Ladrón de corazón

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Sasuke

Estaba de un humor extrañamente alegre esa tarde, así que me decidí por hacer algo lindo para la convivencia de equipo o esas tonterías para tener amigos

—Lo de bueno es que tengo experiencia en postres— hable sólo como si estuviera loco, pero no es que hubiera algo especial, sólo mi primo que al fin estaba conociendo a alguien y aunque quería ayudar al omega, sabia que este le llamo la atención a pesar de su naturaleza amable

Por que quien, en su sano juicio, ayuda a un chico que no se cuidó cuando tubo relaciones, muy fácil

Keiichi . . .

No es que me molestara, lo que si lo hizo, es que se llevaría al chico a la casa de al lado y no lo dejaría dormir en la casa principal con nosotros, no es que me agrade, pero tener a alguien con quien hablar además de mi hermano sería entretenido

Tenía las ollas fuera, las manos limpias y el delantal puesto, mi hermano acababa de salir y debía preparar algo especial para el regreso de ambos, nunca debo dejar mal a mi clan y eso incluye la hospitalidad

Pero mis planes de acabar a tiempo fueron estropeado cuando la ventana del segundo piso sonó

Corrí arriba con un kunai y papel bomba en mano por si era un ladrón, se escucho la ventana cerrar en mi habitación y entré allí mi sorpresa fue grande al ver a mi compañero ingresar

Se volteó a verme, pues el reflejo me delató
—jeje quería sorprenderte. . . . —

—valla sorpresa— parecía sarcasmo pero no lo era, el rubio me atacó con abrazos y besitos por todo el rostro y cuello, que me llegó a dar cosquillas y solté una pequeña risita

—que hace el chico más lindo de esta tierra sólo en su casa dattebayo?— dijo curioso, aunque si lo veías desde otro punto, se malinterpretaba mucho, me abrazó por la cintura y el tacto me puso nervioso

Por mero instinto rodee mis brazos en su cuello y me acerque más sin tocar sus labios
—Keiichi va a traer a un nuevo integrante a la casa— noté lo celoso que se puso en su olor que desgraciadamente no controlaba

—¿es alfa?— su voz era ronca y demandante, sexy en una palabra

—no— respondí en seco, su aroma me abrumaba y no quería que dejara huella en mi habitación

—está bien— sonrió de nuevo y alegre, me solté del abrazó y me dispuse a bajar pero me detuvo de la muñeca
—teme, quédate un rato, no seas aburrido-ttebayo— me solté bruscamente

—tengo visita y viene a cenar, debo cocinar— seguí hasta abajo por las escaleras, y tiré el kunai al diana colgada en el muro, casi le di a Naruto

—tratas de matarme?— hizo un puchero que me causó cierta ternura pero seguí a la cocina donde después de ordenar mis ollas empecé a cocinar un pastel de mantequilla

Naruto sólo se sentó en la mesada mientras me mantenía concentrado en cocinar

Sushi (un clásico), onigiri, sopa de tomate, Tempura, Okonomiyaki dangos (me causó mucha nostalgia) dulces de arroz y para coronar la noche, pastel de mantequilla

Iba a terminar la masa del pastel, ya que era lo último que me faltaba y una vez la masa en el molde me dispuse a llevarla al horno pero al voltear me encontré con sus ojos demasiado cerca y el repentino beso en la nariz que me ruborizó


—nunca te había visto tan concentrado-ttebayo— se hizo a un lado para que pudiera caminar pero al cerrar el horno me tomo de la cintura para voltearme y quedar frente a él
Me subió a la mesa con una sonrisa pícara y me beso
Un beso profundo, dulce y prolongado nos separamos después de unos minutos por aire

Mensajes de Amor (ʃ♡ƪ) narusasuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora