You... -SunSun

04

Ya había pasado el primer mes de Sunoo en aquella casa, y ya tenía casi 2 meses de embarazo. Igualmente ya habían ido al medio a supervisar que todo estuviera en orden. Aunque todo parecía más tranquilo, lo cierto es que seguía siendo incómodo para Sunoo.

—Sun ¿Por qué no has venido a la universidad? Los profesores están diciendo que si no vienes, perderás la beca.

Eso era un grave problema.

—Yo... Estoy algo indispuesto Taki, pero haré lo posible por ir mañana.

—Bien, puedo pasar por ti. Oh también, de qué crees que me enteré!!

—Oh, sabes que no me importan los chismes de la universidad. —aunque ciertamente si tenía curiosidad.

—Ya ves que los de último año ya están por graduarse, bueno, algunos están diciendo que sunghoon le pedirá matrimonio a Jake.

Bueno, ya era de esperarse, todos sabían que sunghoon y Jake era la pareja más popular del campus, todos habían estado presentes cuando juraron que algún día se casarían. Y valla que ya casi se cumplirá eso.

—Sun, sigues allí?

—Eh, si, eh... Estoy algo ocupado Taki, te llamo más tarde, vale?

—Mmmh está bien Sun, descansa y nos vemos mañana.

—Bien.

Y la llamada finalizó.

Bien ahora lo que necesitaba era un gran vaso de agua.

Sentía cierto amargo en la boca después de escuchar aquello, él estaba concientes, sunghoon se casaría con Jake y tendrían su felices por siempre. Pero ¿Que pasaría con el? ¿Que pasaría con su hijo? Bueno, tenía gran duda, pero justo en ese momento tendría la respuesta a ambas preguntas.

Sunoo ya estaba en la cocina bebiendo un baso de agua, podía sentirse ahora más relajado y ese sabor amargo había desaparecido. O eso hasta que Jake entro en la cocina.

—Oh, que gran sorpresa verte! —mostro esa hermosa indescriptible sonrisa.

—Hola. —El solo se limito a responder.

Podía sentir la incomodidad en cuanto Jake lo barrio con la mirada —Veo que el bebé crece muy rápido, tan solo tienes dos meses y ya se te comienza a notar la panza...

—¿Necesitas algo?

—No, solo te vi pasar y quise ver cómo ibas con mi futuro hijo.

—¿Tú... Qué? —se sentía confundido aunque quizá Jake solo lo decía para molestarlo.

—Oh, ¿madre no te lo dijo? Según tengo entendido, en cuanto nazca ese niño, quedarás libre de cualquier atadura a Sunghoon, pero no te preocupes Sunoo, cuidare muy bien a nuestro pequeño sunghoonie —volvio a sonreír y se dispuso a salir de la cocina, no sin antes:

—¿Vendrías a cenar? Oh, lo había olvidado, tu no cenas con nosotros por orden mía, adiós!

Y se fue.

Era cierto lo que decía, desde que llegó a esa casa, siempre desayunaba, comía y cenaba en su habitación, de por sí, nunca salía de.

Todo por qué? Claro, por que así Jake lo había querido. Si seguía sucediendo significaba que los padres de Park estaban de acuerdo.

A lo lejos pudo ver cómo preparaban la mesa para la cena, entonces lo mejor que pudo hacer, fue irse de nuevo a su habitación.

Aunque claro, no contó con que la madre de Park estuviera allí, observándolo. Más que nada, escucho la conversación que tuvo con Jake.