Pido mucho perdón por no actualizar, literal perdí las ganas. Sin embargo, sé lo que se siente que te dejen en la duda así que iré poco a poco actualizando
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Ya eran las 11 de la mañana, el calor junto con el sol ya era motivo suficiente para despertarse, pero al menos uno de ellos no quería hacerlo. Germán se quedó en un lado de la cama abrazado al otro, con algo de miedo de lo que podría suceder. Él entendía muy bien la situación que él mismo causó, sus sentimientos estaban hechos en un revoltijo en su estómago mientras la preocupación de que va a pasar cuando saliera de ese apartamento se le vendría encima.
Cerró los ojos con fuerza para fingir su siesta por unos minutos, de todas formas, él otro ya había despertado. Con algo de flojera, Dalas se estiró para recobrar las fuerzas, giró su mirada alrededor del lugar hasta dar con la persona de cabello oscuro pintado a su lado. Sonrió y acarició su cabello al pensar que seguía dormido, un pequeño de suspiro de satisfacción fue suficiente para salir de la cama y bañarse.
Germán abrió un ojo para ver que había despertado también, solo ve el cuerpo de su amante vistiéndose con tranquilidad. Se puso nervioso por la vista que estaba contemplando, se tapó con la sábana con fuerza por algo de nervios con su corazón acelerado, que Dalas notó al instante.
─Hey, veo que ya estás despierto ─dijo con su acento español y una sonrisa─ me alegra
Germán no contestó y se había alterado, ya lo había descubierto.
Dalas levantó la sábana para ver el rostro del otro, que había sacado un pequeño chillido de susto al verlo.
─¿Qué? ¿No querías verme? ─Se burló dando una pequeña risa después.
─No es eso... ─Suspiró. Se sentó con tranquilidad en la orilla de la cama mientras Dalas se sentó al lado─ supongo que esto fue demasiado.
─¿Demasiado? ─preguntó con una sonrisa traviesa─. Pues no pareció en la noche.
Se rió de nuevo y se acercó adelante de su amante. Germán se le quedó viendo mientras lo veía, sus sentimientos seguían confundidos, pero, no negaba las ganas de besarle de nuevo.Dalas se movió un poco más, yendo directamente al mentón del de pelo marrón, fue a su boca, con un suave beso satisfactorio a la vez que agarraba sus mejillas. A pesar de todo la tensión de ayer, la habitación estaba sintiéndose tranquilo y cálido.
Germán se alejó al momento algo impresionado, pero no enojado; todo eso que ha pasado solo le dejó una fuerte confusión.
─Espera ─reclamó poniendo sus manos en su pecho─ esto sigue estando mal.
─Si esto estuviera mal ¿por qué te está gustando? ─dijo Dalas al sonreír. Germán se le quedó viendo, entre ganas de seguir en este juego o frustrarse estaba en su mente─. Al menos déjame disfrutar un momento esto y que después sigas con tu vida aburrida con tu novia.
─Podrá ser aburrida, pero amo a mí novia.
─No pareciera, porque sigues tocando mi pecho.
Germán quitó las manos de inmediato mientras el otro reía. Con todo esto y se iba a volver loco.
─No sé que me pasa ─dijo frustrado, puso sus manos en la cabeza pensando alguna solución a todo esto.
─Te pasa lo mismo que a mí ─se acercó y tumbó al otro a la cama para sentarse sobre él. Se sentó en su entrepierna mientras sonreía al susurrarle al oído─. Es la misma la razón por la que me buscas siempre. Me necesitas~.
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De funarlo a sentirme atraído. Dalas x Germán (LES JURO QUE ES MAME)
HumorDalas era un omega muy problemático: sus días se pasaban en humillar y quejarse de otros creadores de contenido. Sin embargo, meterse con uno de los influencers más grandes del habla hispana le hizo dar un giro en sus deseos, no especialmente como p...