Eren Sayajin: La Furia

Parte 8: Titán Armadura, La Verdad

-en otro lugar camino a Shiganshina-

*TULUMTULUMTULUM...* -Un carruaje estaba descendiendo por una montaña rápidamente mientras era tirado por sus caballos.

???:... (Todavía me falta mucho para llegar a Shiganshina... ¡debo darme prisa! ¡Tengo que llegar a casa lo más pronto posible!... espero que aun no sea tarde... Eren, Carla, allá voy... ) -decía él conductor del carruaje, el cual era el doctor Grisha, iba a toda velocidad rumbo a Shiganshina. Tal y como se veía que estaba enterado de lo que pasó y sin dar rodeo se dirigió a su hogar para ver si su familia se encontraba bien.

-mientras tanto en Shiganshina-

...

???:... (debo ir rápido, tengo que llevarlos a los barcos antes de que algo más suceda...) -decía Hannes mientras llevaba a Eren y a Mikasa en sus brazos...

Después de ese horroroso hecho que presenciaron los pequeños, Hannes siguiendo con lo planeado se llevó al pequeño ojiverde y a la azabache al centro de evacuación.

*PAM*...

Hannes: *¡au!*...

Eren:... *PAM*... ¿¡por qué dejaste morir a mi mamá!?... *PAM*... ¡Dejaste que mi mamá muriera!... -decía mientras lo golpeaba.

Hannes: ¡ya basta!...

...*TAPLUM*

Mikasa: ¡Eren!... -expresó al ver que lo había tirado al suelo, próximamente fue a verlo y el pequeño reclamó...

Eren: ¡pudimos haberla salvado!... ¡pudiste haber acabado con ese titán, Hannes!... -en coraje

Hannes:...

Eren: ¡tú me dijiste que los enfrentabas! ¡tu me dijiste que peleabas contra los titanes! ¡¿Por qué no hiciste nada?!... -lanzó un golpe...

*TAG*...

Pero el soldado lo detuvo...

Hannes:... lo lamento, Eren. No pude enfrentar a ese titán porque ¡no tuve el valor suficiente!

Eren:...

Mikasa:...

Hannes: te mentí, todo este tiempo te he mentido... yo no peleo contra los titanes ¡nunca lo hice! Jamás tuve la capacidad de plantarles cara y pelear como los demás, ¡es que es imposible! ¡y mira a tu alrededor!... Todo está hecho ruinas, pensé que esto no pasaría... pero no... Es que solo mírame... Bebo en mis tiempos de descanso, juego cartas... Soy un desperdicio, ¡un inútil que no sirve para nada! ¡ni siquiera para intentar desenvainar mi espada!... Perdón... Perdónenme... por favor... les suplico que me perdonen... -entre lágrimas de frustración y miedo.