Guerra por volverte a ver...

PROLOGO...

Y ahora estoy aqui varada en medio de la nada y de todo, nada por que luchar mas que la guerra por volverte a ver.

No hay peor dolor que la insertidumbre y la duda de saber ¿donde estaras ahora?, ¿cuando nos volveremos a ver? o aún peor si nos volveremos aver... No se que hacer me siento sola, ahora te has ido y no se si volveras, solo me queda esperar la fecha en la que te abrazare de nuevo... me preguntó tanto si te volvere a tener cerca de mí... Me niego acreer que sea cierto parece un sueño convertido en pesadilla...

Te recuerdo, te anhelo, te siento pero no estas aquí.

Capítulo 1: LA NOTICIA

9 meses antes...

Era un verano común y corriente, hacia mucho calor y las hojas de los arboles se movían. Me encontraba en mi cuarto haciendo la tarea de el instituto, nunca imagine que mi vida cambiaria por completo... Mire a mi padre entrar a la habitación.

-Hola pricesa- dijo el.

-Hola papá ¿necesitas algo?- dije asombrada, papá tenia mucho tiempo sin llamarme "princesa".

-Me preguntó si podriamos hablar.

-Si claro, dime- dije y coloque mis libros en el buro.

-Bueno, sabes que en mi trabajo me pagan muy poco verdad?

Respondí un "si" con la cabeza.

-Esta bien, hable con un socio de Canadá y aaah....- suspiro.

Parecia como si fuera a darme una mala noticia y no tuviera idea de como decirmelo.

-Papá... dimelo- toqué su hombro.

-Ok... lo que pasa es que... me ofreció un muy buen empleo en Canadá y pues...

-¿MUDARNOS?- dije alterada.

-Si, hija- dijo mirandome fijamente.

No sabía que hacer o como reaccionar a la noticia.

-... ¿En cuanto tiempo nos iremos?

-En 1 semana.

-¿QUÉ?- dije con un gritó.

-Hija....- dijó en tono suave.

-Papá sal de mi habitación- dijé enojada.

-Pero hija...

-¡SAL!- lo interrumpi.

Salió con la cabeza abajo, deceocionado por mi reacción.

Despues de que cerro la puerta de mi habitación me quede paralizada un par de segundos sin despegar la vista de la puerta y con la mente en blanco, pero el ruido de la musica de los bailarine callejeros de mi vecindario hizo que volviera e inmediatamente brotaron lagrimas de mis ojos, no podía tolerar la idea de que me iria de aquí y dejaría toda una vida atras para empezar una nueva; y así continue llenando mi mente de ideas y mis ojos de lagrimas que se convertian en una eterna agonía hasta que me quede dormida en una esquina de la cama.

Capítulo 2: LA DESPEDIDA... (continuara)