★ Style Zone

En la cama con la luna encendida (Oneshot)

Lo mejor de compartir habitación con tu mejor amigo de la universidad es poder follar tranquilo.

Y ya, ¿hay mejor razón que esa?

—No todo tiene que tratarse de tu pito, ¿sabes? —expresa Kyle, con el ceño fruncido mientras prepara su taza de café; parte de todas sus rutinas matutinas.

—No, porque también se trata del tuyo —responde Stan, mientras come su cereal y desplaza su feed de TikTok.

Kyle se limita a suspirar y se sienta al lado del pelinegro.

Sí, son amigos... amigos que, de vez en cuando, se empujan a la cama y reclaman sus labios en la oscuridad.

Amigos que se despojan de la ropa y se pierden en la piel del otro.

Amigos que, como ahora, se visten, desayunan y dejan que sea la alcoba la que almacene todos los recuerdos de anoche.

Ese es el amigo que, al menos, Kyle Broflovski ha comenzado a ver en Stan Marsh.

—Bueno, me voy —anuncia Stan, tras levantarse y dejar el plato de cereal en el lavaplatos—. Oye, después de las clases iré con unos amigos al billar.

—Claro.

—¿Quieres ir?

—No le caigo bien a tus amigos.

—Mentira, a ti no te caen bien —responde Stan, comprobando la hora en su móvil antes de dirigirse a la pequeña sala que compartían, donde su mochila descansaba sobre el sofá.

Kyle permanece en la cocina, bebiendo de su café mientras escucha cómo Stan se marcha por la puerta.

Hace dos meses todo era más simple.

Solo eran Kyle y Stan, dos amigos que compartían habitación, que discutían por la música, que se reían de cualquier tontería en la madrugada. Hasta que una fiesta —una estúpida fiesta— lo cambió todo.

Recuerdo la luz del pasillo parpadeando, el aliento a cerveza en su cuello, y sus dedos bajando torpes por mi espalda. Recuerdo que no pensé. Solo sentí. Como si todo en mí hubiera estado esperando ese momento, sin saberlo —piensa Kyle, mientras percibe el aroma del café.

Kyle no recuerda con exactitud quién fue el que tomó la iniciativa. Tal vez Stan, que entre besos susurró "Te he deseado tanto"; o tal vez él mismo, que aún recuerda la sensación de tener sus brazos en la cintura mientras decía al oído: "Vamos a tu habitación".

¿Importa realmente?

Nos acostamos, nos besamos, nos desnudamos...

Y desde entonces se volvió normal —o por lo menos eso les gustaba pensar— que, tras un silencio incómodo, uno de los dos apagara la luz y se acercara al otro sin decir nada.

Como anoche, cuando Kyle intentaba estudiar para los exámenes y Stan se acercó, susurrándole en el oído: "Préstame atención".

Y Kyle, como siempre, obedeció sin preguntar por qué.

Porque ya no sabía cómo ser un amigo para Stan; no sabía de qué otra manera verlo.

🌘 ︶︶︶︶︶︶︶︶ 🌒

Mientras Stan intentaba centrarse en sus clases de diseño gráfico, sus pensamientos terminaban orbitando hacia Kyle.

¿Por qué Kyle se rehúsa a pasar tiempo con él? Desde que comenzaron a... follar, eso era en lo que se había reducido su relación. ¿No se suponía que eran amigos?

¿Y si no somos amigos, qué mierda somos? —piensa Stan mientras escribe de manera distraída lo presentado en las diapositivas del profesor.

Lo más triste para Stan era que, desde hace tiempo, había anhelado probar los labios de Kyle, que fuera suyo, y que él le respondiera de la misma manera. Aquella fiesta le había otorgado eso y, hasta hace unos días, pensaba que había sido la mejor noche de su vida.