De mafioso a mi esposo [Misho Amoli y tú] FANFIC

1.El encuentro.

Esta noche actuaba un viejo amigo que había empezado a triunfar en la música hacía poco, en el club nocturno en el que trabajaba de segurata. Mi trabajo era controlar los accesos al club y evitar posibles peleas o problemas legales.

Esta semana no tenía el turno de noche pero al hacerme el jefe un favor y dejar actuar a mi viejo amigo me sentía en deuda y no podía decirle que no cuando me dijo de hacer horas extras.

La hora de la actuación cada vez se acercaba más y el ambiente empezaba a descontrolarse un poco, desgraciadamente, era la única controlando los accesos por falta de personal, así que me tocaba tragar y seguir para delante. Pero pronto se me acabó la paciencia...

Un grupo de hombres con muy malas formas y de paso muy malas pintas, empezaron a acosar a unas fans de Kovo (El cantante de esta noche). Me dispuse a parar la situación rápidamente.

T/N(Tu nombre): Perdonen caballeros, ¿Vienen por el cantante?, porque siento informarles que las sustancias que están consumiendo (porros aparentemente) no están permitidos dentro de este local.

Desconocido: Señorita esto es solo tabaco de liar, ¿O es que no nos va a dejar entrar por ser extranjeros?

T/N: Ese no es un motivo para no dejarles entrar. Si me dejan revisar su bolso y no llevan sustancias ilegales les dejaré entrar de inmediato caballeros.

El grupo de jóvenes superiores a mi en edad por unos 5-10 años, con sus cuerpos llenos de tatuajes y con su cigarro en la mano empezaron a poner mala cara al ver que la jugada del racismo no les era efectiva.

De pronto, entre la multitud, apareció un chico de pelo castaño, ojos azules, cuerpo tatuado, de dos metros prácticamente, con ropajes que rozaban lo extravagante y se plantó frente a mi.

Desconocido: Ey Misho, menos mal que has llegado, esta zorra no nos deja entrar.- Dijo refiriéndose claramente al maleante que tenía frente a mi. Él, mientras tanto, no apartó la mirada de mi.-

Notaba a mi alrededor que la gente se empezaba a impacientar al acercarse la hora de la actuación y que la cola no avanzara por culpa de esos sujetos.

Misho: ¿Es eso verdad señorita?- Dijo muy cerca de mi, levantando ligeramente una ceja y una sonrisa pícara.-

Si este se cree que me voy a volver tonta por ver una cara bonita lo lleva claro...-Pensé ya frustrada por no resolver el problema rápidamente.-

T/N: Caballero... -Hice una breve pausa para mostrarme más seria.- Le he dicho a sus amigos que pueden pasar si veo sus bolsos y no encuentro ninguna sustancia ilegal. Y por favor...-Dije levantando la defensa (o también llamada porra) y colocando la punta en su pecho forzando un distanciamiento.-...no invada mi espacio personal. -Bajé de nuevo la defensa-

Misho instantáneamente me mandó una mirada desafiante y mordió su labio inferior como símbolo de frustración.

Misho: Venga chicos, no tenemos nada que ocultar...-Dijo sonriendo maliciosamente.- Haced lo que pide.

Revisé sus bolsos y solo encontré tabaco.

T/N: Bien pueden pasar.

Misho intentó entrar con ellos disimuladamente. Lo tiré del brazo ligeramente para impedir su avance.

T/N: Perdone...-Me interrumpió.-

Misho: Misho, llámame Misho señorita.-Dijo con una sonrisa amigable en sus labios extendiéndome su mano.-

T/N: Bueno, Misho, necesito ver su bolso también.-Dije ignorando su petición de apretón de manos, extendiendo la mía para que me pasara su bolso.-

Misho: Pues mire, la verdad es que ilegal solo tengo esto.-Metió una mano en su bolso y la extendió para darme algo, pero justo cuando creía que me iba a dar algo giró mi mano y la besó.-

T/N: Ni se te ocurra volver a hacer eso.-Dije mandándole la peor mirada asesina que he lanzado en mi vida.-

Misho: Vale, vale tranquila, era broma, no me pegues, mira.-Dijo abriendo su bolso y enseñando lo que contenía en su interior.-

De pronto la gente a nuestro alrededor empezó a alterarse y gritar, fui empujada hacia Misho.

Y de pronto lo vi, Kovo acababa de llegar y se disponía a entrar.

Me recompuse como pude con ayuda de Misho y saludé de lejos a Kovo mientras se acercaba.

T/N: Como la líes te hecho enseguida, que te enteres.-Le dije en voz baja a Misho mientras se acercaba Kovo.-

Kovo: Hey T/N-Dijo dándome un apretón de manos sonriente.- ¿Cómo estás bien? Nena muchas gracias por conseguir que actúe aquí, de verdad que me encantaría agradecértelo, avísame cuando acabes el turno y...-Fue interrumpido por Misho.-

Misho puso su mano sobre el hombro de Kovo.

Misho: Hey Kevin, ¿Y a mi no me dices nada?-Dijo sonriente.-

Espera, ¿Kevin? Como sabía su nombre real y no usaba el artístico, ¿se conocían?

[Breve inciso: Conocí a Kevin en las clases de vigilante de seguridad, y aunque él no llegó a sacarse el curso, desde que supe que se dedicaba a la música lo apoyé en todo momento. Sobre todo porque su estilo me gustaba, pero también porque él me gustaba. Teníamos la misma edad (25 años). ]

Misho acababa de interrumpir a Kevin, evitando que él probablemente me pidiera una cita, cosa que llevaba esperando desde que me empezó a gustar. Cada vez le estaba cogiendo más manía a ese puñetero Misho.

Kovo: Hey Mihail colega, cuanto tiempo...-Dijo dándole un abrazo claramente muy contento de verlo.- No sabía que venías tio.

Misho: Si bueno... iba a ser sorpresa pero...-Dijo mirándome de reojo insinuando que acababa de estropearlo.- ...da lo mismo, vamos para dentro venga.-Dijo sonriente rodeándolo con el brazo por los hombros.-

T/N: Venga pasad que las fans ya están impacientes chicos...-Dije por fin agotada.-

Misho: Espera, ¿a él no lo vas a revisar?, pero míralo si está tatuado y encima con el pelo rapado tiene peor pinta aún que yo.-Dijo señalándolo riéndose.-

Le hice un gesto a Misho de que guardara silencio y los eché sacudiendo la mano para que entraran ya de una vez al local.

Misho: Vale, vale T/N, me acordaré de esto.-Dijo riéndose mientras entraba junto a Kovo por fin al local.-

Dos horas después de la actuación de Kovo, le pedí a mi compañero que me cambiara de lugar para poder estar yo vigilando dentro y verlo un poco. Al poco de entrar lo vi sentado en una mesa riendo fuerte y jugando al póker junto a Misho.

Me gustaba verle feliz, pero estaba trabajando así que me tenía que centrar. Justo cuando me disponía a apartar la vista de Kevin noté un movimiento sospechoso por debajo de la mesa.

Misho le pasó a Kevin lo que parecía ser droga. Un acto completamente ilegal, que debía impedir. Pero, eso afectaba a Kevin y no quería dañar su imagen...Desgraciado Misho en qué momento lo dejé entrar...

De pronto, fui salvada de aquel dilema. Mi compañero que se encontraba fuera acababa de pedir refuerzos y debía moverme para ayudarlo.

...

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