𝐃𝐀𝐌𝐄 ✦ ( soulé x véliz )

O2 . 𝗁𝗈𝗐 𝗐𝗈𝗎𝗅𝖽 𝗂𝗍 𝖻𝖾

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en la soledad de la habitación numero 56 de el hotel donde se hospedaba la selección sub-20 de argentina lo único que se podia escuchar eran los jadeos y suspiros que venian del interior del baño.

quien se encontraba era nadie mas que el chico portador del dorsal número 11, matías soulé.

su compañero de habitación, alejo véliz, habia salido junto a valentín y luka a la habitación del colorado, asi que soulé aprovecho el tiempo a solas que tenía.

él estaba sentado en la ducha, su espalda completamente recargada en los azulejos de la pared, sus piernas separadas y sus ojitos cerrados mientras una de sus manos estaba en su parte trasera, con dos dedos dentro de él.

intentaba mantenerse lo más callado posible (aunque realmente no funcionaban muy bien sus intentos), no quería que alguien entrara a la habitación y terminara por encontrarlo, ya fuera alejo u otro compañero de la selección.

de repente penso en alejo y la velocidad de sus dedos aumento, empezando también a abrirlos en forma de tijera, pensó que tal vez le gustaría que véliz lo viera en ese estado, la idea lo ponia aún más exitado.

su mente siguió divagando mientras el seguía con el ritmo constante, su compañero de habitación no salía de su mente, lo que lo llevo a detenerse abruptamente cuando imaginó como sería si fuera alejo quién estaba dentro de él y el nombre de véliz salió de sus labios en un gemido agudo.

se levantó con rapidez dejando todo lo que estaba haciendo y abrio la llave de agua fría, dejando que la temperatura lo ayudara a calmarse.

no era la primera vez que pensaba en alejo como algo que más que un simple compañero, pero si la primera vez que lo hacía mientras se masturbaba.

eso lo había asustado.

en cuanto el agua dejo de salir y el silencio reino en la habitación, matías juro haber escuchado la puerta de la habitación cerrarse, pero descartó la idea rápidamente, no quería ni pensar que alguien estuvo adentro.

salio del baño con una toalla amarrada a su cintura, agradecía que no había rastro de que alejo hubiera estado ahí, habria sido realmente vergonzoso si el menor se aparecía en la habitación.

se vistió y con otra toalla seco su cabello antes de salir en dirección al comedor, donde todos se reunirían a cenar como todos los días.

se sentó en la mesa donde se encontraban giay, barco, romero y véliz, intentando ignorar el calor que subio a sus mejillas saludo a todos, dedicandoles una sonrisa pero sin verlos directamente, a los chicos les pareció un poco extraño, pero no dijeron nada, matías siempre era extraño.

estaba perdido en sus pensamientos, el perfume de alejo no dejaba que se concentrara en lo que le decía giay.

── mati, mati── agustín tenía una mueca preocupada en el rostro, había intentado incluir a matías en la conversación que estaban teniendo, pero el de piel blanquecina parecia estar en otro mundo.

su mirada estaba perdida hasta que el vaso de agua que luka le lanzó lo regreso a la realidad.

── ¿qué te pasa, imbécil?

la risas de barco y romero hizo que matías los mirara mal mientras aceptaba la servilleta que alejo le pasaba, sintiendo sus mejillas encenderse cuando la mano del menor rozó la suya.

── gracias...── susurró y alejo le sonrió.

── ¿todo bien, mati? te ves un poco distraído ── le dijo agustín, y matías pensó que era realmente tierno que se preocupara tanto por él, definitivamente era un buen capitán.

── si si, todo bien, tranqui agus── respondió rápidamente.

giay no se veia muy convencido con la respuesta del pelinegro, pero simplemente asintió y se acomodó de nuevo en su lugar, siguiendo la conversación a la vez que recargaba su cabeza en el hombro de valentín, quien se acomodo mejor para que el castaño estuviera cómodo.

pasaron los minutos y mientras todos escuchaban atentamente lo que luka decía, matías sintió como la mano de alejo tomaba la suya y la llevaba debajo de la mesa, donde entrelazó sus dedos, sin decir nada, ni siquiera lo miraba.

soulé estaba mas confundido que nunca, pero intento disimularlo y siguió hablando como si nada.

casi dos horas después todos empezaron a retirarse, el primero en levantarse de la mesa fue agustín, que empezaba a sentir el cansancio del dia lleno de entrenamiento que tuvieron, se despidió de los chicos y valentín se levantó detrás de él, tomando su mano y dejando un beso en su mejilla mientras empezaban a caminar.

soulé se quedó viéndolos hasta que sintió un apretón en su mano, lo que lo hizo llevar la mirada a alejo, dandose cuenta de que eran los únicos en la mesa ahora, ni siquiera notó cuando luka se fue.

── ¿vamos?

solo atinó a asentir varias veces y se levantó aún tomando la mano de véliz, se despidieron de los pocos chicos que aún estaban ahí y tomaron rumbo a su habitación.

en todo el camino matías parecía estar perdido de nuevo, lo único en lo que podía pensar era en como véliz acariciaba el dorso de la mano con su dedo pulgar.

entraron a la habitación y a matías no le dió tiempo de nada, pues alejo lo empujó contra la puerta, haciendo que golpeara su cabeza, pero poco le importo cuando los labios del menor se estrellaron con los suyos en un beso poco tranquilo.

el pelinegro jadeo cuando alejo mordió con fuerza su labio inferior, haciendo que sangrara un poco y que el sabor metálico estuviera presente en el beso.

véliz fue el que se separó y acaricio la mejilla de soulé antes de acercarse a su oido y susurrar.

── te escuché ── matías simplemente se quedó callado, alejo no lo veía, pero sabía que frunció el ceño, así que se sintió con la necesidad de aclararlo── en el baño

── y-yo

véliz lo interrumpió cuando dejo un beso en su cuello que lo hizo estremecer.── eres bastante ruidoso.

fue lo último que dijo antes de dirigirse al baño y cerrar la puerta, dejando a matías con los labios hinchados, dolor por el reciente golpe y un montón de preguntas en su cabeza.

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