Nadie tiene porque saberlo.
Este es solo nuestro secreto.
Un secreto que esconde el paraíso y el infierno.
Estamos enfermos.
Pero no importa.
Porque ese es nuestro secreto.
------Nadie tiene que saber lo que pasa entre tú y yo..
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Han se encontraba ansioso, era su primer día de secundaria, no sabía bien como actuar, todos sus amigos habían quedado en otro salón, y el jamás había sido sociable, por lo que no tenía idea de cómo haría amigos.
Descuida Jisung, verás que pronto tendrás un nuevo mejor amigo y todoirábien.
Trataba de pensar Han, no quería ser pesimista.
Después de 6 años en los cuales fue víctima de bullyng, sentía que está era una nueva oportunidad de iniciar de 0.
Sin dolor, sin humillaciones.
Las cosas irían bien, ¿no?
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Al llegar a la secundaria, el pelinegro se despidió de sus padres. Bajo y se sorprendió al ver que aquí los alumnos hacían una fila para poder entrar, en dicha fila empezó a hablar con un chico, el cual le agrado bastante, pero al llegar a la puerta se dieron cuenta de que eran de grupos diferentes.
Han estaba en el A, y este chico en el D. Por lo que se separaron.
Jisung suspiró antes de ir con su grupo.
Se formó en la fila indicada y estuvo esperando, se balanceaba sobre sus pies y miraba a todos lados.
En eso, miró hacia enfrente, y su cuerpo se tenso al reconocer a cierto chico castaño.
Hwang Hyunjin.
Habían estado en la primaria, pero en distintos salones, sin embargo, sabía que el chico era un creído y egocéntrico, lo que hacía que le desagradara.
Rezo internamente por qué Hyunjin no estuviera en su salón, pero para su mala suerte, así fue. A demás de que detrás de él venía otra chico, al cual jamas había visto.
Rodó los ojos al darse cuenta de que estarían en la misma aula. Estuvo parado esperando a que alguien les dijera que hacer, pues todos eran nuevos.
Después de un rato finalmente llego un maestro, el cual se presentó como nuestro asesor. El hombre nos guió a nuestro salón, en el cual estaríamos este primer año de secundaria.
