ORQUÍDEAS-MINSUNG

04

Minho observo a Jisung a lo lejos, rápidamente se acercó a él como si se tratará de un cachorro feliz por ver a su dueño, al Dr.Lee le emocionaba cuando sus pacientes aceptaban las quimioterapias y después lograban vencer las enfermedades.

-Muy buenos días señor Han, ¿Ya lo pensó bien?

Han lo miro triste y negó -Prefiero no hacer la quimioterapia, lo siento Dr.Lee

Debía respetar la decisión de su paciente pero el dolor en el pecho no se lo permitió, cogió a Jisung de la mano y lo llevo a su oficina.

Jisung miro sorprendido al doctor, eso no se veía tan profesional de su parte, tenía que respetar su decisión.

Minho le entrego una maceta con hermosas orquídeas -Encuentra un nuevo motivo en tu vida y vive por favor...

Estaba muy sorprendido -No soy muy bueno cuidando orquídeas, podrían morir y son muy bonitas para hacerlo.

Lee se acercó al castaño lo suficiente como para decir que se besarían -Tu eres como las orquídeas, eres muy bonito para morir.

Jisung sollozó -Lo siento doctor Lee...

El mayor lo tomo de los hombros -Piensalo más por favor, se que algo puedo hacer para que cambies de opinión- llevo sus manos hacia las mejillas de Han y limpio las lágrimas, de nuevo ese dolor en su pecho, Minho no entendía.

Jisung asintió -De acuerdo- sonrió débil -Regresaré mañana.

-¿Quieres que te lleve a casa?

Han negó rápidamente, no quería tener problemas con Hyunjin -N-no, iré solo.

No le gustaba ver a Jisung de esa manera, se veía tan débil que quería protegerlo, ese dolor en su pecho se hacía cada vez más fuerte pero no entendía el por qué, Han Jisung solo era su paciente.

Jisung salió nuevamente del hospital, el frío nuevamente lo azotó -Debí haber traído mi bufanda- miro hacia sus manos y observo las macetas -El Doctor Lee es muy cálido y es una gran persona.

El claxon de un auto sonó al lado de el, se asusto un poquito, miro al auto deportivo de color negro y después al Dr.Lee bajar de el -Jisung, hay demasiado frío. Por favor sube.

Han no quería tener problemas pero tal vez Hyunjin seguía sin llegar a casa, de todos modos Minho solo era un doctor -De acuerdo Doctor Lee.

Minho negó mientras tomaba la maceta en sus manos -Termine mi turno, por favor solo llámame por mi nombre- se acercaron al auto y el mayor le abrió la puerta -Entra por favor.

Ambos se encontraban en el auto, Minho conducía con mucho cuidado -Jisung, en la guantera hay una bolsa, tomala y abrela.

El castaño hizo caso omiso, cuando abrió la bolsa pudo ver una bufanda con muchos gatitos tejidos -Es muy linda~

Minho lo miro atentamente mientras el semáforo se encontraba en rojo -Es para ti.

Jisung lo miro sorprendido -Señor Lee, pero-

-Ni una palabra más, solo úsala.

Han negó -No puedo aceptar esto, es muy linda y en esta tarjeta dice que es una edición limitada para usted- le enseño la tarjeta de LV -Es mucho.

-Entonces solo úsala por ahora, después me la regresas- dirigió su vista al frente y siguió conduciendo.

Han sonrió y se colocó la bufanda, era muy suave y cálida -Muchas gracias señor Lee.

-No agradezcas, es lo menos que puedo hacer por ti.

Jisung sonrió, el señor Lee era una gran persona que realmente merecía lo mejor del mundo, observo por la ventana pero está vez no estaba lloviendo, el cielo se veía muy bonito.

Por otro lado Minho seguía sintiendo ese dolor en su pecho, sus orejas se encontraban tan rojizas que solo esperaba que Jisung no se diera cuenta de ello.

Jisung bajo del auto e hizo una leve reverencia -Muchas gracias señor Lee, le llevaré su bufanda mañana.

Minho asintió -Recuerda tomar tus pastillas, come e hidratate- sonrió -Descana Jisung.

Han asintió y cerro la puerta del auto, observo como el auto desaparecia de su vista -Es amable- dio la vuelta y subió a su departamento, abrió la puerta y colocó la maceta sobre el gran ventanal -Te ves muy bonita aquí, haré lo posible para mantenerte con vida.