/-Th3 ViLlAn@ BaSuRa/-

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Episodio 85

"Entonces, ¿qué está pasando contigo y tu exmarido?"

"... ... Me pregunto porque."

Un tono ligeramente agudo salió sin que me diera cuenta. Es cierto que después de pasar por esto y aquello y mejorar un poco entre gruñidos, no es que estemos lo suficientemente cerca como para compartir una pequeña charla como esa.

"¿Puedo preguntar? Abundan los rumores, pero quiero escuchar la historia exacta de la persona en cuestión".

Respondió con una voz algo intimidada. Era algo con lo que podía simpatizar un poco, habiendo aprendido cuánto le gusta a Lucan la exageración en la última oportunidad.

Creo que es mejor que me preguntes directamente.

"No sé, yo también. Es mi matrimonio, Su Majestad decidirá por sí mismo".

"... ... ¿Que te gustaría hacer?"

Me vino a la mente una voz que susurraba suavemente, como si confesara una promesa de mucho tiempo.

"Definitivamente te veré antes de la primavera".

'Y luego, te propondré de nuevo.'

que volvería a proponer.

Una risa sangrienta se filtró.

La primera propuesta de matrimonio estaba en una forma que no podía estar más distorsionada que eso. Debido al chantaje de Lee Ho, las dos personas, que se habían vuelto como vidrios rotos, no se vieron ni siquiera cuando intercambiaron cartas de matrimonio.

Una propuesta desolada sin una sola palabra romántica o confesión de amor. La única vez que lo volví a ver fue en una boda donde nadie se reía.

Tal vez quería compensarlos a todos. Como dijo el emperador, valió la pena discutir una propuesta de matrimonio en una relación en la que solo se podían romper los papeles del divorcio.

Pero fue demasiado para mí.

"No tengo intención de volver a casarme. Incluso si no es Evandel Listin".

"... ... ¿qué?"

"Alguien está tratando de arruinar tu vida otra vez".

Han So-yi no era casadera.

Porque en algún momento me di cuenta. Que la Torre Inclinada no tiene más remedio que colapsar al final.

Por supuesto, el emperador no me permitiría vivir sin matrimonio. Pero en realidad no importaba. Si no es alguien que se preocupa por mí, no pasará nada de todos modos.

Pero si intentaba escalar la torre, terminaría herido. Se inclina y se inclina y cuando finalmente golpea el suelo, todo en la torre se hará añicos.

"¿Es necesario hablar tan duro?"

"... ... ."

Al escuchar la voz nerviosa de Ezra, me detuve. Luego se dio la vuelta y se encontró con un par de ojos rectos. Ojos dorados que no estaban mezclados con impurezas me miraron con un guiño.

Es gracioso. Que gente de ojos tan claros se atreva a tirarse al agua fangosa.

"Es una manera de saber desde aquí. Es bueno volver."

"Todavía... ... ."

"Es la forma en que lo sé. adiós."

Ante el tono frío, Ezra cerró la boca. Se aclaró la garganta y señaló el edificio donde se encontraba la posada.

"Puedes ir allí".

"Bueno, gracias."

Parecía querer decir algo más, pero lo ignoró y se alejó.