Parte 1

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Estaba sentada en mi banco, aburrida, esperando que empezaran las clases.
Vino la preceptora y nos comunicó que dos profesores no habían asistido, y que tendríamos hora libre hasta las 11:25 am.
Me quería matar porque salí a los pedos para llegar temprano y rendir el examen.
No tenía nada que hacer, así que me apoyé en la pared y me dormí. Mi tiempo de paz habría durado treinta o cuarenta y cinco minutos, debido a que mi mejor amiga, que recién había llegado, puso música a no dar más.
Con los ojos aún cerrados le dije:

- La puta madre Jessica, bájale el volumen o ponte los auriculares.

Ella re alegre sabiendo que llego tarde para no rendir y resulta que no hay examen, además que puso su música a no dar más me contestó:

-Jois no seas tan amargada, aprovechemos que no hay examen, además hay mucho tiempo libre.

- ¿Pero no te da cosa que escuchen todos?

-Boluda, es música, a nadie le molesta. Si alguien dice algo cambio de tema o le bajo el volumen.

-Boluda yo te estoy diciendo que le bajes

-Si, lo sé, pero tú estás re matada.

- Bueno, nomás vine para rendir el examen, después pensar en ...

Se exaltó y se acercó más a mí.

- ¿Pensar en quién?

Yo avergonzada le dije:

-Nada, dejá

-No, ahora contás el chisme.

Estaba roja como tomate y pude observar como los demás nos veían.

- ¿Puedes correr un poco tu silla?, quiero ir al baño.

- Ok, pero cuando regreses me contás.

Corrió un poco su silla y pude pasar. Salí corriendo al baño.
Sabía que ahora tenía que dar varias explicaciones. Entré en desesperación, sabía que no podía mentirle. Comencé a dar vueltas dentro del baño. Dejé pasar unos minutos para que crea que si estuve.
Volví a mi curso, ella estaba ahí, sentada, jugando con el celular mientras seguía reproduciendo la música. Fui hacia ella, le toqué el hombro.

- ¿Puedes correrte otra vez?

Ella se movió, pasé por detrás y me senté. Me preguntó:

- ¿No te olvidas de algo?

- Mmm

- Dale

-Ok

- ¡Hay sí!

- ¿No pensaste en cómo te sentirías al estar en pareja?

- Lo dices por Leonel ¿Verdad?

- ¿Qué, cómo sabes eso?

- Boluda soy tu mejor amiga, acaso crees que no noto cómo lo miras

- ¿Tanto lo miro?

- Jajajaja no, dios debiste ver tu cara.

- La puta madre Jessi, ¿Entonces cómo lo sabes?

- Y bueno, es el único pibe que no paras hablar.

Quedé pensando y es verdad, Leo es el único pibe con el que hablo y de quien hablo enfrente de ella.
Nos quedamos mirándonos y le dije:

- Sí, es él

- Pero...

La interrumpí:

- Si, ya sé, él tiene muchas atrás, y sería una más de ellas.

Amor sin importar que Donde viven las historias. Descúbrelo ahora