Stella
Evan me invito unos mangos, no soy muy fan de ellos, pero, cuando era más pequeña, tal vez 3 o 4 años, mi abuela me compraba una bolsa de mangos jugosos y dulces, un día, la acompañe a comprar más mangos para una rica agua de estos, y de repente mi abuela se había caído, en ese momento temía a perderla, y así fue, así fue como mi vida se acabó, ella fue al hospital, y mis padres se hicieron cargo de mí, cosa que no querían, estaban muy ocupados con sus negocios millonarios, que ni siquiera les importaba si estaba bien, así fue por los siguientes 2 años, mi abuela estaba delicada y ya no podía cuidarme, pero la visitaba todos los días, entonces un día entre las discusiones de mis padres escuche que me llevarían a una escuela, eso me emocionaba, pues yo tenía un tutor privado, y era aburrido no convivir con nadie, entonces me preguntaron que si quería ir, emocionada me dijeron que sí, se lo mencionaron a mi tutor, y les recomendó "Sword & Cross" que era un internado religioso.
Así fue como me llevaron ahí, dijeron que me visitarian en las vacaciones, ya que sólo se podían ver a los menores en esas fechas. Y ahí fue, ahí fue como comenzó mi tortura.
2004
— ¡¡Stella!!, en vez de hacer esas tonterías deberías estudiar el versículo de hoy, eres una mocosa malcriada, pero ya veras como se te va a quitar.
— ¡Nooo!, sólo estaba tejiendo.
— Silencio, estas perdiendo el tiempo como siempre — mencionó la hermana, no sé si fue molesta, o así es. — vamos a ver si vuelves a perder el tiempo — me tomó bruscamente de mi brazo y me llevo al cuarto se los castigos, un cuarto donde abundaba la oscuridad y había una pequeña cama y un vaso de agua, normalmente iba ahí diario, así que, ya no me daba miedo.
Año actual 2015
Llegron las 7 de la tarde y fui al comedor escuchando una de mis canciones favoritas Waiting For Love. Esa canción era un vicio para mí. Vi a Evan sentado leyendo un libro.
— ¡Evan!. — grite su nombre lo que hizo llamar su atención.
— No grite.— corrí hacia él y lo primero que vi fue que no había mangos, ¿¡me había engaño!?
— ¿Dónde están los mangos?
— En la cocina. — menciono cerrando su libro y poniendolo a un lado.— Antes de ir por los mangos me gustaría preguntarle algo, tome asiento.— lo mire extrañada y tome asiento.— ¿Qué es lo que tramas y por qué me hablaste?. ¿A casó crees que no me he dado cuenta que buscas algo?, tu reputación es una basura, imagina todo lo que la gente piensa cuando te les acercas Stella. Dime, ¿piensas que todos te hablaran soló porque eres bonita?, pues fijate que no. —sus facciones faciales parecían de fastidio y se veia molesto, como si haberle hablado hubiera sido mala idea, y realmente no me sorprende, todos me dicen algo similar.
— Lo siento mucho Evan, no fue mi intención, soló quería hacer una amistad contigo, pero, si no estas de acuerdo respetaré tu decisión, buenas noches — me despedí y me retire del comedor.
Evan
Fui un poco grosero tras decirle a Stella aquellas cosas que pudieron o más bien que ofendieron y lastimaron a Stella, pero, no iba a dejar que mi reputación se viera afectada por salir con ella, aparte, sólo tendría problemas.
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No Eres Para Mí
Teen FictionA veces creemos que nuestros hogares son un fastidio, sobrevaloramos la atención de nuestros padres, pero, ¿por qué muchos quisieran regresar a un hogar? Stella y Evan, dos jóvenes que intentan sobrevivir a una escuela, o más bien, una prisión para...