantha, le había mandado un mensaje diciéndole que veamos un maratón de películas de terror, ella estuvo de acuerdo.

-¡Nath!- dijo su aguda voz, ella era rubia, tenía unos ojos cafés muy claros, y era muy alta, tenía mi misma estatura, 1.82 m. Es de la poca gente que conozco desde antes de la "Salvación" , además de mi mamá, hermana y mi tío con su hijo.

-¡Sam!- le respondí, con un tono de voz exagerado, ella río.

-Iniciaremos con el amanecer de la muerte, seguido de la trilogía del peluche pirómano, y después cualquier película llena de sangre que encuentre- Me dijo mientras en su computadora buscaba las películas ya descargadas.

-Está bien, me quitare lo más tarde posible, estoy solo en casa y esta lluvia me está poniendo nervioso.

-Miedoso, hay, ¡una gota de lluvia!, te va a matar y sacar los ojos, Nath.- Dijo ella haciendo una voz en tono de burla.

-JAJAJA, ¡Que graciosa eres!- Dije de la manera más sarcástica y fingida posible.

-Amargado, bueno, ¡iniciemos en maratón!

***

Eran las 11 de la noche, la lluvia seguía después de tanto tiempo, y empeoro. Termino "El peluche pirómano 3: Caliente como el infierno", pero los dos seguíamos despiertos, Samantha decía que siguiéramos viendo películas, pero su mamá le dijo que ya era mucho por hoy. Me despedí de ella , y me interne a la lluvia para llegar a mi hogar.

Todo el camino estaba prácticamente inundado, la mayoría de las casas de la calle ya tenían sus luces apagadas, exceptuando unas dos. La única iluminación eran esas casas, los pocos faros de la calle, las estrellas y los edificios lejanos. Mi pantalón estaba ligeramente mojado por la lluvia, sin embargo chamarra con capucha estaban casi empapadas. Faltaban unas casas para llegar a mi hogar, cuando tengo un presentimiento raro, alguien me observaba, y no era un presentimiento normal, era un hecho. Al final de la calle había una silueta de un hombre parado, resguardado de la lluvia por un árbol. Tenía un maletín. Posiblemente estaba siendo paranoico, posiblemente estaba regresando del trabajo y cuando la lluvia empeoro, tomo la decisión de refugiarse en un árbol esperando que se mejore todo. Pero eran las 11 de la noche, muy sospechosos. Un cosquilleo paso por mi brazo derecho "Cálmate, estate tranquilo" me mentalice. Un auto paso al lado de mí, y este fue hasta la ubicación del hombre maletín, se estaciono, el hombre se subió y se fueron. "Todo era mi Paranoia" me dije mentalmente, y ahora estaba parado en plena lluvia, empapado aun con todo y paraguas.

Al llegar a mi casa lo primero que hice fue tomar una ducha, mi brazo seguía alterado por lo sucedido, y no tengo ganas de sentir dolor por un rato. Tanto físico como psicológico. No es tanto el dolor de la Anomalía, si no el hecho que me recuerda la triste realidad, el hecho que vivo en una ciudad Anormal con ciudadanos Anormales, que el resto del mundo nos teme y nos odia.

Después de la refrescante ducha, ya tenía puesta mi ropa para dormir, la lluvia trajo consigo mucho frío. Me estaba por acostar a dormir, estaba cerrando mi cortina cuando vi, a lo lejos, al otro lado de la calle al mismo señor que me veía en la calle, su cara no se lograba observar bien, y este acto seguido al percatarse que yo lo veía, se fue corriendo. Tenía miedo, pero yo se defenderme. Entonces solo me recosté en mi cama y cerré mis ojos sumiéndome en el sueño.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 30, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

AnormalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora