El sol se ocultaba tras el horizonte, pintando el cielo de tonos dorados y naranjas sobre la isla donde Ace y Luffy se encontraban. Los hermanos estaban de pie junto a la orilla, mirando el vasto océano con una mezcla de emoción y ansiedad.
Ace rompió el silencio. -Dentro de cinco años, navegaremos juntos hacia el Gran Line, como lo prometimos. ¿Están listos?-
Luffy, con chispa en sus ojos, asintió enérgicamente. -¡Claro que sí! ¡Va a ser genial!-
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Sabo, sin embargo, se encontraba lejos de allí, en una guarida oculta junto a Dragon. Su mirada estaba perdida, sin reconocer el paisaje familiar.
Dragon observó a Sabo con preocupación. -Sabo, ¿cómo te sientes hoy?-
Sabo parpadeó, confundido. -¿Quién eres tú? ¿Dónde estoy?-
El rostro de Dragon se llenó de pesar. -Soy Dragon, y estás a salvo aquí. Te encontré y te cuidé cuando estabas herido. Pero parece que has perdido la memoria.-
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Dentro de la guarida, Sabo entrenaba diligentemente, aunque su mente estaba nublada por las sombras de un pasado olvidado.
Koala, una joven con determinación en los ojos, lo observaba con preocupación. "Sabo, no tienes que esforzarte tanto. Tu salud es lo primero."
Sabo asintió, una sombra de frustración en su rostro. -Lo sé, pero siento que hay algo importante que debo recordar.-
Koala le puso una mano en el hombro, reconfortante. -Confía en que las respuestas llegarán con el tiempo, Sabo.-
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Mientras tanto, en el bosque de Garp, Ace y Luffy se entregaban al entrenamiento con fervor, sin saber que su hermano mayor luchaba contra las sombras de su propia mente.
Garp los observaba con orgullo, pero no pudo evitar preocuparse por Sabo. Su ausencia pesaba en su corazón.
Ace lanzó un poderoso golpe, su determinación resplandeciendo. -¡Voy a ser el pirata más fuerte del mundo, abuelo!-
Luffy asintió con entusiasmo. -Y yo seré el Rey de los Piratas, lo prometo!-
Garp sonrió, aunque su mirada estaba cargada de preocupación. -Estoy seguro de que lo lograrán, chicos.-
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La noche envolvió la isla en su manto oscuro, y los dos hermanos se reunieron en la orilla una vez más.
Ace y Luffy intercambiaron miradas llenas de determinación. -Vamos a hacer esto, hermano,- afirmó Ace.
Luffy asintió, su confianza era inquebrantable. -¡Sí, vamos a surcar los mares juntos!-
Mientras el viento soplaba suave, como si susurrara palabras de aliento, un nuevo capítulo estaba por comenzar. Para Ace y Luffy, el futuro era una promesa de aventuras. Para Sabo, era una búsqueda de respuestas en las sombras de su memoria perdida.
El viento nocturno susurraba secretos mientras los hermanos permanecían junto a la orilla, sus miradas fijas en el horizonte oscurecido.
Sabo, en la guarida junto a Dragon, miraba el cielo estrellado, una extraña sensación de pérdida nublando su mente. A pesar de su amnesia, sentía que algo crucial se le escapaba entre los dedos.
Dragon se acercó a él, un atisbo de determinación en sus ojos. -Sabo, no importa lo que hayas olvidado. Lo que importa es el camino que elijas a partir de ahora.-
Sabo asintió, agradecido por las palabras de Dragon, aunque seguía inquieto por las sombras que lo acosaban.
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Mientras tanto, en la guarida de Ace y Luffy, los hermanos discutían sus planes futuros. Ace miró a Luffy con determinación. -Luffy, tenemos que estar preparados para cualquier cosa que encontremos en el Gran Line.-
Luffy asintió, su rostro lleno de entusiasmo. -¡Claro, Ace! ¡Vamos a ser los piratas más geniales de todos!-
Mientras hablaban, una corriente de viento traía consigo el eco de las risas de su niñez, un recuerdo lejano de tiempos más simples.
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El tiempo pasó rápidamente y los cinco años se acercaban a su fin. Ace y Luffy se encontraban en su barco, con la determinación brillando en sus ojos.
Garp se les unió, orgulloso pero con un matiz de tristeza. -Chicos, sé que están listos para enfrentar lo que sea que el mundo les presente.-
Ace asintió, mirando hacia el horizonte. -Gracias, Viejo. Prometo que mi recompensa será más alta que la de luffy -
Luffy sonrió, su espíritu indomable ardiendo. "¡Ya veremos ! Te superaré dentro de 3 años ya lo veras"
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Mientras tanto, en la guarida de Dragon, Sabo se encontraba de pie en la entrada, su mirada fija en el horizonte oscurecido.
Koala se acercó a él, su presencia fue reconfortante. -Sabo, recuerda que no estás solo. Estamos contigo, pase lo que pase.-
Sabo asintió, un fuego renovado ardiendo en su interior. -Gracias, Koala. No importa lo que haya olvidado, estoy listo para enfrentar el futuro.-
El viento sopló, como si llevara consigo un mensaje de aliento y apoyo. Para estos tres hermanos y sus destinos entrelazados, el amanecer de un nuevo capítulo estaba a punto de comenzar.
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Fin
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Aquí les traigo el siguiente capítulo espero que le guste y recuerden voten.La actitud de Garp será diferente después que se enteró que Sabo murió.
Bye.
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¤Mi Alma Gemela¤
FanfictionA los seis años la marca de tu alma gemela aparece en tu cuerpo. Llegado el momento, que no aparezca solo puede significar que esa persona aún no había obtenido la suya. Es muy raro que alguien no tenga una. Cuando las almas gemelas se encuentran, l...