Gay • Drabble •

563 78 4
                                    

—El otro día que fui a la tienda esa de juegos de rol, el cajero me dijo otaku—Comenta Stan mientras aporrea los botones de su mando de videojuegos—Y me sentí ofendido, ¿a poco tengo cara de otaku?

—Tienes cara de gay—Responde Kyle mientras también golpea consecutivamente su mando.

Ambos se encuentran en el sofá de la sala de estar en casa de lo Broflovski, con la mirada puesta sobre la televisión mientras juegan Call of Duty.

—Tú eres más gay que yo—Comenta Stan sin despegar los ojos de la pantalla.

—Pero yo no soy otaku.

—Yo tampoco.

—¿Entonces qué eres?—Pregunta el pelirrojo.

—Un gay.

—Ajá.

—Y tu novio.

—¿Y me amas?

—Pues sí.

Kyle pausa el juego y mira al pelinegro; Stan Marsh podrá ser un pendejo en toda regla, pero Dios, Kyle lo ama con todas sus fuerzas.

—Bésame pues—Expresa Kyle con una mirada seria. A lo que Stan sonríe con malicia.

—Sus deseos son órdenes—Responde Stan dejando el mando.

Stan acorrala a Kyle hasta el extremo del sofá para capturar sus labios en un beso fogoso. La respiración de Kyle se acelera pero corresponde el gesto de la misma intensidad que su novio.

Kyle podrá insultar a Stan todo lo que quiera, pero sus besos lo derriten desde adentro. Son su perdición, y adora que así sea.

Al separarse, Stan tiene esa mirada intensa, mientras que Kyle tiene la respiración agitada. El pelirrojo toma el mentón de Marsh, y sonríe cálidamente.

—Amo que seas mío—Comenta Kyle sin deshacer su sonrisa; nunca ha sido fan de ese tipo de comentarios posesivos, pero ahora mismo no tiene mucha sangre en el cerebro.

—Okey, gay—Responde Stan en un susurro antes de retomar el beso, abrazando a Kyle por la cintura para sentirlo más cerca.

El juego puesto en la pantalla podía esperar; ellos tienen su propio juego. Su juego favorito. Una en la que el perdedor disfruta más.

★ Style ZoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora