"'Llévala adentro! ¡Ahora!"
Dos enfermeras ayudaron a Minji a ponerse de pie mientras Hanni caminaba a su lado preocupada. Todavía se preguntaba por qué esta joven decidió tomar un trabajo tan arriesgado. No era justo, ella todavía era muy joven. Lo más sorprendente fue la tranquilidad con la que su guardaespaldas estaba tomando la situación. No mostró signos de dolor, su respiración era tranquila. Inhalando y exhalando metódicamente y rítmicamente.
Obviamente estaba muy bien entrenada para el trabajo, y Hanni agradeció en silencio la capacidad de la mujer para contener el pánico.
Se facilitó rápidamente una silla de ruedas, y tan pronto como Isabelle se sentó, la mujer se derrumbó y cayó inconsciente. Estaba perdiendo mucha sangre incluso cuando no lo demostró.
Hanni despejó el quirófano, Hyein afortunadamente estaba desocupada esa noche, y aunque no era el área de especialización de la mujer, Hanni confiaba más en ella para ayudarla que cualquier otra persona en este momento de pánico. Isabelle ya estaba acostada en la mesa de operaciones, Hyein estaba preparando los instrumentos quirúrgicos mientras Hanni examinaba a su paciente e intentaba abrir su camisa. Sus guantes azules se tiñeron de rojo tan pronto como tocaron la tela, maniobrando con los dedos para desabrocharla y la tela empapada no ayudó en absoluto, pero afortunadamente su enfoque fue más que suficiente para continuar. Finalmente abrió su camisa para revelar un sostén deportivo oscuro y un abdomen blanquecino.
Muy tonificado. Eso demostró la dedicación que puso en su trabajo y su salud. Hanni acarició suavemente las curvas en el núcleo tonificado de su guardaespaldas con las puntas de sus dedos... ¿Por qué lo encontró fascinante? Hanni negó con la cabeza. ¿Qué estaba pasando? Ella continuó desnudándola, con los ojos fijos en el sujetador deportivo de la mujer con un poco de escote. No tan fascinante como sus abdominales, pero aún así... Se sacudió todos esos extraños pensamientos de su cabeza de una vez por todas y finalmente despojó a Isabelle de la cintura para arriba. Todo lo que quedaba era quitarse los pantalones. Trabajo fácil.
"Hyein"
"¿Si?"
"... ¿Puedes ayudarme a desnudarla? Necesito preparar algunas cosas "
"¡Oh, por supuesto!"
No, ella no podía hacerlo. Ni siquiera podía pensar en eso. Hyein se apresuró a desvestirla, porque en un abrir y cerrar de ojos Minji estaba en ropa interior y la limpiaban con una gasa.
"¿Hanni? Listo."
Hanni fue a la mesa y bajó la lámpara para iluminar mejor a su paciente. Había una herida de bala en su abdomen donde estaba sangrando profusamente. La bala probablemente todavía estaría dentro, y la médico tomó unas pinzas para abrir aún más la herida e investigar a fondo. Efectivamente, la pieza de metal estaba incrustada superficialmente. Afortunadamente, el chaleco antibalas funcionó bastante bien. Lo que Hanni aún no podía explicar era por qué estaba sangrando tanto. Con las pinzas retiró el objeto y lo colocó en la bandeja de metal a su lado.
"Aquí está la bala. Déjame echar un vistazo dentro."
'Por favor, que sea algo muy leve... ' Tras una inspección más cercana, Hanni suspiro.
"Trauma vascular: el vaso lesionado es una vena. Bueno. No hay órganos perforados, desgarrados o cortados...Incluso mejor. Con su edad, puede lograrse sin más efectos. Ella va a estar bien."
Satisfecha, cerró la herida de bala con un par de puntos e inspeccionó las otras heridas superficiales que tenía. Dos balas rozaron su mejilla y el brazo que ella tomó para disparar al auto atacante. Pero eran solo eso, heridas leves. Hyein terminó de limpiarla antes de ser llevada a una habitación aislada por órdenes de Hanni. La mujer sufrió mucho, probablemente no lo demostró, pero ese tipo de herida duele bastante. Pero, sobre todo, esta chica, ésta linda alma, le salvó la vida, y Hanni le debía mucho.
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Bodyguard << bbangsaz >>
Fiksi PenggemarHanni Pham es una reconocida doctora, ganadora de dos premios Nobel de medicina y propietaria de varios procedimientos médicos, tratamientos y medicamentos patentados a la edad de 27 años. Cuando alguien envía a matarla, su esposo contrata a un guar...